¿Qué fundamenta el creciente movimiento de hispanos en los Estados Unidos hacia un voto más conservador en elecciones legislativas y federales? Este hecho, evidenciado por encuestas, participación en actividades políticas públicas y también por los resultados en votaciones recientes, es uno que arroja luz no solamente sobre el balance político en los Estados Unidos, sino también sobre la compleja definición de la identidad hispana-americana. La crucial importancia en el Colegio Electoral de varios estados con gran número de hispanos, convierte a esta pregunta en una de gran importancia en términos de estrategia política.
Ciertamente, uno de los factores que contribuye a un creciente perfil conservador para los hispano-americanos es la política exterior de los Estados Unidos. La creciente influencia del régimen totalitario cubano y de sus aliados chinos y rusos en la región es un tema clave para grupos hispanos cada vez más organizados políticamente.
La persistente dictadura en Venezuela, la cada vez más brutal tiranía en Nicaragua, y la llegada al poder en varios países latinoamericanos de gobiernos que simpatizan activamente con estos regímenes, ha resultado en una mayor unidad y participación política por parte de hispanos profundamente preocupados por el auge del socialismo en América Latina y en los Estados Unidos.
“Ver cómo la creciente ola de socialismo en la América Latina también se siente aquí, el constatar que estoy viendo cosas en los Estados Unidos que me recuerden a lo que viví en Nicaragua cuando era joven, fue mi principal motivación para participar como candidato”, dice el Dr. Rafael Cárcamo, nicaragüense de origen y médico de profesión que aspira como republicano a ser congresista por el Distrito 35 del sur de California.
La exitosa participación de la comunidad cubano americana en la política americana, que a pesar de ser una minoría dentro de los hispanos ha logrado una gran influencia en Washington D.C., ha sido un ejemplo a seguir para líderes y activistas hispanos preocupados por la penetración marxista en la América Latina y en los Estados Unidos.
“Los líderes cubano americanos como Jorge Mas Canosa, Rafael Diaz-Balart y Enrique Ros, fueron un aprendizaje para nosotros sobre cómo lograr representación de nuestra comunidad en la política”, dice Fabio Andrade, exitoso empresario quien ha sido uno de los principales y más efectivos organizadores de la comunidad colombiana en el sur de la Florida. “El expansionismo comunista afecta en bloquear todos nuestros derechos”, añade.
Esta preocupación por la política exterior es compartida por muchos hispano-americanos de manera bipartidista. La oposición cabal al comunismo es sentida tanto por liberales como conservadores en la comunidad.
Un buen ejemplo de esto son el senador por el estado de New Jersey, Bob Menendez, líder demócrata de la Comisión de Asuntos Internacionales del Senado americano, así como Albio Sires, el representante también demócrata residente en West New York. Para el influyente activista político y empresario cubano americano de New Jersey, Mario Fernández, quien fue pionero en coordinar con otras comunidades hispanas en temas de interés mutuo, “el anti comunismo es algo que une a los hispanos demócratas, republicanos e independientes”.
El anti-comunismo de los hispanos tiene mucho que ver con los valores tradicionales que unen a las diferentes comunidades que componen la comunidad hispana.
“Los valores tradicionales, el legado espiritual, la familia como centro de nuestras comunidades y sociedades, la herencia de principios que nos unen con nuestros abuelos y padres, hijos y nietos en el presente; es una fuerza muy poderosa para los hispanos. Creemos fundamentalmente en la libertad individual, pero generalmente para el hispano esa libertad individual es parte armónica del amor y la unión familiar. Conservar la familia es siempre un valor para los hispanos”, agregó el Dr. Cárcamo.
Entender la identidad hispana es también parte de comprender las preocupaciones de estas comunidades. Cada hispano está orgulloso de sus respectivos países de origen, pero a la vez valoran mucho al español como lengua común que los une con una gran civilización universal. Históricamente, el imperio español era una comunidad plurinacional eventualmente fragmentada por el militarismo y los nacionalismos modernos a ambos lados del Atlántico.
“Hablar de Hispanidad supone hablar del origen de América tal y como la conocemos hoy y por la que luchamos a diario los conservadores. La llegada de los españoles a un continente desconocido y el mestizaje que se produjo a continuación dio lugar a la creación de lazos de sangre y de una gran familia que es precisamente con lo que izquierda pretende acabar”, opina la Dra. María Herrera Mellado, joven abogada de origen español que representa al Partido Vox español en el estado de la Florida.
“Los conservadores estadounidenses deben estudiar más su pasado hispano para entender cómo gracias a la conformación de la hispanidad se llevaron a cabo los mayores hitos de la historia moderna: las expediciones y rutas marítimas que condujeron al descubrimiento de América… entre ellos la transcripción de las primeras gramáticas escritas en otras lenguas distintas al español, es el caso del náhuatl que se convirtió en la primera lengua indígena en poseer una gramática–antes incluso que el francés–la aprobación e implementación de las primeras leyes internacionales en materia de protección de los derechos de los aborígenes o de los matrimonios internacionales” añadió la jurista.
Para las diferentes comunidades hispanas en los Estados Unidos, su participación histórica en lograr la independencia y la fundación de los Estados Unidos es poco reconocida fuera de las mismas, pero una constante fuente de orgullo. No se sienten como espectadores del logro de las libertades en Estados Unidos, si no como participantes con la responsabilidad de contribuir a protegerlas ante el peligro de un mal totalitario que conocen.
“No podemos quedarnos callados”, expresó Ernesto Ackerman, judío venezolano que fundó y dirige la influyente agrupación política venezolano-americana “Independent Venezuelan Citizens” (IVAC) en Miami. Ese sentido del deber y la protección de un legado de libertades encontrados en los Estados Unidos parece ser el poderoso acicate despertando a los hispanoamericanos en los Estados Unidos.
El Dr. Orlando Gutiérrez-Boronat es escritor, educador y analista. Es el cofundador y portavoz del Directorio Democrático Cubano.
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