La bolsa de Sao Paulo retomó las operaciones después una interrupción de media hora este lunes debido a la fuerte caída de su principal índice bursátil, y poco antes de la media sesión el índice Ibovespa volvía a desplomarse un 8.88 %.
En una jornada de gran volatilidad, la bolsa brasileña se situaba en los 89,297 puntos a las 12.30 hora local (15.30 GMT), tras haber cerrado el viernes en los 102,233 puntos, mientras que el dólar se apreciaba un 2 % frente al real y se vendía a 4727 reales en Brasil.
Todas las acciones del parqué brasileño navegaban este lunes en terreno negativo, contagiadas por las plazas del exterior, que registraron pérdidas masivas ante el desplome de los precios del petróleo y el avance del covid-19.
Los papeles que más se hundieron este lunes eran los de la petrolera estatal Petrobras, fuertemente afectados por la caída del precio del crudo a nivel internacional después de que la alianza entre la OPEP, Rusia y otros nueve productores petroleros fracasara el pasado viernes en Viena, al no lograr un compromiso sobre un nuevo recorte de la oferta conjunta de crudo.
Los papeles preferenciales de la petrolera perdían más de un 24 %, mientras que los ordinarios se dejaban alrededor del 23 %.
Asimismo, la prima de riesgo de Brasil escaló un 34 % este lunes en lo que supone su valorización más expresiva desde 2002, y estaba por encima de los 191 puntos al inicio de la jornada.
«El riesgo va acompañado del nerviosismo, del estrés y de la aversión al riesgo de los inversores y eso afecta sobre todo los países emergentes», explicó Silvio Campos Neto, de la consultora Tendencias a Efe.
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