El primer ministro nipón, Shinzo Abe, mantuvo este sábado una conversación telefónica con el presidente estadounidense, Donald Trump, para comentarle el resultado de su encuentro en Tokio con el mandatario iraní, Hasan Rohaní.
Esta llamada telefónica fue una condición que había puesto Trump a Abe para darle su visto bueno a su cita con Rohaní en Tokio, según explicaron fuentes del Ejecutivo nipón a la agencia Kyodo.
En el encuentro celebrado el viernes en Tokio, Abe pidió al líder de Teherán que se mantenga fiel al acuerdo sobre el programa nuclear iraní firmado en 2015, del que Estados Unidos se retiró el año pasado.
La reunión tuvo lugar durante la visita de Rohaní a Japón estos viernes y sábado, la primera de un jefe de Estado de la República Islámica en cerca de dos décadas.
El primer ministro nipón también expresó sus deseos de que Irán «juegue un papel constructivo» para el mantenimiento de la paz en Oriente Medio, en su intervención durante la primera parte de la reunión que estuvo abierta a los medios.
La cita también sirvió para que el Gobierno nipón explicara con detalles las medidas para asegurar la navegación marítima en rutas clave del golfo Pérsico, entre las que Japón planea enviar activos de sus Fuerzas de Autodefensa (Ejército) a la región.
La reunión entre Abe y Rohaní sigue a la que tuvo en Teherán el primer ministro nipón cuando visitó esa ciudad en junio pasado, en medio de versiones sobre unos intentos de mediación de Tokio para aliviar las tensiones entre Washington y la República Islámica, que no dieron frutos.
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