Una mujer a punto de dar a luz decidió ir en su bicicleta al hospital. Aunque ya tenía contracciones, la madre decidió confiar y utilizar el medio de transporte que utiliza a diario para transportarse en su país.
Julie Anne Genter de 41 años es originaria de Minnesota, Estados Unidos, y vive en Nueva Zelanda desde 2006. Parte de su vida la dedica a la política —como diputada— y le gustan las calles animadas, la comida sana y las bicicletas, de acuerdo a su perfil de Twitter.
Este año, Genter estaba lista para recibir a su segundo hijo. La semana pasada inició un periodo libre de trabajo, lo que le dio tiempo para organizar la correspondencia, la casa, y llevar a su primogénito a la guardería en su bicicleta adaptada.
«Otro día impresionante para ir en bicicleta para la entrega de la guardería […] ¡Mañana es mi fecha de parto! No pasará mucho tiempo ahora…», publicó el 24 de este mes en Facebook.
Entusiasta de promover el uso del transporte de dos ruedas, el día programado para la llegada del bebé preparó la bicicleta en la que suele pasear y transportarse con su hijo mayor, y se subió para llegar al hospital. Ya lo había hecho una vez, ¿Qué podría salir mal en una segunda ocasión?
Ese día salió a las 2 de la madrugada junto a su esposo, pero no contaba con que las contracciones se harían más frecuentes, cada 2 a 3 minutos. Así que, en plena labor de parto, Genter no paró hasta llegar al hospital.
«¡Grandes noticias! A las 3:04 de la madrugada hemos dado la bienvenida al nuevo miembro de nuestra familia. En realidad, no tenía previsto iniciar el trabajo de parto, pero así fue», publicó la radiante madre en Facebook.
«Y sorprendentemente ahora tenemos un pequeño sano y feliz durmiendo, al igual que su padre», agregó.
En agosto de 2017, Genter se había hecho famosa por promover el uso de la bicicleta, incluso estando embarazada de varios meses. En sus redes sociales, suele compartir cómo con el uso del ligero transporte es capaz de cubrir su agenda diaria, llegar puntualmente a citas, eventos y, además, disfrutar del sol.
«¡Mucho más sociable y menos estresante que conducir!», compartió en Instagram.
Y para mostrar su confianza, un domingo por la mañana decidió tomar su transporte personal para trasladarse al hospital.
«Hermosa mañana de domingo para un paseo en bicicleta, al hospital, para una inducción para finalmente tener este bebé. Esto es todo, ¡deséanos suerte!», publicó Genter en Instagram, a las 42 semanas de embarazo.
Con este curioso historial, lo mejor sería que un tercer bebé llegue preparado con casco y rodilleras.
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