El presidente Joe Biden declaró el 9 de mayo que le «preocupa» que Boeing haya suspendido recientemente a su fuerza privada de bomberos sindicalizados de los alrededores de Seattle, Washington.
La empresa anunció esta medida el 4 de mayo, dejando fuera a casi 130 miembros de la Asociación Internacional de Bomberos (IAFF) Local I-66, quienes rechazaron dos ofertas de contrato de Boeing en materia salarial. Ese grupo de bomberos protege las plantas de fabricación de aviones de Boeing en la zona de Seattle.
«A pesar de las extensas discusiones a través de un mediador federal imparcial, no llegamos a un acuerdo con el sindicato», dijo Boeing en una declaración. «Ahora hemos suspendido a los miembros de la unidad de negociación y hemos aplicado plenamente nuestro plan de contingencia con bomberos altamente cualificados que realizan el trabajo de los miembros (del sindicato)».
El sindicato culpó a Boeing de intentar «castigar, intimidar y coaccionar a sus bomberos para que acepten un contrato que infravalora su trabajo».
El presidente Biden respondió con un posteo el 9 de mayo en la plataforma social X.
«Estoy preocupado por los informes de que Boeing suspendió a los miembros de IAFF I-66», dijo el presidente. «Animo a la gente a volver a la mesa para asegurar un acuerdo que beneficie a Boeing y consiga para estos bomberos el salario y los beneficios que merecen».
Según fuentes familiarizadas con las negociaciones, las declaraciones del presidente también apuntaron a la posibilidad de que la Casa Blanca se involucre en las discusiones entre el fabricante aeronáutico y los trabajadores sindicalizados de la fábrica que produce su avión más vendido en el estado de Washington.
Jon Holden, presidente del distrito 751 de la Asociación Internacional de Maquinistas y Trabajadores Aeroespaciales, que representa a los empleados de Boeing en el área de Seattle, acogió con satisfacción los comentarios del presidente.
«Nosotros apreciamos el apoyo del presidente Joe Biden y creemos que es importante que apoye la negociación colectiva», declaró el Sr. Holden.
«Nuestro sindicato cree firmemente que la negociación colectiva es el proceso para llegar a un acuerdo».
Además del sindicato de bomberos, la Asociación Internacional de Maquinistas y Trabajadores Aeroespaciales está negociando un nuevo contrato con Boeing para 30,000 de sus empleados que construyen sus aviones 737 MAX, actualmente retrasados en su producción.
Boeing retrasó la fabricación de los aviones 737 MAX para reforzar las directrices de seguridad después de que un panel de una puerta estallara en pleno vuelo durante un viaje de Alaska Airlines el 5 de enero. Ese incidente se produjo dos días antes de que expirara el acuerdo de enjuiciamiento diferido de Boeing con el Departamento de Justicia de Estados Unidos por los accidentes de los 737 MAX de 2018 y 2019 en los que murieron todos los pasajeros y la tripulación a bordo.
El Departamento de Justicia está considerando si ese accidente incumplió su acuerdo con Boeing, lo que podría dar lugar a cargos penales.
Boeing atribuyó el reventón del 5 de enero a un error de montaje, pero los reguladores estadounidenses aumentaron las inspecciones en la fábrica para evitar que se repita el incidente, lo que ha retrasado aún más la producción del 737 MAX.
El presidente Biden está buscando el apoyo de varios sindicatos de cara a su posible enfrentamiento con el expresidente Donald Trump en las elecciones de noviembre. El presidente visitó recientemente una manifestación de la United Auto Workers y ha hecho hincapié en su compromiso con el trabajo en su plataforma política, ya que se enfrenta a una reñida carrera en estados indecisos de cuello azul como Wisconsin, Michigan y Pensilvania.
Boeing, en su última oferta, acordó aumentar el salario neto de 91,000 a 112,000 dólares para sus bomberos. Esta oferta sigue sobre la mesa, declaró recientemente la empresa.
«Nosotros seguimos comprometidos en conseguir un acuerdo. Nuestra oferta proporciona aumentos salariales significativos y mayores beneficios», dijo Boeing en la declaración. «El sindicato debería permitir a nuestros empleados votar (sobre) nuestra oferta, que fue presentada antes del cierre».
Edward Kelly, presidente general del sindicato que representa a los bomberos, dijo que están «agradecidos de que el presidente defienda la negociación colectiva» y siga apoyándoles.
Después de que Boeing anunciara su cierre patronal el 4 de mayo, el Sr. Kelly calificó las acciones de «codiciosas».
«Anteponiendo la avaricia empresarial a la seguridad, Boeing ha decidido suspender a nuestros miembros, y la seguridad de las instalaciones de Washington se ha puesto innecesariamente en peligro».
The Epoch Times se puso en contacto con Boeing para pedirle comentarios.
Con al contribución de Jana J. Pruet e información de Reuters y The Associated Press.
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