Tres presos fueron acusados este jueves de la muerte del mafioso James «Whitey» Bulger en octubre de 2018 cuando se encontraba en una prisión de alta seguridad de Virginia Occidental (EE.UU.), a donde había sido trasladado unas pocas horas antes.
La Fiscalía del distrito Norte de Virginia Occidental presentó un cargo de conspiración para cometer asesinato contra Fotios «Freddy» Geas, de 55 años, Paul J. «Pauly» DeCologero, de 48, y Sean McKinnon, de 36.
«Whitey» Bulger, de 89 años en 2018, y a quien inmortalizó el actor Jack Nicholson en la película «The Departed» de Martin Scorsese, fue el jefe de la mafia irlandesa en Boston en los años 70 y 80.
Durante esas décadas, la banda de Bulger, centrada en el sur de Boston, y sus rivales de la mafia italiana, con conexiones en Nueva York, protagonizaron una sangrienta batalla por el control de la ciudad en unas escenas que se reviven ahora en el juicio que se celebra en Boston.
Bulger huyó en 1994 de Boston y permaneció durante 16 años escondido en un sencillo apartamento de Santa Mónica (California), una acomodada ciudad del condado de Los Ángeles a orillas del Pacífico, junto a su compañera sentimental, Catherine Greig.
Ante las dificultades para localizarlo, los agentes federales se centraron en el paradero de Greig, conocida por su pasión por la cirugía estética, a quien finalmente descubrieron en 2011 acompañada por Bulger, que se había cambiado el nombre.
En 2013, Bulger fue condenado a dos cadenas perpetuas por 11 asesinatos cometidos durante sus años al frente de la «Winter Hill Gang», que controlaba gran parte del negocio de tráfico de drogas, extorsión y apuestas ilegales de la ciudad.
El gángster fue fugitivo de la Justicia estadounidense durante más de 16 años y figuraba junto al terrorista Osama bin Laden en la lista de los más buscados.
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