Tom Vierus, fotógrafo conservacionista y cineasta, capturó la primera imagen conocida del azor de Nueva Bretaña (Accipiter princeps), una especie sumamente esquiva.
Vierus, quien tiene una maestría en ecología marina tropical, integró el equipo que el Fondo Mundial para la Naturaleza (WWF) envió al remoto distrito de Pomio en Papúa Nueva Guinea. Su misión consistía en evaluar la biodiversidad de la región y explorar oportunidades para nuevas iniciativas de conservación. Junto a cazadores locales, se internó en la selva para documentar la mayor cantidad posible de vida silvestre.
«¡La zona tiene una biodiversidad extraordinaria, pero fotografiar al azor fue pura suerte!», declaró Vierus a The Epoch Times.
El galardonado fotógrafo, residente en Fiyi, describió un viaje lleno de momentos difíciles y asombrosos. Calificó como «mágica» la experiencia de despertar en la cordillera de Nakanai y contemplar el dosel de la selva tropical cubierto de niebla mientras escuchaba el canto de diversas especies de aves. A pesar de los desafíos físicos de la expedición —noches sin dormir, picaduras de insectos y agotadoras caminatas por senderos inexistentes— la aventura resultó «increíblemente gratificante» cuando Vierus comprendió el valor histórico de la fotografía.
«¡Me quedé sin palabras al darme cuenta de la importancia de la foto!», expresó Vierus. «¡Es increíble fotografiar en la actualidad un animal que nadie había captado antes!».
Descubrió el valor excepcional de la fotografía después de subirla a iNaturalist, una plataforma de ciencia ciudadana donde investigadores y entusiastas registran avistamientos de fauna silvestre. El sitio web Search for Lost Birds confirmó la identidad del azor de Nueva Bretaña y ahora incluye la imagen de Vierus como el primer avistamiento desde 1969.
La comunidad científica y conservacionista recibió la noticia con entusiasmo.
John Mittermeier, director de The Search for Lost Birds en American Bird Conservancy, explicó en un comunicado: «El último registro científico documentado de la especie corresponde a un ejemplar de julio de 1969 que se conserva en el Museo Americano de Historia Natural de Nueva York. Aunque existen múltiples registros visuales en los años intermedios, el azor de Nueva Bretaña eludió toda documentación fotográfica, sonora y física durante 55 años».
Oscar Pileng, oficial de WWF en Pomio y nativo de la región, indicó en el comunicado que los residentes locales consideran esta especie «definitivamente rara», presente solo en el interior de Pomio y «raramente vista». Añadió que en las lenguas locales llaman al azor de Nueva Bretaña «keango» o «kulingapa».
Vierus permaneció casi tres semanas en la zona durante marzo, aunque el avistamiento se dio a conocer en septiembre. Describió a Pomio como un lugar «increíble» por su belleza, con impresionantes zonas costeras vírgenes, una densa selva tropical intacta y una diversa gama de especies animales y vegetales, algunas de las cuales existen «únicamente en esta parte del planeta».
El fotógrafo afirma que avistamientos como este demuestran «la resistencia de la naturaleza» e «infunden esperanza» tanto a la comunidad científica como al público general. Vierus, quien se define como narrador de historias, considera que fotografiar la vida silvestre ayuda a que las personas se interesen por los problemas ambientales y actúen en consecuencia.
«Las personas no se preocupan por lo que desconocen», afirma. «Pero cuando ven un reportaje fotográfico emotivo o una película inspiradora sobre un tema, no solo toman conciencia, sino que posiblemente los conmueva emocionalmente y despierte su deseo de actuar».
«En un mundo cada vez más acelerado donde nos bombardean constantemente con información visual, la fotografía de conservación y la narración de historias cobran más importancia que nunca».
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.