Más de 1500 personas cruzaron ilegalmente la frontera entre Estados Unidos y México para entrar en El Paso (Texas) en la madrugada del 12 de diciembre, según imágenes de video tomadas en el lugar de los hechos y medios de comunicación locales, en lo que, según los reportes, podría ser uno de los mayores cruces jamás realizados en la región.
Imágenes de la frontera compartidas en las redes sociales por el medio de comunicación El Paso Matters mostraban a un grupo masivo de migrantes caminando por el agua hacia la otra orilla del río durante la noche.
Una vez al otro lado del río, los extranjeros ilegales esperaron en una larga fila para ser procesados por los funcionarios de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza de Estados Unidos (CBP, por sus siglas en inglés).
El video mostraba a personas acurrucadas junto a fogatas tratando de mantenerse calientes mientras esperaban a ser procesadas, mientras que otras imágenes —una vista panorámica de la fila de personas que esperaban en fila— revelaban lo masivo que era el grupo que cruzó la frontera hacia Estados Unidos.
La CBP dijo en un comunicado el lunes que el aumento de los encuentros en el sector de El Paso significaba que los agentes de la Patrulla Fronteriza de otros sectores habían sido llamados para ayudar con el procesamiento.
Durmiendo en las calles
Los individuos que cruzaron el domingo por la noche formaban parte de un grupo de migrantes que fueron escoltados por la policía estatal mexicana desde la ciudad de Jiménez hasta Juárez en una caravana de 20 autobuses, según El Paso Matters, que estimó el tamaño total del grupo que cruzó durante la noche en más de 1500 personas.
Los extranjeros dijeron que procedían de Ecuador, Nicaragua y Perú, según el medio de comunicación, que estimó que éste podría haber sido el mayor cruce fronterizo de la región en toda la historia.
Más de 5600 extranjeros ilegales estaban retenidos desde el 13 de diciembre en el Centro Central de Procesamiento de la Patrulla Fronteriza, según un tablero de la ciudad de El Paso. El centro tiene capacidad para unos 3500.
El representante Tony Gonzales (R-Texas) dijo en un posteo de Twitter que la capacidad del centro de procesamiento se había rebasado y que algunas personas estaban durmiendo en las calles de la ciudad.
«¡Migrantes durmiendo en las calles de El Paso! Así se ve la Nueva Isla Ellis: 611 migrantes en las calles porque las ONG ya no tienen espacio; cada agente de la Patrulla Fronteriza en los centros de procesamiento sobrepasando la capacidad con 5000 personas. Esto es exactamente lo que querían los demócratas».
Los republicanos llevan mucho tiempo acusando a los demócratas de abogar por una política de fronteras abiertas, aunque el gobierno de Biden lo ha negado en repetidas ocasiones.
El secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, ha reconocido que la situación a lo largo de la frontera sur es «difícil», aunque ha insistido en que la Administración Biden quiere un «sistema de inmigración seguro, legal y ordenado que se base en nuestras prioridades fundamentales: mantener nuestras fronteras seguras, abordar la difícil situación de los niños como exige la ley y permitir que las familias estén juntas».
Mayorkas dijo recientemente que la retórica republicana que afirma que la «frontera está abierta» estaba ayudando a alimentar la afluencia.
«El grito político de que la frontera está abierta es música para los oídos de los contrabandistas, porque toman esa retórica política y la comercializan» a los migrantes desesperados, dijo Mayorkas a The Dallas Morning News.
Aun así, cuando el presidente Joe Biden asumió el cargo, una de sus primeras medidas fue cancelar la política de «Permanecer en México» de la era Trump.
Esa regla significaba que los solicitantes de asilo debían permanecer en México mientras se procesaban sus solicitudes de asilo, con cifras que mostraban que la política desalentaba las solicitudes de asilo falsas y disminuía el flujo de inmigración ilegal.
«Aumento considerable»
Peter Jaquez, jefe interino de la patrulla del sector de El Paso, que cubre 264 millas de frontera entre Estados Unidos y México, dijo que el sector experimentó un «aumento importante» de cruces ilegales de la frontera en los últimos días.
«Durante el fin de semana, el sector de El Paso experimentó un gran aumento en los cruces ilegales, con un promedio de 3 días de 2460 encuentros diarios, principalmente a través de la zona centro de El Paso», dijo Jaquez en un posteo en Twitter.
«Seguiremos manteniendo informado al público a medida que evolucione la situación», agregó.
Breaking! Over the weekend, the El Paso Sector experienced a major surge in illegal crossings, with a 3-day average of 2,460 daily encounters, primarily through the downtown area of El Paso. We will continue to keep the public informed as the situation evolves. pic.twitter.com/V2pOO6Y31N
— Peter Jaquez (@USBPChiefEPT) December 12, 2022
La CBP dijo en un posteo el lunes en Facebook que, en las últimas 48 horas, había habido más de 16,000 encuentros con extranjeros ilegales en la frontera.
Eso supone un promedio de 8000 personas al día sorprendidas intentando cruzar ilegalmente la frontera.
Las autoridades se preparan para una oleada de inmigrantes ilegales
Las autoridades estadounidenses se preparan para lo que podría ser una oleada aún mayor de extranjeros ilegales que cruzan la frontera sur, ya que la restricción del Título 42 que se promulgó bajo el mandato del expresidente Donald Trump finalizará el 21 de diciembre.
El Departamento de Seguridad Nacional estima que entre 9000 y 14,000 migrantes podrían intentar ingresar ilegalmente al país cada día cuando termine la política.
Creado como parte de la Ley de Servicio de Salud Pública bajo el presidente Franklin D. Roosevelt en 1944, el Título 42 fue diseñado para prevenir la introducción de enfermedades contagiosas en los Estados Unidos.
La política fue emitida por la Administración Trump en 2020 al comienzo de la pandemia de COVID-19.
Los extranjeros ilegales procesados en virtud de esta política no pueden solicitar asilo en Estados Unidos y son expulsados del país.
En teoría, el Título 42 cubre las fronteras con Canadá y México y a los extranjeros de todas las nacionalidades. Se ha utilizado sobre todo en la frontera sur para expulsar de Estados Unidos a extranjeros ilegales de México, Guatemala, Honduras y El Salvador.
Casi 2.4 millones de extranjeros ilegales fueron detenidos por agentes estadounidenses a lo largo de la frontera sur en el año fiscal 2022, que terminó el 30 de septiembre.
Las estadísticas federales indican que más de 1 millón de los encuentros condujeron a que los inmigrantes fueran expulsados del país bajo el Título 42.
Una vez que se elimine el Título 42, el número de extranjeros ilegales que los agentes de la Patrulla Fronteriza deben procesar «probablemente será el doble o mayor», según un informe de la Oficina del Inspector General del Departamento de Seguridad Nacional de EE. UU. publicado en septiembre.
No está claro qué planea hacer el gobierno de Biden cuando se ponga fin al Título 42 el 21 de diciembre.
Con información de Jeff Louderback.
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