Este fin de semana miles de españoles salieron a las calles del centro Madrid marchando pacíficamente contra las políticas implementadas a causa del virus del PCCh (Partido Comunista Chino), que causa la enfermedad de COVID-19.
Los españoles se concentraron en el centro de Madrid con consignas en las pancartas como «Enamórate de la libertad» y «Defiende al pueblo español», «No me vacuno» para demostrar su descontento por las restricciones a sus derechos ciudadanos por el pasaporte sanitario contra COVID-19.
Los gobiernos lo están haciendo mal, nos están engañando a todos, nos están manipulando, por eso quiero alzar la voz y no quedarme callada», dijo Marta Isabel, una camarera a The Associated Press.
«Es una manipulación, una pieza de ajedrez de este juego maquiavélico que lo único que pretende es quitarnos la individualidad», dijo Teresa, una masajista a AP.
Algunos españoles señalan que la pandemia es un plan organizado para controlar a la sociedad y viola los derechos de los ciudadanos.
A Madrid se le sumó la comunidad autónoma de Valencia, donde cientos de ciudadanos se concentraron enfrente de la plaza del Ayuntamiento de Valencia contra el pasaporte sanitario COVID-19, y a favor de sus derechos, y de la libertad y la vida, informó en su canal de Telegram, Unión Activa Valencia.
A fines de noviembre, miles de españoles en Valencia habían salido a protestar contra los pasaportes de vacunación COVID-19 que son obligatorios a partir del 3 de diciembre, luego de que el grupo Unión Activa Valencia convocara a una manifestación, llamando a una “Gran cacerolada, no al pasaporte COVID” frente al Ayuntamiento de Valencia el 27 de noviembre.
Los manifestantes señalaron que el pasaporte de COVID “no es sanitario, es totalitario”.
“El Pasaporte QR carece de justificación sanitaria, pues en ningún caso permite controlar la circulación del virus y podría ser el pistoletazo de salida de lo que ya se está viendo en varios países de Europa: un dispositivo que desactiva derechos y libertades que de por sí ya teníamos los ciudadanos”, dijo el grupo al medio El Periòdic, en noviembre.
Algunos establecimientos se unieron a las demandas de los ciudadanos españoles y comenzaron a colocar en sus puertas letreros que decían “Zona Libre, No al pase COVID, inconstitucional”.
Aunque en España, en general hay una gran aceptación por las vacunas, los contagios diarios siguen en aumento en las últimas semanas. Hasta el 10 de diciembre, el Centro de Coordinación de Alerta del Ministerio de Salud de España confirmó un total de 5,290,190 casos y 88,381 fallecidos, con 153,298 casos diagnosticados en los últimos 14 días a causa de COVID-19.
Además, el Ministerio de Sanidad en España aprobó la vacuna para niños de entre 5 y 11 años que entrará en vigor el 15 de diciembre.
Por su parte, la directora general de Salud Pública, Pilar Aparicio, dijo este lunes que, aunque «siempre hay cosas que cambiar y mejorar», en la actual pandemia la estrategia de vacunación ha sido una auténtica «hazaña» cuya clave del éxito ha sido la confianza de la población.
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