Si el tamaño cuenta para algo, es para demostrar que el negocio de las excursiones de pesca en el río Fraser, en la Columbia Británica, vuelve a estar en marcha después de dos años de mala racha.
Solo hay que preguntar al guía de pesca Yves Bison, de 47 años, que la pasada primavera capturó el segundo esturión más grande que ha visto nunca. Este guía turístico de 20 años presume de un índice de capturas del 100 por ciento en sus salidas, y ha capturado más de 20,000 esturiones con sus clientes a lo largo de los años.
Ese día de marzo, las aguas estaban frías, así que no había muchos otros guías en el río Fraser. Yves y sus invitados se lanzaron a las olas y pronto sintieron un tirón elemental en la línea.
«Después de engancharlo, lo vimos saltar inmediatamente, así que supimos que teníamos algo bastante especial en el extremo del sedal», dijo Yves a The Epoch Times.
Lo que presenciaron fueron 600 libras de esturión frío y escamoso que se lanzaba al aire.
Los invitados de Yves estaban asombrados. «Estaban aturdidos, conmocionados, sorprendidos, emocionados», dijo el guía.
Les costó unos 30 minutos de lucha para pescar el pez, que estuvieron a punto de perder cuando se metió debajo de la barca y estuvo a punto de romper la caña.
Finalmente, cansaron al esturión y lo llevaron a aguas menos profundas, donde Yves pudo saltar y verlo de cerca mientras se recuperaba de la agotadora lucha.
«Fue algo digno de ver», dijo al periódico. «Todo el mundo se quedó alucinado por el mero hecho de que probablemente nunca se había capturado».
El esturión medía 3 metros y 7 pulgadas de largo, pero era inusualmente gordo para un esturión.
«Ese era probablemente el más ancho [que he visto] en cuanto a su circunferencia», dijo Yves. «Este es mi 20º año como guía y he visto casi 23,000 esturiones que he podido manejar en mi carrera de pescador, así que es algo que hay que contemplar cuando ves algo tan grande».
Este fue el segundo esturión más grande que ha visto. El más grande de Yves, capturado en 2016, medía 11 pies y medio de largo, pesaba 800 libras y se estimaba que tenía entre 100 y 120 años.
Grabaron un vídeo con el gigantesco pez y lo etiquetaron antes de enviarlo a su alegre camino.
(Cortesía de Yves Bisson Sturgeon Co)
«El hecho de que no estuviera marcado y de que pudiéramos ponerle una etiqueta para nuestro programa de marcado y recaptura para seguir y controlar las poblaciones de peces fue algo aún más especial», dijo Yves.
Compartió las imágenes del enorme pez en las redes sociales, y se hicieron virales. Algunos de los espectadores que comentan las capturas de Yves se preguntan si los esturiones resultan heridos o muertos en sus expediciones.
Él insiste en que no lo hacen y que los datos indican solo una tasa de mortalidad del 0.012 para los esturiones capturados con caña.
«Tenemos todos los datos», dice. «Siguen creciendo; siguen desovando; están sanos. Hay toneladas de peces en nuestro río. Es un 100 por ciento de captura y liberación».
Y añadió: «Le digo a la gente que si los perjudicáramos de alguna manera y hubiera un patrón que apareciera en nuestros datos, probablemente sería el primero en renunciar».
Aunque Yves se encarga de los chárteres, también dedica su tiempo a educar a la gente sobre el esturión, a etiquetar a los peces y a recopilar datos para entregárselos al gobierno provincial.
Así pues, la pesca en el río Fraser parece volver a ser la de siempre. Mientras tanto, es probable que los monstruosos esturiones por los que es famoso sigan creciendo.
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