El presidente del sindicato Unión de Empleados de la Corporación del Fondo del Seguro del Estado (CFSE), Francisco Javier Reyes, murió víctima de los disparos de un tiroteo entre automóviles registrado en Carolina, municipio vecino a la capital puertorriqueña.
La Policía informó este sábado de que el líder sindical fue víctima de un tiroteo entre automóviles ocurrido la noche del viernes en la Carretera 887.
El líder sindical, según medios locales, se dirigía al centro comercial Plaza las Américas en compañía de su familia.
El presidente de la Unión General de Trabajadores (UGT), Gerson Guzmán, lamentó a través de un comunicado la pérdida del líder obrero.
«La vida que le fue arrebatada a ‘Kiko’ es una pérdida, no tan solo para sus amigos y familiares, sino también para todo el país y para nuestra clase obrera. Kiko, junto a muchos líderes sindicales, alzó su voz en contra de los atropellos a los trabajadores y a los puertorriqueños. Expresamos nuestras condolencias a su esposa, hijos y demás familiares», expresó Guzmán.
El líder sindical repudió además la violencia que golpea al país y le exigió a la gobernadora, Wanda Vázquez, que declare un estado de emergencia ante la criminalidad que afecta a la sociedad.
«No podemos seguir permitiendo que vidas como la de ‘Kiko’ se sigan perdiendo a manos de sicarios que andan sueltos en las calles matando a gente inocente y que tanto bien le hacían a Puerto Rico. Le pedimos a la gobernadora que declare un estado de emergencia por la violencia que nos arropa» enfatizó.
Reyes conducía un modelo Hyundai Optima cuando se vio atrapado en un tiroteo a las 6:40 hora local (10:40 GMT).
En el incidente falleció también un individuo identificado como Christian Díaz.
Miembros del Cuerpo de Investigaciones Criminales de Homicidio del Municipio de Carolina están encargados de la investigación.
El líder sindical era muy apreciado por sus compañeros por la lucha que llevó a cabo contra la reforma laboral del Gobierno, la mejora de las condiciones de los planes médicos y la batalla que planteó contra los intentos de privatización.
La muerte de Reyes subraya el problema de la criminalidad en las calles de Puerto Rico, que cada año le cuesta la vida a cientos de personas en la isla caribeña.
La mayoría de los asesinatos que se registran en Puerto Rico están asociados a ajustes de cuentas entre bandas dedicadas al narcotráfico que dirimen el control de los puntos de ventas a tiros.
El auge de la criminalidad se ha relacionado en las últimas fechas con el malestar entre el colectivo de la Policía por la degradación de sus condiciones laborales, lo que provocó un incremento del ausentismo y menos efectivos en las calles.
Datos estadísticos sitúan la tasa de homicidios en Puerto Rico en cerca de 17 por cada 100,000 habitantes, más del triple que la de Estados Unidos continental.
Puerto Rico es un «puente» para la droga que se dirige desde Sudamérica a Estados Unidos, pero parte de los cargamentos se queda en la isla caribeña para consumo local.
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