La gente debería pagar más por la gasolina para salvar la democracia, dice el Foro Económico Mundial

Por Naveen Athrappully
14 de julio de 2022 3:31 PM Actualizado: 14 de julio de 2022 3:31 PM

Un artículo publicado en el sitio web del Foro Económico Mundial (FEM) hace un llamado para que el mundo haga la transición a la «energía verde», insistiendo en que hacerlo es la clave para proteger la democracia.

En el artículo, el profesor de economía de la Universidad Estatal de Colorado, Edward Barbier, afirma que el mundo se enfrenta a dos crisis globales: el cambio climático y el declive de la democracia. Para mantener el calentamiento global por debajo de 1.5 grados Celsius (34.7 grados Fahrenheit), el académico afirma que el mundo debe tomar medidas inmediatas y reducir las emisiones de carbono, lo que incluye el aumento del uso de tecnologías de energía verde.

Barbier comparó los datos de 83 países clasificados como «avanzados», «mercados emergentes» y «en desarrollo» para argumentar que las naciones que han tomado medidas hacia la energía verde son «en gran medida libres y democráticas». Por el contrario, los países que no están dando suficientes pasos hacia la transición verde son «por lo general menos libres y más autocráticos».

Pero la sugerencia dada en el artículo del FEM, de que reducir el consumo de combustibles fósiles ayudará contra la contaminación y al cambio climático, contradice los datos reales sobre las emisiones de Estados Unidos.

Problemas con la agenda verde

Después de que el presidente Joe Biden asumió al cargo en el año 2021, impulsó varias políticas de energía verde para reducir el uso de combustibles fósiles, pero las emisiones de carbono de Estados Unidos en realidad aumentaron en el año 2021 después de haber estado disminuyendo durante 10 años.

Algunos explican el aumento de las emisiones atribuyéndolo a la apertura de la economía tras la pandemia de COVID-19.

Pero otros señalan que Estados Unidos aumentó su uso del carbón bajo el gobierno de Biden debido a la actitud hostil del presidente hacia la industria de petróleo y gas, que ha derivado en un aumento de precios y en una inversión insuficiente para nuevas producciones y oleoductos.

A mediados de junio de 2022, la capacidad de refinado de petróleo de Estados Unidos se había reducido en 800,000 barriles diarios. La mitad de las refinerías que cerraron lo hicieron al ser reconvertidas para la producción de combustibles renovables.

Los líderes canadienses también han tomado nota de la crisis energética.

En una rueda de prensa celebrada el 11 de marzo, Sonya Savage, ministra de Energía de Alberta, Canadá, señaló que la invasión rusa de Ucrania había puesto de manifiesto la debilidad de la política energética estadounidense, añadiendo que durante las últimas décadas, las democracias occidentales se han centrado en el cambio climático y en la reducción de las emisiones de carbono sin tener en cuenta la seguridad energética.

Esta «fallida estrategia energética norteamericana» ha puesto a Estados Unidos y Canadá en una posición en la que es difícil aumentar o incluso mantener la producción energética nacional, dijo a continuación. En cambio, Rusia puede aumentar la producción sin tener que cumplir ninguna norma medioambiental.

Esto se traduce esencialmente en la «transferencia de la producción de petróleo y gas de Norteamérica a lugares como Rusia», dijo Savage.

Barbier señaló la invasión de Rusia en Ucrania y la resultante crisis energética para apoyar su argumento de que los países que no aspiran a una economía baja en carbono podrían correr un «mayor peligro económico».

Su recomendación es que las naciones industrializadas eliminen gradualmente los insentivos fiscales a los combustibles fósiles, impongan mayores impuestos a las importaciones «intensivas en carbono» de otros países y reformen los mercados de combustibles fósiles para financiar las inversiones e innovaciones ecológicas.

Si se aplicaran estas medidas, subirían los precios de los combustibles fósiles y, en consecuencia, aumentarían los precios de la gasolina y la energía.

Agricultores holandeses luchan contra los mandatos de la FEM

La situación actual en los Países Bajos entre el gobierno holandés y los agricultores holandeses también parece contradecir la afirmación de Barbier sobre que las políticas medioambientales verdes conducen a una mayor libertad.

En un intento de reducir la producción de nitrógeno para cumplir con los objetivos de emisiones de acuerdo con las recomendaciones del Foro Económico Mundial, el gobierno holandés anunció planes que obligarían a los agricultores de algunas zonas a reducir su producción de nitrógeno en un 95 por ciento y a sacrificar los rebaños de ganado, lo que provocaría el sacrificio masivo de animales y una importante destrucción de las explotaciones agrícolas.

Los agricultores que no cooperen con el mandato se enfrentan a la confiscación de sus tierras de labranza por parte del gobierno, según un informe del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (pdf).

Holanda es el segundo exportador de alimentos del mundo.

Los agricultores y camioneros de los Países Bajos han protagonizado importantes protestas contra los mandatos medioambientales, cerrando centros de distribución de alimentos y aeropuertos en un intento de obligar al gobierno a dar marcha atrás.


Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí


Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando

¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.