Los residentes de California han sido testigos de un fenómeno al que han llamado «agujero de la gloria», cada vez que el nivel de la presa Monticello sube.
El condado de Napa, en California, Estados Unidos, atrae a cientos de turistas cada vez que las copiosas lluvias inundan la presa Monticello, construida en la década de los años 50 del siglo pasado.
¿La razón? Un fenómeno conocido por los lugareños como «agujero de la gloria» ofrece un fascinante espectáculo similar a una cascada circular que da la impresión que va hacia el centro de la Tierra.
Cuando la presa fue construida se incluyó un desagüe circular para controlar el flujo de agua antes que esta se desborde en las temporadas de intensas lluvias, según explica Science Alert.
Cuando «los niveles de agua en el embalse del lago Berryessa en la parte superior de la presa de Monticello aumentan», agrega el mismo sitio, «el exceso de agua comienza a formar un remolino en un gran agujero, aparentemente excavado en la superficie del lago».
Sin embargo, el agujero solo ha sido utilizado en tres ocasiones desde la construcción de la presa: en 2006, 2017 y 2019. Y en esas raras ocasiones, los residentes locales han sido alertados por las autoridades para que puedan observar el increíble fenómeno de ingeniería.
En 2017, cientos de personas llegaron para poder ver el espectáculo, luego de una temporada de tormentas que duró varios días, según informó The New York Times.
Los curiosos llegaron preparados para tomar fotos y video del hipnotizante momento.
«El otro día subí allí y había unos 15 drones volando y gente grabando videos», dijo Kevin King, director de operaciones del Distrito de Riego de Solano, encargado de supervisar las actividades diarias en la presa. «Es realmente impresionante de ver».
Pero, aunque es un fenómeno imponente, el agujero no representa un peligro para las personas. La presa tiene barreras de seguridad para mantener a las personas hasta cierto límite.
«Es mucha agua, pero no mucha velocidad», explicó King.
Y en 2019, luego de otra temporada de fuertes lluvias, el «agujero de la gloria» tuvo otro momento de atención, esta vez con cientos de curiosos, según informó Science Alert.
Pero ese año muchos fueron testigos de un desafortunado momento, cuando un cormorán fue captado en el momento en que era succionado por el agujero.
Los cormoranes son aves de dorso y alas negras y el resto del cuerpo blanco, algo parecido a un pelícano, que además son expertos buceadores. Se pueden sumergir hasta 147 pies debajo del agua, así que es posible que el animal haya sobrevivido, como lo menciona Science Alert.
El gran orificio mide 72 pies y 245 pies de largo, y puede succionar alrededor de 48,000 pies cúbicos de agua. Después que el líquido entra al agujero luego sigue su camino por una tubería para finalmente desembocar en el caudal de Putah Creek.
Y aunque los turistas sepan que el «agujero de la gloria» es producto de la mano del hombre, los curiosos siguen esperando cuándo será la próxima temporada de lluvias que obligue a ponerlo en funcionamiento para poder tener la oportunidad de observarlo.
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