Una diminuto y peligroso animal marino conocido como «dragón azul», ha estado apareciendo con más frecuencia en playas de vacacionistas.
Erick y Ana Yanta, una pareja de San Antonio, Texas, fue de visita a Mustang Island, una isla de barrera en la costa del Golfo de México, en el mismo estado, según informó CNN.
Mientras paseaba por la playa la pareja se encontró con un diminuto animal de apenas 1 pulgada aferrado a una roca. El extraño espécimen llamó fuertemente su atención por lo que lo levantaron y comenzaron a grabarlo en video.
Sin imaginar que a pesar de lo pequeño, el animalito era peligroso si lo llegaban a tocar, la pareja quiso compartir su hallazgo en redes sociales para que alguien los ayudara a identificarlo.
Y encontraron la respuesta a su petición. El extraño y bello animalito era un tipo de babosa marina llamado Glaucus atlanticus, conocido por los científicos desde hace más de 300 años.
Ha sido llamado «dragón azul», y a menudo terminan en charcos rocosos entre las mareas altas, pero su belleza esconde un arma temible.
Para evitar a los depredadores, esta babosa de mar ingiere las células del aguijón de la carabela portuguesa (o falsa medusa), y las transfiere astutamente a las puntas de sus ceratas, sus apéndices en forma de ala situados a los costados de su cuerpo.
Las células ingeridas se convierten en una formidable defensa del «dragón azul» que, si llegan a picar, puede ser muy doloroso.
No es aconsejable recogerlos ya que el dragón azul tiene la capacidad de lanzar un potente aguijón, incluso mucho después de que haya muerto.
Pero Erick dijo que «aún de haber sabido» que era un espécimen peligroso, de cualquier manera «hubiera agarrado al animal para filmarlo» antes de regresarlo al mar.
Otro avistamiento se dio el 2 de mayo del 2020, cuando Hunter Lane, un niño de 7 años de Mesa, Arizona, encontró cuatro dragones mientras estaba de visita en Padre Island National Seashore, en Texas.
«Hunter ama a las criaturas marinas y pensó que había encontrado una medusa botón azul», dijo Trey Lane, el padre de Hunter a CNN. «Después de que lo recogieron ¡proclamó que había descubierto una nueva especie!».
Trey dijo que ha visitado el lugar durante 30 años para pasar sus vacaciones y que nunca llegó a ver al curioso «dragón azul».
«Entonces, si ves un dragón en el parque, ¡sorpréndete ya que es un hallazgo raro, pero también mantén la distancia!», advierte en el parque nacional.
Jamie Kennedy, una portavoz del parque dijo que en sus dos años trabajando en el lugar no había escuchado a nadie hablar de él. Sin embargo, agregó que las últimas apariciones del «dragón azul» podrían ser porque varios de ellos ―que es como suelen agruparse―, estaban muy cerca de la orilla.
Gracias a la fotografía amateur y al llamativo aspecto del «dragón azul» se están reportando nuevos avistamientos. Las babosas azules aparecieron en Taiwán en 2017, y en 2020 se dieron apariciones en Texas y en Ciudad del Cabo, Sudáfrica.
Pero a a pesar de lo bello y atrayente del «dragón azul», recuerde mantener una prudente distancia si no quiere experimentar el dolor del aguijón en medio de sus vacaciones.
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