El gobernador de Texas, Greg Abbott, afirmó que la sugerencia de federalizar las Guardias Nacionales estatales sería un grave «error político» por parte de la Administración Biden en medio de una batalla legal sobre la aplicación de la ley en la frontera entre Estados Unidos y México.
La semana pasada, la lucha legal se intensificó después de que la Corte Suprema de EE. UU. emitiera un fallo de 5-4 que favorecía a la Administración Biden, permitiendo a los agentes federales cortar el alambre de púas instalado en el marco de la Operación Estrella Solitaria de Texas. Miembros de la Guardia Nacional de Texas participaron en la instalación de la alambrada a lo largo de la frontera, que, según altos funcionarios del Estado, es eficaz para disuadir la inmigración ilegal.
«Este es el problema número 1 en Estados Unidos. Los estadounidenses quieren una frontera segura. Si Joe Biden federaliza nuestra Guardia Nacional, sería el mayor error político que se puede cometer, y por eso creo que no lo hará», dijo Abbott, republicano, a Sean Hannity, de Fox News, el lunes por la noche.
«Estoy preparado en caso de que cometan un error tan garrafal para asegurarme de que Texas podrá seguir asegurando nuestra frontera», añadió.
En un comentario separado en las redes sociales, el gobernador citó una encuesta que encontró que alrededor del 70 por ciento de los estadounidenses respaldan que Texas establezca barreras en la frontera para frenar la inmigración ilegal, y agregó que el 53 por ciento lo apoya firmemente. El sondeo, realizado por Rasmussen Reports, reveló que sólo el 27% estaba en desacuerdo con la medida.
Tras la sentencia de la Corte Suprema, se vio a la Guardia Nacional de Texas instalando más alambre de púas cerca de la frontera, aunque algunos analistas jurídicos han dicho que la sentencia del alto tribunal sólo se refería a la retirada o corte del alambre, no a si el estado podía o no seguir colocándolo allí.
Algunos demócratas, entre ellos el candidato presidencial para 2020 Beto O’Rourke, han sugerido que el presidente Joe Biden debería nacionalizar la Guardia Nacional, lo que ha provocado un fuerte rechazo por parte de los republicanos. El Sr. O’Rourke y los otros demócratas han dicho que los continuos intentos de Texas para instalar la barrera es equivalente a una crisis constitucional.
En los últimos meses, el Sr. Abbott ha afirmado que el aumento de la actividad de su estado a lo largo de la frontera cae bajo la autoridad constitucional de Texas para defenderse de lo que describió como una invasión. El lunes volvió a defender este argumento.
«Por lo tanto, Texas tiene todo el derecho constitucional en este caso, y creo que, cuando esto se termine, Texas será reivindicada, y la Constitución será fortalecida», dijo el gobernador.
Aparte de la disputa legal en torno al alambre de púas, el gobierno de Biden exigió recientemente que Texas diera a los agentes de la Patrulla Fronteriza de EE. UU. acceso a un parque frente al río que es un corredor popular para entrar en Estados Unidos.
Texas dijo a la Corte Suprema que el parque fue reabierto al público días después de que lo cerraran, pero el gobierno federal expresó escepticismo en su carta. La Administración de Biden solicitó acceso al parque, un área bajo un puerto de entrada y una rampa para botes.
«Que sepamos, Texas sólo ha permitido el acceso al Parque Shelby permitiendo la entrada del público a un monumento conmemorativo, a los medios de comunicación y el uso del campo de golf adyacente al Parque Shelby, todo ello mientras sigue restringiendo el acceso de la Patrulla Fronteriza de EE. UU. al parque», decía la carta de Seguridad Nacional.
Los tribunales de apelación también se han pronunciado sobre otras barreras que Texas ha levantado en los últimos meses, incluida una formada por boyas que se instaló en medio del Río Grande. El mes pasado, la Corte de Apelaciones del 5º Circuito de EE. UU. ordenó a Texas que retirara esa barrera de boyas, aunque el tribunal dijo más tarde que volvería a examinar el caso.
Trump responde
Su impulso a la seguridad fronteriza también recibió elogios del expresidente Donald Trump, quien dijo durante un evento el sábado que respalda la iniciativa del gobernador de instalar alambre de púas.
En un discurso centrado en la seguridad fronteriza, el expresidente dijo que Texas debería recibir todo el apoyo en sus medidas para disuadir a los inmigrantes ilegales a lo largo de la frontera entre Estados Unidos y México.
«Cuando sea presidente, en lugar de intentar enviar a Texas una orden de restricción, les enviaré refuerzos», dijo ante una multitud de simpatizantes en Las Vegas. «En lugar de luchar contra los estados fronterizos, usaré todos los recursos, herramientas y autoridad del presidente de Estados Unidos para defender a Estados Unidos de América de esta horrible invasión que está teniendo lugar en este momento».
El presidente Trump, en los últimos meses, ha dicho que si es elegido, llevaría a cabo el mayor esfuerzo de deportación en la historia de Estados Unidos. También ha reiterado los llamados a terminar la construcción de un muro a lo largo de la frontera entre Estados Unidos y México, una promesa clave de su campaña de 2016.
Con información de The Associated Press.
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