Licencia parental remunerada es una gran idea—Es tiempo de que los republicanos se den cuenta

Por Nicole Russell
21 de diciembre de 2019 10:44 AM Actualizado: 21 de diciembre de 2019 10:44 AM

Comentario

Los republicanos han afirmado durante mucho tiempo que son el partido que apoya la unidad familiar. A pesar de haberse resistido durante años, el Partido Republicano parece estar finalmente aceptando la licencia familiar remunerada, una política que, si se diseña bien, seguramente será de gran ayuda para los padres que luchan por sus hijos, sin acrecentar demasiado la burocracia del gobierno.

Apenas la semana pasada, Ivanka Trump anunció que el Congreso ofrecerá 12 semanas de licencia parental remunerada a los 2.1 millones de empleados federales del gobierno. La provisión de 3300 millones de dólares es parte de la Ley de Autorización de la Defensa Nacional (NDAA), que fue aprobada por la Cámara de Representantes, y se espera que el Senado también la apruebe pronto.

«Queremos que Estados Unidos sea el mejor lugar del mundo para vivir, trabajar y criar una familia», anunció Ivanka Trump en la «Cumbre sobre Cuidado Infantil y Licencia Parental Remunerada» de la Casa Blanca el 12 de diciembre.

El costo es un factor para criar una familia, y los legisladores han intentado jugar con cosas como el crédito fiscal por hijo o la licencia parental remunerada para aliviar la creciente carga. Las estadísticas muestran que, en 2015, costo aproximadamente 233,610 dólares criar a un niño desde su nacimiento hasta los 17 años. Esos costos se dispararon en un 40 por ciento desde el año 2000 hasta el 2010, y si usted es un padre o una madre ha sentido ese aguijón.

Como tal, ya es hora de que el partido provida y profamilia respalde la licencia parental remunerada, si no a nivel estatal, entonces animando a las empresas privadas a ofrecerla a través de la presión positiva de los pares corporativos.

Relación complicada

Estados Unidos ha tenido una relación complicada con la licencia familiar remunerada, a pesar de su popularidad —y el hecho de que generalmente es obligatoria— en otras partes del mundo.

En 2016, NPR informó: «De los 193 países de las Naciones Unidas, solo un pequeño puñado no tiene una ley nacional de licencia parental remunerada: Nueva Guinea, Surinam, algunas naciones insulares del Pacífico Sur y Estados Unidos».

Sin embargo, eso ha empezado a cambiar lentamente. En general, la mayoría de los trabajadores están cubiertos por la Ley de Licencia Médica Familiar, que permite hasta 12 semanas de licencia sin goce de sueldo por año para cuidar a los miembros de la familia.

Según datos de 2018 de la Society for Human Resource Management (Sociedad de Gestión de Recursos Humanos), más de un tercio de los empleadores de EE.UU. ofrecieron licencia de maternidad remunerada más allá de la cantidad exigida por la ley, en comparación con cerca de un octavo en 2014. Muchos empleadores han descubierto que esta es una buena manera de mantener a los empleados contentos sin necesariamente aumentar los salarios. Sin embargo, en 2018, todavía sólo el 17 por ciento de los trabajadores civiles de EE.UU. tenían algún tipo de licencia familiar remunerada, según la Oficina de Estadísticas Laborales.

Aunque la licencia de maternidad con goce de sueldo es más común y los demócratas han estado abogando por la licencia parental con goce de sueldo durante un tiempo, los republicanos finalmente se están poniendo al día —y no es demasiado pronto.

El año pasado, los legisladores propusieron varias formas de permiso familair remunerado, pero ninguna de ellas estuvo ni siquiera cerca de una votación en el pleno.

En su discurso sobre el Estado de la Unión de este año, el presidente Donald Trump renovó su llamamiento a un plan federal de licencia parental remunerada diciendo: «También me siento orgulloso de ser el primer presidente en incluir en mi presupuesto un plan de licencia parental remunerada a nivel nacional —para que cada nuevo padre tenga la oportunidad de establecer un vínculo con su hijo recién nacido».

Si bien no soy partidario de una licencia parental remunerada obligatoria en todo el país, me inclino a decir que los estados deben seguir intentándolo: El permiso parental remunerado aumenta la satisfacción de los padres, lo que a su vez produce empleados felices. Los empleados felices incrementan la productividad y son una bendición para la economía. Muchas empresas privadas ya lo saben: Empresas como Dell, Spotify, Twitter y Facebook ya ofrecen paquetes generales de licencia parental remunerada.

La licencia familiar remunerada es estupenda para las nuevas mamás, pero especialmente para los nuevos papás. Los estudios muestran que los padres que toman más de un par de semanas de licencia están más involucrados en el cuidado diario de sus hijos casi un año más tarde en la vida del niño que aquellos que no lo hacen. Las políticas de licencia de paternidad remunerada en el trabajo también podrían ayudar a retener a los trabajadores más capacitados.

Propuestas anteriores

En este momento, solo un puñado de estados y el Distrito de Columbia tienen leyes de licencia parental remunerada. El 1 de enero, los residentes del estado de Washington comenzaron a pagar su política obligatoria de licencias remuneradas, que es básicamente su versión de la Ley de Licencia por Seguro Médico y Familiar (FAMILY Act), que fue presentada por primera vez al Congreso en 2013.

En este modelo que muchos demócratas apoyan, los empleados y los empleadores pagan una pequeña cantidad de cada cheque de pago a un fondo de seguro para pagar la licencia.

En el estado de Washington, los trabajadores pueden tomar hasta 12 semanas de licencia remunerada por año después del nacimiento de un hijo, por una enfermedad grave o para cuidar a un familiar enfermo. Los trabajadores y los empleadores pagan una prima del 0.4 por ciento a un fondo. Los empleadores pueden pagar la totalidad de la prima o pueden retener hasta el 63 por ciento de la prima del cheque de pago del trabajador.

Algunas personas, como los empleados federales, los trabajadores autónomos o las tribus reconocidas por el gobierno federal, están exentas de la ley. A menudo se dice que es algo que ayuda a los trabajadores de bajos ingresos —sin comprometer los beneficios del Seguro Social en el futuro.

Los republicanos introdujeron varios tipos diferentes de legislación de licencia parental pagada en 2018. El senador Marco Rubio (R-Fl.) trabajó con Ivanka Trump en un proyecto de ley —la Ley de Seguridad Económica para Nuevos Padres— que muchos conservadores favorecieron más. Su plan habría permitido a los empleados recurrir a los fondos del Seguro Social durante dos meses de su licencia «remunerada». A cambio, los empleados retrasarían la recepción de sus beneficios en unos seis meses, después de la jubilación. Los beneficios habrían sido transferibles para padres y madres. Para muchas familias, esto habría sido un pequeño precio a pagar.

Lo bueno de la propuesta de ley de Rubio fue que no era un programa obligatorio del gobierno pagado a través de un impuesto, y no afectaba a todo el mundo. (Esto habría sido injusto para las parejas sin hijos, las familias que ya han tenido hijos, o las familias que no participarían).

Los críticos no estaban tan contentos. Un colaborador de One Fortune dijo, «La política de permisos pagados de Ivanka Trump sería desastrosa», argumentando que este tipo de permiso familiar remunerado no funcionaría bien para las personas con trabajos de menor remuneración, ya que tendrían que retrasar la jubilación hasta casi los 68 años si tuvieran dos hijos.

Sin embargo, los republicanos lo intentaron de nuevo en marzo de este año, con los senadores Joni Ernst (R-Iowa) y Mike Lee (R-Utah) presentando un proyecto de ley similar al de Rubio como la Ley CRADLE.

Sus partidarios creen que está claro que la licencia parental remunerada es útil para la unidad familiar, lo que a su vez se traduce en una ayuda para la economía. La pregunta es, si es tan beneficioso, ¿por qué no lo hacen más estados? ¿Por qué no lo hacen más empleadores?

Vanessa Brown Calder, analista de políticas del Instituto Cato, piensa que los planes ofrecidos por ambos lados son demasiado diferentes. «La Ley de Familia de los Demócratas depende de un impuesto sobre la nómina para su financiación, un anatema para muchos republicanos. El plan de Rubio se basa en el programa de Seguro Social existente, y los demócratas están preocupados de que saque los beneficios de la SS para los ancianos, mientras que los republicanos están considerando añadir obligaciones adicionales al programa de Seguro Social existente, que ya está en problemas financieros, por supuesto».

Es de esperar que esta nueva disposición que ofrece licencia parental remunerada a los empleados federales estimule a otros estados, o al menos a otras corporaciones privadas, a ofrecer a sus empleados lo mismo.

Nicole Russell es escritora independiente y madre de cuatro hijos. Su trabajo ha aparecido en The Atlantic, The New York Times, Politico, The Daily Beast y The Federalist. Sígala en Twitter @russell_nm.

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Las opiniones expresadas en este artículo son propias del autor y no necesariamente reflejan las opiniones de The Epoch Times

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