Una joven de 17 años se enfrentó a un oso negro para proteger a sus perros, la audaz adolescente empujó con todas sus fuerzas a la osa que entró al patio trasero de su casa y se encontraba sobre una barda dando zarpazos a sus mascotas.
Hailey Morinico de 17 años de edad, vive en Bradbury, California. El lunes 31 de mayo la joven ahuyentó a un oso negro que se encontraba en el patio trasero de su casa, sobre una barda aproximándose a un árbol junto con sus dos oseznos. La situación se complicó, cuando los cuatro perros de la familia salieron corriendo a ladrarle a la osa, informó TODAY.
Morinico vio que sus mascotas corrían peligro, por lo cual, realmente sin pensarlo salió en su defensa y empujó al oso negro. Afortunadamente, la acción dio resultado y el oso cayó del otro lado de la barda, lo cual permitió que la joven de 17 años pudiera incluso tomar a su perrita más pequeña en brazos y salir corriendo junto con sus otras mascotas.
«Yo estaba como, ‘Oh Dios mío, hay un oso y se está llevando a mi perra», dijo la joven al mismo medio. «La está levantando del suelo, y si no hago algo al respecto, quién sabe lo que podría pasarle».
También explicó que su acción fue realmente instintiva, al grado de no estar realmente consciente que se estaba enfrentando a un oso.
«Sinceramente, no supe que era un oso hasta justo después de empujarlo. No me di cuenta de que era un oso», dijo Hailey en una entrevista a ABC7. «Pensé: ‘Es un animal y se está llevando a mi pequeño’ y empujé al oso».
El amor por su perra Valentina, la hizo actuar rápidamente, pues señala que no podría “soportar perderla”.
«Es la pequeña de la familia, vamos a todas partes con ella, no podía soportar perderla o que le pasara algo», dijo Morinico.
Afortunadamente la joven solo sufrió un esguince en el dedo índice de su mano derecha y una lesión menor en su rodilla.
El impactante video fue grabado por la cámara de seguridad y compartido por su madre, Citlally Morinico, quien escribió en una publicación de Facebook que su hija Hailey salvó a sus perros con una “fuerza sobrehumana”.
Sin embargo, la madre también señaló que fue “uno de los momentos más aterradores de su vida”.
«No pude dormir anoche pensando en todas las horribles posibilidades que podrían haber sucedido», dijo su madre a TODAY. «Afortunadamente, no pasó nada».
Las recomendaciones que suelen realizarse a las personas cuando se encuentran ante un oso, son totalmente contrarias a lo que hizo Morinico. Según ABC7, un experto en vida salvaje local explicó que lo que hizo la joven fue peligroso y que es mejor quedarse dentro de casa o ahuyentar al animal con una resortera o algún tipo de aparato que haga ruido.
Sin embargo, esta historia terminó con un final feliz, sin que nadie sufriera ningún daño mayor, ni la joven, ni sus perros, ni la osa con sus oseznos. ¡Una historia para contar!
Pastor alemán sobrevive a las heridas tras defender a una familia de un ataque de oso negro en Alaska
En otro caso, fue un perro el que se puso al frente de un ataque de un oso negro.
No es raro encontrar un oso negro en una excursión, pero cruzarse con un oso que ataque a un grupo de personas sí es algo inusual.
Cuando Weatherly Bates y su familia salieron a caminar por el sendero del Glaciar Moraine en el parque estatal de la Bahía de Kachemak en Alaska, notaron que un oso negro los estaba acechando a lo largo del camino.
El oso estaba a pocos metros del hijo de 12 años de Bates, Rockwell.
«Nos reunimos todos en un grupo», dijo Bates, reportó KBBI.
A pesar de sus intentos de ahuyentar al oso gritando y hablando, el animal avanzó hacia el grupo.
Esta aterradora situación pudo resultar en un desastre, pero Bates dice que su fiel perrita pastor alemán, Sally, no dudó en defender a la familia.
“Probablemente se acercó a un metro y medio”, dijo Bates. “[Sally] fue y se ubicó entre el oso y nuestro hijo, porque el oso obviamente iba a lanzarse sobre nuestro hijo.
“Y se quedó ahí parada. Ninguno de nuestros perros le ladró al oso, sucedió tan rápido, pero ella se puso entre el oso y nuestro hijo y el oso la atacó”.
En solo un momento, la cabeza de la pastor alemán de 7 años quedó atrapada en la mandíbula del oso.
“Comenzó a morderla y ella empezó a aullar”, dijo Bates, agregando que en el pasado habían sido cautelosos con los osos en el camino, así que su esposo, Greg, había traído un arma en su mochila.
“Mi esposo pudo sacarla de mi bolsa y corrió y comenzó en golpear al oso, tratando de que liberara a nuestro perro”. Y, finalmente hizo un tiro limpio. Le dije: ‘Por favor, tienes que hacerlo, tenemos que matar a este oso. Va a matar a nuestro perro’”.
Después que el oso liberó al perro, Greg Bates derribó al oso. Luego, la familia llevó a Sally a un veterinario en Homero.
El pastor alemán de 80 libras (aprox. 36 kilos) sufrió múltiples heridas, pero el veterinario aseguró a la familia que Sally era fuerte. Ahora se está recuperando bien, según Bates.
“Nos conmueve que haya hecho eso por nosotros, porque no dudo que si no se hubiera puesto entre nosotros y en realidad el oso pudo haber herido a uno de mis hijos o a uno de nosotros”, dijo.
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