El abogado especial Jack Smith ha solicitado un aplazamiento del juicio por documentos clasificados en el que está implicado el expresidente Donald Trump, proponiendo como nueva fecha de inicio del juicio el 11 de diciembre.
La solicitud pide que el juicio se retrase cuatro meses porque hay información clasificada implicada. Para manejar esta información, los abogados de Trump necesitan obtener autorizaciones de seguridad, y ese proceso lleva tiempo.
Actualmente se están tramitando autorizaciones de seguridad provisionales, que deberían concederse en un plazo de 48 horas después de que los abogados de Trump presenten los formularios requeridos. Sin embargo, la obtención de la autorización definitiva para acceder a algunos documentos clasificados concretos puede llevar entre 45 y 60 días.
El martes, la juez de distrito Aileen Cannon fijó la fecha del juicio para el 14 de agosto, es decir, dentro de unas siete semanas. Aunque los acusados tienen derecho a un juicio rápido, hay situaciones en las que las partes pueden pedir más tiempo, como ocurre en este caso.
Para acceder a la mayor parte de la información clasificada relevante para el caso, los abogados de Trump necesitan autorizaciones de seguridad. Smith declaró que ha hablado con los abogados de Trump y que no se han opuesto al retraso de la fecha del juicio. Sin embargo, se prevé que el equipo jurídico de Trump presente su propia moción expresando sus preocupaciones y objeciones a las fechas sugeridas por el gobierno.
La moción de Smith señalaba que el gobierno ha proporcionado sin demora a la defensa material de prueba no clasificado, incluidas pruebas obtenidas mediante citaciones, órdenes judiciales, transcripciones de testimonios ante el gran jurado, entrevistas a testigos, documentos relevantes y grabaciones de circuito cerrado de televisión obtenidas durante la investigación.
«Incluso con la pronta producción que el gobierno ha dispuesto, la inclusión de tiempo adicional para que el abogado defensor revise y digiera el descubrimiento, para que tome sus propias decisiones sobre cualquier producción al gobierno, y para que el gobierno revise lo mismo, es razonable y apropiado», afirma la moción (pdf).
Solicitud de Oficial de Seguridad de Información Clasificada
La moción aclara que la Ley de Procedimientos sobre Información Clasificada (CIPA, por sus siglas en inglés) tiene implicaciones para los procedimientos del juicio, ya que introduce requisitos temporales adicionales específicos para los casos relacionados con información clasificada. En virtud de la CIPA, las partes pueden solicitar una renunción previa al juicio para debatir cualquier posible cuestión relacionada con el enjuiciamiento del caso relativa a información clasificada.
Como el caso contra Trump contiene material clasificado de la defensa, Smith también presentó una moción (pdf) solicitando una reunión previa al juicio y el nombramiento de un Oficial de Seguridad de la Información Clasificada. Según la moción, el CIPA determinará cómo gestiona el tribunal el descubrimiento de información clasificada y establece directrices para determinar la admisibilidad de dicha información en el juicio.
La moción de Smith subrayaba que seguir adelante con el juicio en la fecha prevista inicialmente no daría tiempo suficiente para una preparación adecuada, lo que repercutiría negativamente tanto en los intereses de la defensa como en los del gobierno.
Aunque el retraso puede repercutir en el derecho de Trump a un juicio rápido, Smith alegó que la prórroga propuesta sirve mejor a los intereses de la justicia.
La orden de Cannon de 20 de junio por la que se fijaba la fecha del juicio especificaba que toda solicitud de prórroga debía incluir información específica, como si las razones para conceder la moción prevalecerían sobre el derecho de Trump a un juicio rápido.
Moción para impedir que Trump se comunique con los testigos
Smith también presentó otra moción solicitando la aprobación para presentar una lista confidencial de testigos, que ha sido compartida con el equipo jurídico de Trump, en la que se especifican las personas con las que Trump y su coacusado, Walt Nauta, tienen prohibido comunicarse.
Durante la comparecencia de Trump el 13 de junio, en la que tanto él como Nauta se declararon inocentes, el tribunal ordenó a Trump que no se comunicara con Nauta ni con los testigos implicados en el caso. El propio Trump no se dirigió al tribunal, pero su abogado, Todd Blanche, habló en su nombre y declaró: «Con toda seguridad nos declaramos inocentes».
Durante el proceso, Smith presentó pruebas que indicaban que Trump presuntamente había infringido la ley federal. Las pruebas sugerían que conservó documentos sensibles después de su mandato, que los compartió con personas que no estaban autorizadas a acceder a dicha información y que obstruyó la investigación al ordenar a Nauta que reubicara cajas en Mar-a-Lago en lugar de entregar todo el material a las autoridades.
Trump ha mantenido su inocencia y enmarca la acusación como un arma del Departamento de Justicia contra él por parte de su principal rival presidencial para 2024, el presidente Joe Biden. Trump dijo en un mitin en Georgia que las acciones de la Administración Biden «figurarán entre los abusos de poder más horribles de la historia de nuestro país».
Aunque estaba previsto que la selección del jurado del juicio comenzara el 14 de agosto, se preveía que el proceso se retrasaría debido a las peticiones previas al juicio presentadas por el equipo jurídico de Trump.
Expertos jurídicos han sugerido que el juicio podría prolongarse después de las elecciones presidenciales de 2024.
Con información de Zachary Stieber.
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