Esta es una historia tan tierna que te robará el corazón; llena de amor, risas y una ardilla muy especial.
¿Alguna vez has soñado con tener tu propio restaurante de comida rápida? Bueno, una adolescente de Texas hizo realidad ese sueño, pero con un toque único y peludo. Riley Morgan, de 14 años, se convirtió en la dueña más adorable de un «Whataburger» para ardillas.
Todo comenzó cuando Riley y su gemela Gracie encontraron a dos crías de ardilla huérfanas en la calle.
«Tenía dos crías de ardilla», explica a The Epoch Times su padre, el señor Keith Morgan. «Por supuesto, las niñas se quedaron en plan: ‘¡Oh, no!’ Espantaron a la gatita, pensando que quizá se habían caído del árbol, así que las devolvimos a su sitio. Eran bastante pequeños, así que los vigilamos y unos minutos después volvimos a salir, y estaban de nuevo en el suelo».
Desafortunadamente, una no sobrevivió, pero la otra, a la que llamaron Dale, se convirtió en la nueva mascota de la familia.
«Fue desgarrador», dijo el Sr. Morgan, «pero ver cómo su duro trabajo dio sus frutos, lo mucho que cuidaron de esa pequeña ardilla, fue gratificante de ver como padre, sin duda».
Riley, siendo una amante de los animales, se encargó de cuidar y criar a Dale con todo su amor. «Riley es la amante de los animales de la casa», dijo el Sr. Morgan. «Llegó un momento en que abría su jaula y él venía corriendo hacia ella, se sentaba en su regazo y jugaba con ella».
A medida que Dale crecía, exploraba el patio y trepaba a los árboles, pero siempre volvía a su casita por la noche. Fue entonces cuando Riley tuvo una idea brillante: ¿por qué no construirle a Dale su propio restaurante de Whataburger?
«Riley es una gran fan de Whataburger», explicó su padre. «Me gusta trabajar la madera y hacer pequeñas manualidades… Siempre intento encontrar cosas que mis hijas y yo podamos hacer juntos».
Así que Riley y su padre se pusieron manos a la obra. Después de dos días de diseño, pintura y montaje, ¡la casa del árbol de Whataburger para ardillas estaba lista! Incluso tenía el nombre de Dale y comida para animarla a usarla.
Los visitantes de la casa Morgan se deleitaban viendo a Dale en su pequeño paraíso de comida rápida. Algunos incluso tuvieron la suerte de alimentarla a mano. «¡Eh, está en su casa, escondiéndose de la lluvia! Ella estaba muy emocionada de verlo usarlo ese día», dijo el Sr. Morgan con orgullo.
La historia de Dale y su casa de Whataburger se volvió viral, conmoviendo a miles de personas en las redes. Después de un año de vivir la vida de ensueño de una ardilla, Dale decidió regresar a la naturaleza, pero su legado permanece en el corazón de la familia Morgan.
Riley sigue siendo una apasionada defensora de los animales, rescatando pájaros y acogiendo crías de conejo en su patio trasero. En una de las fotos familiares favoritas, todos sostienen a un conejo rescatado, y Gracie sostiene a la legendaria Dale.
Esta historia es una dulce reminiscencia de que los sueños más pequeños pueden convertirse en realidades gigantescas, y que el amor por los animales puede unir a una familia de maneras inesperadas y encantadoras. Así que, la próxima vez que veas a una ardilla, recuerda a Dale y su hogar de comida rápida personalizado. ¿Quién sabe? Quizás también puedas hacer realidad el sueño de un animal peludo.
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