Una madre brasileña decidió cerrar las cuentas de redes sociales de su hija de 14 años. Aunque la joven tenía más de 2 millones de seguidores, la madre cree que la joven primero debe tener madurez y ser feliz antes de estar en la red, no al contrario.
Fernanda Rocha Kanner de 38 años, es de São Paulo, Brasil, y es la madre de Valentina Rocha Kanner Ríos, una adolescente que, a sus 14 años, tenía casi 2 millones de seguidores en sus redes sociales. Sin embargo, Rocha cree que para una persona «ya es bastante difícil descubrir» quién es a los 14 años, y cuando hay millones de personas «pensando que te conocen, es más peligroso. Es más fácil perderse», dijo la madre de la joven en entrevista al medio local G1.
«Radical, sí. Necesario también», dijo Rocha de su decisión. Pero también comentó que fue aplaudida por otras madres, y criticada duramente por los seguidores adolescentes, que la llamaron «posesiva», compartió a la revista Crescer.
Para tomar la drástica decisión, Rocha agregó que «no pasó nada puntual». En realidad, era un tema del que madre e hija habían hablado.
«Era un tema del que habíamos estado hablando durante meses. Le dije: ‘Hija, este feed no es bueno'», dijo Rocha. «Le preguntaba, ‘Nina, ¿te gusta hacer coreografías? Nunca te había visto bailar antes de Tiktok. Muéstrale al mundo las cosas que te encanta hacer, lo que te hace diferente y no lo que te hace idéntica a todas las demás chicas» en internet».
Luego de recibir numerosos mensajes en su cuenta personal, preguntando por qué Nina —como le dicen cariñosamente— había desaparecido de las redes sociales de un día para otro, Rocha, que es médico, decidió responder a los seguidores de su hija.
«Decidí borrar su cuenta de Tiktok e Instagram. Aburrido, lo sé, pero nuestro trabajo como madre no es ser tu amiga y solo lo entenderás en retrospectiva […] No quiero que crezca creyendo que es ese personaje. No quiero que promocione ropa de poliéster inflamable fabricada en China. No quiero que mi brillante hija se entregue a los bailes diarios como un babuino amaestrado», publicó Rocha en su Instagram.
Valentina inició en redes sociales a los 12 años, hablando del vuelo libre de aves y de su trabajo como voluntaria en rescate de animales. Su madre siempre estuvo en el proceso, pero cuando todo se desvió a contenido «inútil», ella pensó que ya había sido suficiente, dijo a la Revista Crescer.
La joven madre agradeció el cariño de los seguidores de Valentina en las redes sociales, y considera todo muy dulce pero también nocivo, en especial para una joven que recién se está descubriendo como persona y que está en proceso de formación. En especial, a Rocha le preocupaban los mensajes mensajes positivos, de elogios y halagos, que llegaron a crear una imagen que «pulía el ego» y creaba un concepto ideal pero no realista de la joven.
También, Rocha reflexionó acerca de la fama justificada por la actual generación. En uno de los comentarios de respuesta de un seguidor, incluso le comentaron acerca de lo avergonzadas y tontas que se deberían sentir las personas de no estar en las redes sociales.
Sin embargo la madre respondió que echaba «de menos cuando había que tener talento en algo para destacar».
«Nacemos con varios dones que nos hacen únicos, pero cuando copiamos al rebaño se diluyen en el proceso y acabamos siendo uno más del montón», agregó.
Sin embargo, para Valentina no fue sencillo aceptar la decisión de su madre. La joven estuvo enojada un par de días y encerrada en su habitación, pero una semana después todo era normal de nuevo.
«Estaba claro que estaba pasando por una especie de ‘abstinencia’ de dopamina ‘. Cualquiera que haya visto ‘El dilema de las redes ‘ sabe de lo que estoy hablando. Estamos tan condicionados a esta avalancha artificial del neurotransmisor en forma de me gusta , comentarios y notificaciones que, cuando se nos priva de él, el cerebro va en la inclinación», dijo Rocha a la Revista Crescer.
Rocha, que además de Valentina tiene dos hijos más, Nicholas, de 16 años y Thomas, de 11, dijo en su Instagram que ella es la fan número uno de su hija y que, de hecho, la joven puede volver cuando tenga contenido interesante para compartir.
«Cuando rescate la esencia de lo que la hace diferente, puede iniciar una nueva cuenta. Pero este filtro de sentido común tiene que partir de su madurez», dijo Rocha.
«Yo elegiré. Por el momento, no quiero. Va a ser algo que solo me obstaculizará y solo hará que sea peor», dijo Valentina de su regreso a redes sociales.
De acuerdo a Rocha, el plan siguiente para Valentina es ir a Suiza con su hermano mayor para continuar sus estudios. «La vida solo es buena cuando eres feliz fuera de la red primero», agregó Rocha.
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