El FBI verificó que una laptop de la que posteriormente se informó ampliamente que le pertenecía al hijo del presidente Joe Biden, efectivamente le pertenecía, dice un informante.
Gary Shapley, agente especial criminal del IRS, fue asignado para trabajar en una investigación sobre los impuestos de Hunter Biden. Él dice que fue removido por el Departamento de Justicia de Estados Unidos en mayo tras plantear inquietudes sobre desviaciones en los procedimientos normales.
Shapley dijo que la investigación del más joven de los Biden se abrió por primera vez en noviembre de 2018. Aproximadamente un año después, los funcionarios del FBI se dieron cuenta de que una laptop que habría pertenecido a Biden estaba en un taller de reparación, y se enteraron de que la computadora podría contener evidencia de un crimen.
«El FBI verificó su autenticidad en noviembre de 2019 cotejando el número del dispositivo con el ID de Apple iCloud de Biden», dijo Shapley al Congreso en una entrevista el 26 de mayo, cuya transcripción se publicó el 22 de junio.
“Cuando el FBI tomó posesión del dispositivo en diciembre de 2019, notificó al IRS que probablemente contenía evidencia de delitos fiscales”, agregó Shapley.
Un abogado de Biden no respondió a una solicitud de comentarios, como tampoco lo hizo el FBI.
John Paul Mac Isaac, dueño de una tienda de computadoras en Delaware, dijo que Biden dejó una laptop en la tienda el 12 de abril de 2019. Presentó una factura en la que aparece la persona a facturar como Hunter Biden, con una identificación de iCloud.
Dos días después, Biden le dio a Mac Isaac un disco duro al que le pidió que transfiriera la información de la computadora. Pero después de que Mac Isaac se pusiera en contacto con Biden para informarle de que el trabajo estaba terminado, Biden no respondió, según los archivos judiciales.
Mac Isaac declaró que acabó entregando el MacBook Pro de Apple al FBI. Una citación firmada por un agente del FBI ordenaba a Mac Isaac comparecer ante un gran jurado y llevar consigo la computadora y un disco duro externo. Mac Isaac dice que guardó una copia del disco duro «por si alguna vez lo tiraban debajo de un autobús» y posteriormente pasó el contenido a Rudy Giuliani, que lo transmitió al New York Post.
Shapley dijo que un agente del FBI solicitó y recibió el número de dispositivo de la laptop por parte de Mac Isaac y confirmó que la laptop pertenecía a Biden.
El Post publicó un artículo en octubre de 2020 sobre algunos de los contenidos, pero el artículo fue censurado por compañías de Big Tech como Twitter, que afirmaron que la historia se basaba en material hackeado.
Otras personas afirmaron, sin pruebas, que la historia era el resultado de desinformación rusa.
Los funcionarios del FBI habían advertido a las empresas de que Rusia estaría creando propaganda sobre las elecciones.
El FBI confirmó que emitió una advertencia, pero también dijo que “no puede pedir, ni ordenar a las empresas que tomen medidas sobre la información recibida”.
Funcionario del DOJ bloqueó a investigadores: Shapley
Shapley dijo que envió un correo electrónico a un alto funcionario del Departamento de Justicia casi al mismo tiempo planteando preocupaciones sobre el FBI «haciendo ciertas representaciones sobre el dispositivo.» Shapley dijo que a su equipo aún no se le había permitido acceder al ordenador o a su contenido.
Durante una reunión posterior, el 22 de octubre de 2020, la fiscal federal adjunta Lesley Wolf dijo que los fiscales decidieron ocultar los datos a los investigadores.
“Esta decisión no tiene precedentes en mi experiencia”, dijo Shapley. «A los investigadores asignados a esta investigación se les impidió ver todas las pruebas disponibles. Se desconoce si todas las pruebas fueron revisadas por los agentes o por los fiscales».
El Departamento de Justicia se rehusó realizar comentarios.
Shapley también citó a Wolf diciendo: «No tenemos motivos para creer que haya nada fabricado nefastamente en la laptop y/o el disco duro».
Otro denunciante, cuyo nombre no fue revelado, dijo al Congreso que los investigadores obtuvieron órdenes de registro electrónico, incluyendo cuentas de correo electrónico, cuentas de Microsoft QuickBooks, una cuenta de Apple iCloud, y “la laptop”.
Biden admitió haber infringido la ley fiscal federal, según documentos judiciales hechos públicos el 20 de junio. Él también fue acusado de un delito de posesión de armas, pero se ha sometido a un programa de derivación previa al juicio y es posible que se le retiren los cargos.
En el pasado, Biden se negó a decir si la computadora le pertenecía.
“Realmente no sé cuál es la respuesta”, dijo a CBS en 2021 cuando se le preguntó si la computadora era suya. “Podría haber una laptop por ahí que me robaron, podría ser que me hackearon, podría ser que fue la inteligencia rusa, podría ser que me la robaron».
Los abogados de Biden dijeron en febrero que los datos que compartió Mac Isaac eran de Biden, pero también dijeron que no estaban confirmando que provenían de una laptop perteneciente al hijo del presidente.
“Hasta donde yo sé, nunca ha habido un reconocimiento de que esta supuesta laptop—él continuamente la llama la laptop abandonada de Hunter Biden”, dijo Brett Langdon, otro abogado que representa a Biden, durante una audiencia judicial reciente. Cuando un juez preguntó si era la laptop de Biden, Langdon dijo que no podía responder esa pregunta.
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