En un fenómeno extremadamente raro, una madre volvió a concebir semanas después de quedar embarazada de un niño. Los «mellizos», que fueron concebidos con tres semanas de diferencia, causaron un gran revuelo entre los médicos, antes de su nacimiento por cesárea en septiembre de 2020.
«Ni siquiera sabía que fuera posible concebir de nuevo estando embarazada», dijo Rebecca Roberts, de 39 años, al Daily Mail. Sorprendida al saber que esperaba mellizos, a Rebecca, de Wiltshire (Inglaterra), le dijeron que un raro suceso conocido como superfetación le había permitido concebir un segundo bebé estando ya embarazada.
Sin embargo, las primeras ecografías del embarazo de Rebecca no detectaron el segundo feto. Hasta la semana 12, Rebecca descubrió que esperaba mellizos.
La madre de tres hijos, que dirige una empresa de ropa infantil y su pareja de 43 años, Rhys Weaver, se enteraron que un medicamento para la fertilidad que Rebecca estaba tomando pudo haber provocado la liberación de un óvulo después de la primera concepción. El caso de Rebecca es inusual.
«De todos los 13 casos de superfetación documentados, mis gemelos tuvieron la mayor diferencia de gestación, de casi un mes», explicó Rebecca a The Epoch Times a través de las redes sociales. «Otros casos sobre los que he podido leer han tenido un máximo de 10 días».
Sin embargo, un médico del hospital especializado en bebés St. Michael, en Bristol, no creía que se tratara de un caso de superfetación y sospechaba que algo le habría ocurrido al bebé en los primeros momentos de su desarrollo. El médico también sugirió que Rebecca pudo haber contraído un virus, o un problema cromosómico en el bebé, que hizo que fuera tan pequeño. Después de eso, surgió la angustia y muchas pruebas, pero los análisis descartaron una explicación cromosómica o genética para el doble embarazo, dijo Rebecca en un posteo en Facebook.
El médico de Rebecca, el doctor David Walker, jefe de ginecología del Royal United Hospital (RUH) de Bath, también habló con la BBC sobre la increíble concepción. «Por alguna razón [Rebecca] debe haber tenido un retraso en la ovulación», afirmó. «Desde luego, en mis treinta y tantos años, es la primera vez que veo que ocurre».
Sin embargo, las distintas etapas de desarrollo de los bebés le causaron un gran estrés a la pareja. La futura mamá describió la segunda mitad de su embarazo en un posteo en Facebook como una «verdadera pesadilla».
«Se habló de practicar una amniocentesis», dijo; «nos negamos, ya que amaríamos a nuestros bebés pasara lo que pasara».
Los mellizos, Noah y Rosalie, nacieron a las 33 semanas y 6 días por cesárea en el RUH el 17 de septiembre de 2020. El cordón umbilical de Rosalie estuvo disfuncional durante las últimas semanas de embarazo de Rebecca y por eso no creció mucho.
Noah pesó 4 libras y 10 onzas (aproximadamente 2.1 kg), mientras que su hermana pesó solo 2 libras y 7 onzas (aproximadamente 1.1 kg). A pesar de su radical diferencia de tamaño, ambos bebés son pequeños luchadores, pero Rosalie requirió más atención.
Noah se fue a casa después de pasar tres semanas y tres días en la UCIN. Su hermana se quedó atrás. «Nos preocupaba perderla y no sabíamos cómo responderle a las preguntas de la gente (…) Así que nos mantuvimos discretos durante un tiempo», admitió Rebecca.
Sin embargo, después de 95 días en cuidados intensivos, Rosalie fue dada de alta justo a tiempo para Navidad.
A las 20 semanas, la cariñosa madre de los mellizos los describió como «los bebés más increíbles, dulces y hermosos».
También comparte la increíble historia de Noah y Rosalie y sus continuos progresos, en una página de Instagram: @roberts.supertwins
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