Najin y Fatu, son las últimas dos hembras de rinoceronte blanco del norte del planeta, ya que su reproducción natural no es posible, el mundo está conmocionado por la posible extinción de la especie.
Najin y Fatu viven en Nairobi, Kenia, en OI Pejeta, un recinto de 700 acres dedicado a conservar la vida de los animales salvajes, según informan en su página web.
El rinoceronte blanco del norte es una subespecie de rinoceronte blanco, desafortunadamente los años de caza furtiva y la guerra civil en su ecosistema devastaron las poblaciones de esta especie, y ahora se considera que está prácticamente extinguida en la naturaleza.
Los dos rinocerontes permanecen custodiados las 24 horas por guardias armados que los protegen de la caza furtiva en Kenia.
Durante la última década, los últimos siete rinocerontes blancos del norte que quedaban en el mundo, fueron falleciendo hasta dejar a Najin y Fatu como los dos últimos animales de su especie. Lo cual ha puesto la mirada de todo el planeta hacia ellas, esperando que con ayuda del hombre y la ciencia, puedan preservar la especie.
En el 2009, OI Pejeta, albergaba aún a 4 rinocerontes blancos del norte de los 7 restantes en el mundo. Dos machos, Suni y Sudan, y dos hembras, Najin y Fatu. Desafortunadamente, a pesar de los intentos de promover una reproducción natural, no hubo resultados satisfactorios.
En octubre del 2014, Suni falleció por causas naturales en el recinto y en marzo del 2018, murió Sudan por problemas de salud relacionados a la edad. En julio de 2015, el zoológico de Dvur Kralove, en la República Checa, perdió a Nabire, y en noviembre de 2015, el zoológico de San Diego perdió a Nola, explica la página de OI Pejeta.
Las “dos chicas”, como son conocidas en el recinto viven con los mayores cuidados posibles. Zachary Mutai, es un cuidador que ha estado protegiendo a Najin y Fatu durante los últimos 10 años, informó Zenger News.
Najin, tiene 31 años y es descrita como juguetona pero al mismo tiempo bastante agresiva. La hembra mayor, está dentro de una etapa considerada como vejez.
“Es un logro porque la mayoría de los rinocerontes del mundo no viven tanto tiempo, pero ella tiene más de cinco años para vivir con buena salud”, dice Mutai según el mismo medio.
Najin también tiene un gran tumor en el abdomen, que por el momento no causa problemas de salud agudos pero puede dificultar la funcionalidad de sus órganos reproductores, explicó OI Pejeta en una publicación de FB.
Fatu, tiene 20 años y es la hija de Najin, por lo que su temperamento adolescente es descrito como “impredecible” por Mutai. “Es interesante y al mismo tiempo desafiante”, agregó.
Tras las fuertes preocupaciones por la extinción de la especie, la ciencia piensa que la fecundación in vitro y la células madre, podrían ser la solución ante esta triste realidad. Los científicos recolectaron esperma de Sudán, antes de que falleciera.
El 13 de diciembre de 2020, un equipo de científicos del Proyecto BioRescue recogió 14 ovocitos de Fatu, de los cuales dos fueron fecundados y se convirtieron en embriones viables. Por su lado, Najin, no fue una candidata adecuada debido a su situación de salud.
“Incluso en medio de una pandemia mundial, estos dedicados individuos llegaron desde Europa para llevar a cabo el procedimiento”, se lee en la publicación de FB.
También explicaron que los siguientes pasos del programa están en marcha.
Mientras tanto, los cuidadores y encargados de preservar la vida de estas “dos chicas” realizan una gran labor, agradecida por muchas personas a lo largo del planeta.
“Saber que la vida de una especie depende de ti, es toda una tarea”, dijo Mutai.
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