Cuando los rescatistas encontraron a Evie la oveja, tenía el pelaje enmarañado, las patas podridas y le faltaban dientes. Sin embargo, Evie superaría su trágico pasado y daría dos sorpresas muy especiales.
El rescate de Evie ocurrió en el condado de Wake, Carolina del Norte, donde criaban 200 animales para venderlos al sacrificio religioso. Entre ellos había vacas, ovejas, pollos, cabras, gansos, burros y cerdos panzudos.
El condado de Wake intervino y varios santuarios animales participaron en el rescate. Farm Sanctuary, una organización sin fines de lucro con sedes en Estados Unidos, acogió a 10 ovejas, incluida Evie, el 13 de octubre de 2023.
Emily Grizzell, responsable de bienestar animal, explicó: «Todos los animales estaban en pésimo estado de salud». Incluso encontraron animales muertos.
Al salvar a Evie, Farm Sanctuary salvó no una, sino tres vidas.
Al llegar al santuario, Evie pasó por una cuarentena de 30 días y exámenes de ingreso. Le hicieron pruebas fecales, le aplicaron vacunas y le realizaron un chequeo físico completo.
«Entonces descubrieron que estaba preñada», contó Grizzell.
Evie no era la única oveja embarazada. Otras ovejas rescatadas también lo estaban; algunas incluso parieron al día siguiente de llegar al santuario. Pero el embarazo de Evie era especialmente particular, por razones que el personal aún desconocía.
Además del embarazo, el examen reveló el mal estado de Evie. Tenía las almohadillas de las patas podridas y la pata delantera izquierda agrietada. Le faltaban dientes y tenía nudos incrustados en la lana, huellas de su trágico pasado.
El personal de Farm Sanctuary vigiló a Evie desde mediados de enero. El 17 de febrero de 2024, a la 1 de la madrugada, dio a luz a dos corderos gemelos.
«Los bebés necesitaron ayuda para mamar, pero todo lo demás fue excelente», dijo Grizzell.
Les pusieron los nombres de Jeanne y Margaretta.
«Eran perfectas», comentó Grizzell sobre las corderas, añadiendo que Evie era «un ángel».
En Instagram, una publicación sobre las corderas recibió más de 20,000 «me gusta». Los espectadores expresaron su alegría al ver la belleza de la vida surgir de un animal que había sufrido tanto maltrato.
Con el paso de los meses, Jeanne y Margaretta empezaron a jugar con Samson, otro cordero cuya madre también fue rescatada del mismo lugar en el condado de Wake. Todos los corderos se alimentan de heno y pasto. Actualmente, un cuidador trabaja con las gemelas para ayudarlas a socializar.
«Están sanas y perfectas», declaró Sierra Bessey, directora de cuidado animal de Farm Sanctuary. «Ganan peso y aprenden cada día».
Grizzell, de 29 años, tiene un papel que combina el cuidado de los animales con la gestión y otras tareas. Conoció a Jeanne y Margaretta durante una entrevista de trabajo en primavera. Tras unirse oficialmente a Farm Sanctuary en abril de 2024, ha podido verlas crecer.
«Son corderas muy dulces, y se invierte mucho en su bienestar y calidad de vida», afirma.
Originaria de Houston, Texas, Grizzell ahora vive cerca de Farm Sanctuary, en Corning, Nueva York. Anima a la gente a apoyar la misión de la organización «adoptando» animales para patrocinar su cuidado, visitando las instalaciones y aprendiendo más sobre el santuario en su sitio web.
Mientras tanto, Evie y sus corderas siguen disfrutando la vida en su nuevo hogar. Jeanne y Margaretta rebosan vitalidad y están listas para el futuro mientras exploran su mundo. Para esta pequeña familia, el camino por delante es prometedor.
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