Las acciones de Credit Suisse se desplomaron un 63% en las primeras operaciones del lunes hasta alcanzar un nuevo mínimo después de que se anunciara que UBS compraría el banco en apuros en una operación multimillonaria respaldada por una línea de crédito de emergencia de USD 100,000 millones de dólares del banco central suizo.
Las acciones de Credit Suisse recuperaron parte de las pérdidas iniciales el lunes por la mañana y, al momento de la publicación del artículo, ya habían bajado un 59% en el día, mientras los inversores digerían la noticia de que UBS se haría cargo de su banco en apuros en una adquisición respaldada por el Estado.
El acuerdo de rescate prevé que UBS compre Credit Suisse, de 167 años de antigüedad, por unos USD 3230 millones de dólares y absorba hasta USD 5400 millones en pérdidas.
«Con la adquisición de Credit Suisse por parte de UBS, se ha encontrado una solución para garantizar la estabilidad financiera y proteger la economía suiza en esta situación excepcional», indicó el Banco Nacional Suizo (BNS) en una declaración.
Credit Suisse es una de las 30 instituciones financieras conocidas como bancos de importancia sistémica mundial (G-SIB) por lo que las autoridades temían que su quiebra pueda socavar la estabilidad del sistema financiero en general.
«Un colapso incontrolado de Credit Suisse acarrearía consecuencias incalculables para el país y el sistema financiero internacional», dijo el domingo el presidente suizo, Alain Berset, al anunciar el acuerdo, que describió como «de gran amplitud para la estabilidad de las finanzas internacionales».
Fue necesaria una ordenanza de emergencia para permitir que la fusión UBS-Credit Suisse siguiera adelante sin la aprobación de los accionistas.
«El mejor resultado posible»
Credit Suisse afirmó en un comunicado que, hasta que se cierre el acuerdo, el banco seguirá funcionando como hasta ahora.
«Hasta la consumación de la fusión, Credit Suisse continuará desarrollando su actividad en el curso ordinario de los negocios y aplicará sus medidas de reestructuración en colaboración con UBS».
Axel Lehmann, presidente del Consejo Administrativo de Credit Suisse, afirmó en un comunicado que la fusión con UBS es la mejor solución posible.
«Dadas las recientes circunstancias extraordinarias y sin precedentes, la fusión anunciada representa el mejor resultado posible», dijo el presidente del consejo administrativo.
«Han sido tiempos extremadamente difíciles para Credit Suisse y, aunque el equipo ha trabajado incansablemente para abordar muchas cuestiones heredadas significativas y ejecutar su nueva estrategia, nos vemos obligados a alcanzar hoy una solución que ofrece un resultado duradero», añadió Lehman.
Para garantizar que la adquisición se desarrolle sin contratiempos, el banco central suizo ofreció a UBS unos USD 100,000 millones en ayuda a la liquidez.
«La importante provisión de liquidez garantizará que ambos bancos tengan acceso a la liquidez necesaria», declaró el Banco Nacional de Suiza en un comunicado, en el que no se ofrecieron más detalles sobre la línea de crédito, salvo que estará respaldada por una garantía federal de impago.
Tras conocerse la noticia de la compra de emergencia, los bancos centrales del mundo —incluida la Reserva Federal de Estados Unidos— anunciaron medidas coordinadas para estabilizar los bancos, incluido el despliegue de líneas de swap para que los bancos puedan tomar prestados dólares estadounidenses si lo necesitan.
Las acciones de UBS cayeron un 10% en las operaciones del lunes, tras un día de fuertes ventas en los mercados financieros asiáticos al evaporarse el optimismo inicial de los inversores sobre los esfuerzos para frenar la crisis bancaria.
La atención de los inversionistas se ha desplazado al enorme golpe que algunos tenedores de bonos de Credit Suisse sufrirían con la adquisición de UBS.
El regulador financiero suizo FINMA dijo que la operación de compra provocará una «completa amortización» de los bonos de nivel 1 adicional (AT1) de Credit Suisse, cuyo valor asciende a unos USD 17,000 millones, lo que supondrá un aumento del capital básico del banco.
La masiva amortización de los bonos se ha sumado a la ansiedad por otros riesgos clave, como el contagio, la frágil situación de los bancos regionales estadounidenses y los retos a los que se enfrentan los bancos centrales en su intento de contener la inflación y los riesgos financieros.
Las acciones de los bancos europeos sufrieron una golpiza en las primeras operaciones del lunes, mientras los inversores digerían la noticia de la adquisición de emergencia de Credit Suisse.
JPMorgan afirmó que, aunque UBS se beneficiaría a largo plazo de la operación, la amortización de los bonos AT1 afectaría a otros bancos europeos.
«Nosotros creemos que esta amortización de AT1 por parte de un banco de importancia sistémica tendrá implicaciones negativas para el mercado de AT1 de los bancos europeos en general, así como para el perfil general de financiación y el costo de capital de los bancos», escribieron los estrategas de JPMorgan en una nota el lunes.
Un índice de 600 valores bancarios europeos cayó hasta un 6% en las primeras operaciones del lunes, aunque desde entonces ha recuperado parte de sus pérdidas. Hacia las 6:30 de la mañana, hora de Nueva York, el índice perdía un 1.5%.
El índice se desplomó alrededor de un 16% este mes, después de que varias quiebras recientes de bancos estadounidenses desataran temores de contagio y una mayor venta masiva de acciones bancarias.
El presidente de UBS, Colm Kelleher, dijo en un comunicado que la fusión es «atractiva» para los accionistas de UBS y que el acuerdo consolida la posición de UBS como gestor de activos líder en Europa.
«Esta adquisición es atractiva para los accionistas de UBS, pero, seamos claros, en lo que respecta a Credit Suisse, se trata de un rescate de emergencia», dijo Kelleher.
«La transacción aportará beneficios a los clientes y creará valor sostenible a largo plazo para nuestros inversionistas».
Únase a nuestro canal de Telegram para recibir las últimas noticias al instante haciendo click aquí
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.