Las parejas típicamente se conocen a través de amigos en común, en la escuela o en lugares normales de la universidad. Cuando Aaron Hill y Melissa Dohme se vieron por primera vez, Aaron no estaba seguro de que Melissa fuera a vivir.
Melissa era estudiante universitaria en Clearwater, Florida, hasta que en 2012 su exnovio, Robert Burton, llegó a su casa y la apuñaló 32 veces. Perdió tanta sangre esa noche que entró en paro cuatro veces, sufriendo un derrame cerebral y finalmente requiriendo innumerables cirugías reconstructivas para recuperar su apariencia y sensibilidad en su rostro.
Aaron, que fue el primero en llegar a la escena, simplemente no podía creer lo que estaba viendo. Era tanta la sangre que la cubría que ni siquiera podía decir que Melissa era rubia, pero sintió una conexión extraña cuando la cargaron en el helicóptero Life Flight.
Cuando los dos se reunieron por segunda vez en un almuerzo de agradecimiento que ella ofreció a sus rescatistas unos años después, esa extraña conexión resultó ser una chispa.
Se habían encontrado por primera vez en circunstancias horribles, y para cuando se volvieron a encontrar, Melissa estaba dedicando su vida a educar a otras mujeres sobre cómo evitar el tipo de atrocidades en las que había incurrido a manos de su abusiva expareja.
Pero a pesar de la poco probable historia de amor, eso es exactamente lo que ambos se dieron cuenta que tenían: amor. Y tres años después de que la vida de Melissa estuvo a punto de ser arrebatada, Aaron le mostró cómo es el verdadero amor.
La joven solo sabía que iba a un partido de los Tampa Bay Rays para lanzar el primer lanzamiento, siendo honrada como sobreviviente de la violencia doméstica y como oradora inspiradora de su comunidad.
En cambio, Aaron la estaba esperando con una pregunta muy importante.
Melissa no pudo ocultar su sorpresa cuando su novio salió a la cancha con la pelota de béisbol que se suponía que iba a lanzar. Pero cuando lo miró con asombro, se dio cuenta que tenía escritas las palabras «¿te casarías conmigo?».
La pareja se casó en una hermosa ceremonia en Dade, Florida, frente a familiares, amigos y seis integrantes de los otros equipos de respuesta rápida y personal médico que trabajaron esa fatídica noche en 2012 para salvar la vida de Melissa.
«Es increíble de donde viene mi vida y donde estoy ahora», dijo Melissa a la revista PEOPLE. «Durante tanto tiempo, al mirarme a mí misma, sentí que no era yo misma y que siempre tenía algo malo conmigo. No quería que la gente siempre tuviera que darme compasión o algo así. Aaron era tan grandioso, que siempre estaba ahí para mí, creo que en todo sentido».
Ahora, Melissa trabaja como defensora de una organización sin fines de lucro en Florida llamada Hands Across the Bay, dedicando su tiempo y energía a prevenir la violencia y a ayudar a las familias que necesitan lugares seguros para escapar de situaciones violentas.
Está dando horas y horas para asegurarse que nadie más sea apuñalado por alguien a quien amas, y cuando ella se va a casa por la noche, tiene a alguien que le recuerda cómo el verdadero amor.
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