Un nuevo proyecto de ley presentado en Kentucky pretende restringir el derecho de voto únicamente a las personas que sean ciudadanos estadounidenses, algo que, según los republicanos, es necesario para garantizar la integridad de las elecciones.
El proyecto de ley 341 se presentó en la Cámara de Representantes de Kentucky el 22 de enero. Propone modificar los artículos 145 y 155 de la Constitución de Kentucky para «prohibir que las personas que no sean ciudadanos de Estados Unidos puedan votar en la Commonwealth de Kentucky». La HB 341 fue presentada por el representante estatal Michael Meredith (R-Ky.).
«Este proyecto de ley marca un hito crucial para garantizar la integridad de nuestras elecciones», dijo en un comunicado. «Si HB341 recibe una mayoría de 2/3 de votos ‘sí’ en la Cámara y el Senado, se presentará en la boleta electoral en noviembre de 2024 para que los ciudadanos de Kentucky den su opinión».
El representante Killian Timoney (R-Ky.) señaló que siendo un representante de Kentucky, cree «firmemente» en «preservar la integridad de nuestro proceso democrático.»
«Permitir que solo voten los ciudadanos estadounidenses garantiza que las voces que se oyen en nuestras elecciones reflejan verdaderamente los intereses y valores de nuestra comunidad. Es un principio fundamental de nuestra democracia dar prioridad a los derechos y responsabilidades de los ciudadanos, salvaguardando los cimientos sobre los que se asienta nuestro gran estado.»
Durante una audiencia del Comité Permanente de Elecciones, Enmiendas Constitucionales y Asuntos Gubernamentales de la Cámara de Representantes de Kentucky celebrada el 25 de enero, el Sr. Meredith justificó el proyecto de ley y explicó su razonamiento cuando otro legislador planteó sus preocupaciones.
«Creo que la intención era que solo votaran los ciudadanos», dijo, según el West Virginia Record. «Esto se ha probado en otras ciudades. Nueva York, California y Maryland han permitido (que los no ciudadanos voten) en las elecciones escolares. Se han mantenido. El lenguaje dice permitir a los ciudadanos pero no dice específicamente que los no ciudadanos no puedan».
También señaló que el coste de añadir la cuestión a las papeletas de Kentucky en noviembre sería «mínimo para el estado.»
El proyecto de ley de Meredith es la última de las medidas similares que varios estados han introducido recientemente sobre el derecho al voto de los ciudadanos.
El 22 de enero, el senador Craig Blair ( R-W.Va.) presentó una resolución para enmendar la Constitución de Virginia Occidental con el fin de limitar el derecho de voto a los ciudadanos estadounidenses.
En una entrevista con este medio, el senador estatal Mike Stuart (R-W.Va.), copatrocinador del proyecto de ley, señaló la afluencia de inmigrantes bajo la administración Biden como una razón por la que es necesaria la restricción del voto por ciudadanía.
«El voto debe ser exclusivamente el derecho fundamental de los ciudadanos reales de los Estados Unidos … El fracaso de la Administración Biden para asegurar la frontera sur ha causado una invasión ilegal de la nación».
«Aunque apoyo la inmigración legal, a nadie le gustan los que hacen cola en Disney World o en la frontera. Los ciudadanos legales que están aquí de acuerdo con nuestras leyes deberían tener derecho a votar, nadie más», dijo. «Como ciudadano estadounidense, no voto en las elecciones de otros países, y ellos no deberían votar en las nuestras».
En Virginia se ha presentado una ley que obligaría a los residentes del estado a demostrar su ciudadanía estadounidense para poder inscribirse en el censo electoral. Entre las pruebas aceptables figuran el pasaporte, el certificado de nacimiento o los documentos de naturalización.
Agenda demócrata
En un comentario publicado el 3 de enero en The Epoch Times, Newt Gingrich, autor y excongresista de Georgia que fue el 50º presidente de la Cámara de Representantes de EE.UU., destacó el intento demócrata de conseguir la entrada en EE.UU. del mayor número posible de extranjeros ilegales y hacer posible que esos no ciudadanos voten en las elecciones.
«El presidente Joe Biden dejó que millones de inmigrantes ilegales cruzaran la frontera. Luego los envió en autobús a Washington. Ahora la maquinaria demócrata de la ciudad quiere dejarles votar, sabiendo que casi seguro votarán a los demócratas por todo el apoyo y la ayuda», escribió.
«Esta política es una clara amenaza para el nacionalismo estadounidense… En efecto, los no ciudadanos desplazarían a los estadounidenses con los que la izquierda no está de acuerdo».
Como parte de la promoción del voto de los no ciudadanos, la izquierda calificará de «racistas» los intentos de impedirlo, advirtió Gingrich. Hizo un llamamiento al Congreso para que bloquee rápidamente los esfuerzos de los políticos de Washington por permitir el voto de los no ciudadanos en la capital.
En Santa Ana, California, se presentará este año a los votantes una propuesta para permitir el voto de los no ciudadanos en las elecciones locales.
En Maryland, los no ciudadanos pueden votar en las elecciones locales de 11 ciudades. En Vermont, tres ciudades permiten el voto a los no ciudadanos. En 2022, los votantes de Oakland, California, permitieron el voto de los no ciudadanos en las elecciones locales.
Durante una rueda de prensa el mes pasado, la diputada Nicole Malliotakis ( R-N.Y.) anunció haber recibido una copia de un acuerdo entre el Departamento de Servicios Sociales de la ciudad de Nueva York y la organización sin ánimo de lucro Homes for the Homeless (Hogares para los Sin Techo), contratada para instalar refugios de emergencia para inmigrantes.
El acuerdo parecía exigir a los contratistas que proporcionaran formularios de registro de votantes a los inmigrantes, según Fox.
«Esta es la pistola humeante que prueba lo que hemos estado diciendo todo el tiempo, que la ciudad tiene la intención de registrar a los no ciudadanos para votar, e incluso aquellos que residen en estos refugios para migrantes por solo 30 días», dijo durante la conferencia. «Es extremadamente preocupante. Debería preocupar a todos los ciudadanos».
Un portavoz del Departamento de Servicios Sociales de NYC calificó las acusaciones de «infundadas».
«DHS está legalmente obligado a incluir el lenguaje en torno al registro de votantes en los contratos de refugio, y esta orientación se aplica solo a los clientes elegibles que son ciudadanos y claramente no se aplicaría a los solicitantes de asilo en el refugio», dijo el portavoz al medio.
En 2021, el Ayuntamiento de Nueva York aprobó una ley que permitía a los no ciudadanos votar en las elecciones locales. Varios legisladores, entre ellos Malliotakis, demandaron a la ciudad. En julio de 2022, un juez estatal anuló la ley.
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