Los ciudadanos del estado de Virginia, Estados Unidos, votan el 2 de noviembre para elegir a su próximo gobernador.
Las urnas abrieron a las 6 de la mañana después de que las cifras de votación anticipada establecieran un nuevo récord.
Alrededor de 1.13 millones de personas presentaron boletas de voto anticipado, esto es casi un 20 por ciento de los virginianos que pueden votar, según TargetSmart.
Alrededor del 53 por ciento de las boletas de voto emitidas hasta el momento proceden de demócratas y un 30.9 por ciento del Partido Republicano. El resto corresponde a los no afiliados a ningún partido.
El número de votos anticipados fueron menos de 190,000 en la anterior elección a gobernador, cuando los votantes eligieron al demócrata Ralph Northam.
La Constitución de Virginia prohíbe a los gobernadores ejercer un segundo mandato consecutivo.
El exgobernador demócrata, Terry McAuliffe, compite con el republicano Glenn Youngkin para suceder a Northam.
Youngkin dijo en Fox News que veía las cifras de voto anticipado como «muy representativas de nuestra fuerza».
«Históricamente, el voto anticipado ha sido entre un 75 y un 80 por ciento demócrata. Así que el hecho de que seamos tan fuertes en la votación anticipada solo refleja que no hay ningún entusiasmo por mi oponente. Nosotros estamos muy entusiasmados por lo que esperamos hacerlo realmente bien mañana», agregó el aspirante republicano.
«Este año vamos a tener la mayor participación en un año no presidencial en la historia del estado de Virginia”, dijo a su vez McAuliffe en un mitin en Fairfax en la víspera de las elecciones. “Sí, tengo una gran ventaja en el voto anticipado. Pero eso no significa nada. Es mañana en persona. También tenemos que ganar eso», añadió.
Durante un mitin en el condado de Loudoun, Youngkin describió las elecciones como «un momento decisivo para el futuro de nuestra mancomunidad, un momento decisivo en el que tenemos que decir ‘no’ a esta agenda progresista liberal de izquierda que está tratando de dominarnos».
El republicano obtuvo el apoyo de los padres molestos por el giro hacia la izquierda de las enseñanzas y políticas escolares. En Loudoun, el consejo escolar aprobó a principios de este año una política protransgénero que elimina las restricciones tradicionales de género en los baños.
McAuliffe desestimó en gran medida las preocupaciones sobre lo que se enseña en las escuelas. El candidato apareció en el mitin de Fairfax con Randi Weingarten, presidenta del sindicato American Federation for Teachers.
En su discurso a la multitud dijo que quiere «construir la mejor educación» mejorando el salario medio de los profesores y consiguiendo que los niños tengan acceso a Internet de banda ancha para que puedan aprender online.
También dijo que él y Youngkin difieren en varias propuestas políticas. McAuliffe, por ejemplo, apoya el acceso generalizado al aborto, mientras que Youngkin aboga por políticas provida.
Los electores también votarán en otras contiendas, entre ellas la de quiénes ocuparán los escaños de la Cámara de Representantes de Virginia.
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