El expresidente Donald Trump presentó esta semana una moción para desestimar su caso de documentos clasificados, alegando que funcionarios alteraron pruebas exculpatorias.
Los fiscales revelaron hace varias semanas que se había cambiado el orden de los materiales dentro de las cajas de pruebas.
Una moción presentada por sus abogados a última hora del 10 de junio pide a la jueza federal de distrito Aileen Cannon que deseche el caso, que alega que el expresidente acaparó ilegalmente material clasificado y de alto secreto después de dejar el cargo a principios de 2021.
El «orden original de los documentos dentro de las cajas» no se conservó tras su obtención, dice la moción.
«No hay fotografías o registros que documenten la naturaleza en la que los documentos supuestamente clasificados se mezclaron con efectos personales y fuera de la vista», continuaron sus abogados, agregando que la evidencia «era materialmente exculpatoria» sobre las alegaciones de que el presidente Trump violó la Ley de Espionaje.
Los fiscales a cargo del abogado especial Jack Smith, que llevó el caso, no han presentado una moción en respuesta a las últimas acusaciones. Hasta ahora, la jueza Cannon ha rechazado los intentos previos del expresidente de desestimar el caso, y aún no se ha pronunciado sobre la moción del 10 de junio.
«De hecho, los documentos en las cajas no están en el mismo orden que cuando fueron incautados principalmente porque el equipo de filtrado no hizo ningún esfuerzo para preservar los documentos de esa manera», escribieron los abogados del expresidente Trump.
En mayo, el equipo del señor Smith confirmó que algunas pruebas que se obtuvieron de la casa Mar-a-Lago del expresidente Trump en 2022 no estaban en las mismas condiciones cuando se encontraron.
«Hay algunas cajas donde el orden de los artículos dentro de esa caja no es el mismo que en los escaneos asociados», escribieron los fiscales en la presentación, y agregaron que el equipo de Smith «reconoce que esto es inconsistente con lo que el abogado del gobierno entendió y representó previamente ante la corte».
Ellos han sostenido que a pesar de que los materiales fueron reordenados, las cajas siguen conteniendo la misma evidencia que cuando se tomaron de Mar-a-Lago.
La oficina del Sr. Smith solicitó que los abogados del expresidente Trump incluyeran una declaración del equipo de Smith en la presentación del 10 de junio para desestimar el caso, diciendo que el «acusado no ha proporcionado apoyo fáctico o legal para una reclamación de expoliación bajo el control del Undécimo Circuito y la jurisprudencia de la Corte Suprema».
«El gobierno ha cumplido y superado sus obligaciones de presentación de pruebas y otras obligaciones legales. Las alegaciones de mala conducta del acusado son, una vez más, falsas», declaró la oficina del abogado especial, según un comentario adjunto a la moción del 10 de junio.
El mismo día, la jueza Cannon rechazó una moción de Trump para que se retiraran varios cargos. Sin embargo, dictaminó que un párrafo de una de las acusaciones fuera eliminado del expediente. Se refiere principalmente a una acusación de que el expresidente mostró información militar sensible a uno de sus ayudantes después de dejar la Casa Blanca.
La jueza dijo en su orden que «las deficiencias identificadas, aunque generen cierta confusión discutible, están permitidas por la ley, plantean retos probatorios no apropiados para su disposición en esta coyuntura, y/o no requieren la desestimación, incluso si son técnicamente deficientes, siempre y cuando el jurado sea instruido adecuadamente y se le presenten formularios de veredicto adecuados en cuanto a la supuesta conducta de cada uno de los acusados».
En otros fallos, la jueza ha desechado los argumentos del equipo de Trump que sugieren que estaba autorizado bajo la Ley de Registros Presidenciales para retener los documentos clasificados después de dejar la Casa Blanca.
La jueza Cannon programó tres audiencias previas al juicio para finales de junio, pero ha pospuesto la presentación de pruebas en el caso de los documentos clasificados hasta al menos el próximo mes mientras considera las mociones.
No se ha fijado fecha de juicio para el expresidente Trump ni para los dos coacusados en el caso: Walt Nauta y Carlos de Oliveira.
Esto se produce después de que el expresidente Trump fuera condenado por 34 cargos de falsificación de registros comerciales en un caso de Nueva York, convirtiéndose en el primer ex jefe ejecutivo de Estados Unidos en ser condenado por un delito grave.
Ha prometido apelar el veredicto. La fecha de su sentencia está fijada para el 11 de julio, es decir, cuatro días antes del comienzo de la Convención Nacional Republicana que probablemente lo designará candidato presidencial del Partido Republicano.
The Epoch Times se puso en contacto con el Departamento de Justicia el 12 de junio para solicitar comentarios.
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