Un par de artistas con ideas descabelladas sobre los materiales que utilizan están esculpiendo animales naturalistas tan hermosos que no creerá de qué están hechos.
Un retrato asombrosamente realista de una pareja de leones en un abrazo amoroso se representa con tal detalle y delicadeza, que es difícil imaginar que estén hechos de cartón de embalaje viejo y gastado.
Esta extraña y desconcertante yuxtaposición entre el arte y el medio elegido por los artistas —lo que la mayoría de la gente consideraría basura— tiene una razón sensata, incluso profunda, detrás.
Para los artistas neoyorquinos Sue Beatrice y Andy Gertler tiene todo el sentido del mundo: ¿qué mejor manera de mostrar la naturaleza que utilizar lo que le aflige —los residuos de los vertederos— y convertirlo en algo que celebre su belleza natural? Esto es el reciclaje en su máxima expresión. Arte con diálogo.
Los escultores explicaron a The Epoch Times que su obra trata de establecer la «conexión entre la fragilidad de las especies y las limitaciones de los recursos naturales».
El cartón permite una combinación de flexibilidad y resistencia, así como una variedad de grosores y texturas, lo que resulta útil para dar a los leones su aspecto real.
«Utilizamos una gran variedad de cajas, tanto de una sola capa como de cartón ondulado, así como bolsas de papel marrón», explican. «Los diferentes grosores son útiles: las secciones más resistentes se utilizan como soportes interiores y las piezas más flexibles para formar curvas como la musculatura de los animales. Intentamos que las piezas que utilizamos sean de colores muy parecidos para conseguir un aspecto más cohesionado».
Para combinar las piezas, utilizan pistolas de pegamento caliente y un método para cortar y encajar el cartón como un rompecabezas, lo que lo hace bastante resistente. Para el pelaje, utilizan miles de trocitos de papel pegados simplemente con pegamento Elmer.
Los dos leones son también asombrosamente realistas; como los artistas son escultores profesionales, no son ajenos al estudio anatómico. Beatrice ha trabajado para Franklin Mint, un fabricante de juguetes, y para Disney; mientras que Gertler dirige una empresa de escultura en arena y también ha esculpido en hielo para el Guinness World Records.
Explicaron cómo capturaron la anatomía del león con tanta precisión:
«En el interior de cada uno de los leones hay un cráneo exacto formado por vistas laterales y superiores», compartieron. «Queríamos trabajar a tamaño natural, así que investigamos los tamaños de los cráneos y partimos de ahí».
«El realismo es algo que siempre buscamos. Investigamos mucho sobre la anatomía y los movimientos de un animal antes de esculpirlo».
Pero la inspiración detrás de los leones amorosos es más profunda que la superficie de cartón y el pegamento con el que están hechos. «Vimos unos vídeos maravillosos que mostraban lo cariñosos que pueden ser los leones dentro de la manada y eso nos llevó a esta conmovedora pose», explican los artistas.
Este homenaje felino a la naturaleza es, en realidad, el primero de una serie de retratos de animales africanos que acabará convirtiéndose en una exposición itinerante, o tal vez en una galería.
«Actualmente estamos creando un elefante bebé de tamaño natural y tenemos planes para muchas más piezas», dicen los escultores. «Hay entre 10 y 12 diseños que esperamos añadir. Todos ellos serán animales amenazados o en peligro de extinción. Esta primera serie será de animales africanos».
Mientras tanto, los leones se han hecho virales en redes sociales, y fans de todas partes han buscado a la pareja de artistas para preguntarles cómo lo han hecho.
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