¿Se cancelaron sus planes de viaje a Europa? Ahora puede recrearlo a través de los destinos duplicados en Estados Unidos.
Nada puede reemplazar la emoción de cruzar la frontera, pero seguro que engañará a tus seguidores de las redes sociales.
Solvang de California, en lugar de Dinamarca
Si esperaba visitar Dinamarca este año, es probable que no tenga suerte. Pero un posteo desde Solvang, California, hará que sus seguidores en las redes sociales se pregunten cómo se las arregló para mantener los planes de viaje originales. La ciudad de Solvang es llamada «un pedacito de Dinamarca en el sur de California», y es exactamente eso. La ciudad presenta una arquitectura de estilo danés en sus hoteles, restaurantes, lugares de cata de vino y galerías de arte. Situada en las afueras de Santa Barbara en el valle de Santa Ynez, Solvang también cuenta con el Museo de Historia y Arte de Elverhoj, que explora el patrimonio danés de la ciudad a través de historias personales y fotografías, y el parque Hans Christian Andersen, llamado así en honor al famoso escritor danés.
Puede tomarse un kringle en la panadería del pueblo danés de Olsen, propiedad de un panadero danés-americano de cuarta generación, para completar la experiencia.
Après-Ski en Vail de Colorado, en lugar de los Alpes suizos
Los Alpes suizos pueden ser el epicentro del Après-Ski, pero Vail, Colorado, es una alternativa que no está nada de mal y, de hecho, fue modelada según Zermatt. Tal vez usted no pueda llegar a Suiza este año, pero en Vail encontrará caminos empedrados que bordean a los pueblos con senderos peatonales y la arquitectura medieval tradicional que esperaba disfrutar de un histórico pueblo europeo de esquí, —sin mencionar las pistas de renombre mundial, la nieve fresca y una animada cultura del après-ski. Alójese en Sonnenalp para vivir una experiencia completa, desde un conserje en esquí y chimeneas hasta schnitzel y fondue en el restaurante del Swiss Chalet.
Más allá de las Rocosas, la ciudad de Ouray, Colorado, es apodada la «Suiza de América».
Boise de Idaho, en lugar del País Vasco
No tenemos que hacer todo el camino hasta los Pirineos occidentales de España para conocer el País Vasco, de hecho, se sorprenderá encontrar una buena dosis de cultura vasca en Boise, Idaho. Debido a que los inmigrantes vascos aquí podían ejercer libremente sus tradiciones culturales, incluyendo el pastoreo de ovejas y el funcionamiento de las casas de huéspedes, la capital es el hogar de la mayor concentración de vascos fuera de España. Los visitantes pueden beber copas de kalimotxo —compuesto por vino tinto y Coca-Cola servidos con hielo a partes iguales —y en lugar del encierro de toros, asistir al festival anual Trailing of the Sheep Festival, en Sun Valley. También en el itinerario conviene colmarse de algunas raciones de paella, lecciones de pelota en los frontones locales y una visita al Bloque Vasco, un grupo de negocios y centros culturales que preservan la cultura vasca.
¿Busca un sabor totalmente diferente de España? Diríjase a San Agustín, Florida, la ciudad más antigua de la nación, descubierta por el explorador español Juan Ponce de León, en 1513. Disfrute de la arquitectura colonial española y del Castillo de San Marcos, una fortaleza de piedra del siglo XVII con vistas a la ensenada de San Agustín.
Holanda de Michigan, en lugar de los Países Bajos
No hay necesidad de adivinar cómo Holland, la ciudad de Michigan, obtuvo su nombre. Fue construida para asemejarse a su nombre por los colonos holandeses que escaparon de la opresión religiosa y las dificultades económicas en 1847. Entre los jardines de tulipanes de Veldheer, el molino de viento DeZwaan (el único molino de viento holandés auténtico en funcionamiento en Estados Unidos), un parque temático holandés y el rico y auténtico patrimonio holandés de la ciudad, puede que se sorprendan preguntándose si se han teletransportado a los Países Bajos.
Helen de Georgia, en lugar de Baviera, Alemania
La ciudad de Helen, en Georgia, se afirma que recompensa a los visitantes con «el encanto de Baviera en el corazón de las montañas Blue Ridge». Una mirada a la pequeña plaza del pueblo y ciertamente pueden ver el por qué. La ciudad montañosa del noreste de Georgia tiene viñedos y edificios de estilo bávaro —con adornos arquitectónicos tipo pan de jengibre, callejones empedrados y torres del Viejo Mundo— en un entorno alpino. La herencia alemana no es auténtica, pero la ciudad es innegablemente encantadora.
Rapid City, de Dakota del Sur, en lugar de Laerdal, Noruega
Rapid City, una ciudad de Dakota del Sur, es quizás más conocida como la puerta de entrada a Monte Rushmore, pero la historia estadounidense no es lo único que atrae a los visitantes: aquellos interesados en la cultura y la arquitectura noruega estarán encantados de descubrir, escondida detrás de los pinos ponderosa, en el lado occidental de Rapid City, una réplica exacta de Borgund Stavkyrkje —o Borgund Stave Church —que se encuentra en Laerdal, Noruega. La antigua iglesia de madera se encontraba en el pueblo de Borgund y sirvió como iglesia de la parroquia de Laerdal hasta 1868. Una réplica se construyó en Dakota del Sur debido a la población de luteranos noruegos en los alrededores, y en 1960, una emisora de radio luterana quiso expandirse con un localidad que los oyentes pudieran visitar. La réplica se construyó utilizando planos del Departamento de Antigüedades de Noruega.
Maui, Hawai, en lugar de Madeira, Portugal
En un artículo en el USA Today se compara Maui con Madeira, Portugal, y las apariencias de ambos destinos tienen ciertamente similitudes, a pesar de las diferencias entre las culturas hawaiana y portuguesa. Puede que Maui no tenga los teleféricos y las malasadas que se encuentran en Madeira, pero sus playas, volcanes, cascadas y la belleza intacta del Pacífico proporcionan un viaje de vacaciones diferente (e igualmente agradable).
La región vinícola de California, en lugar de la Toscana, Italia
No hay nada como la campiña italiana, pero la región vinícola de California se acerca bastante. El valle de Napa tiene más de 400 bodegas situadas en el mismo entorno rústico y elegante de la región vinícola más famosa del mundo. La réplica del castillo toscano del siglo XIII Castello di Amorosa, en Calistoga, es un destino popular para los visitantes que esperan recrearse bajo el Sol de la Toscana, e incluso el Allegretto Vineyard Resort en Paso Robles, y la región del Valle de Temecula, a una hora de San Diego, también son satisfactorios para ese tan esperado viaje a la Toscana, al menos hasta que los viajes internacionales vuelvan a estar sobre la mesa.
Disfrute de las excursiones enológicas, degustaciones y mucho más en las muchas millas doradas y onduladas de los viñedos cargados de uvas de California, igual que en la Toscana, pero un poco más cerca de casa.
Bono extra: La costa perdida de California, en lugar de Nueva Zelanda
Aunque no está relacionado con Europa, si sueña con una visita a las playas de arena negra de Karekare, Nueva Zelanda, considere la posibilidad de optar por un viaje a Black Sands Beach en Lost Cost de California, una región de los condados de Humboldt y Mendocino llamada así porque la zona es en su mayoría natural y sin desarrollar. Al ofrecer una experiencia salvaje a los excursionistas y mochileros, la región no es accesible por ninguna de las principales carreteras y ofrece una aventura fuera de lo común.
Skye Sherman es una escritora de viajes independiente que vive en West Palm Beach, Florida. Cubre las noticias, el tránsito y los destinos internacionales para una gran variedad de puntos de venta. Puede seguir sus aventuras en Instagram y Twitter @skyesherman.
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