PARÍS—El equipo de ensueño de España se encontró con la horma de su zapato cuando las esperanzas de Rafa Nadal y Carlos Alcaraz de conseguir una medalla de oro olímpica en dobles se vieron truncadas el miércoles por los estadounidenses Rajeev Ram y Austin Krajicek, una derrota que supone casi con toda seguridad la despedida de Nadal de Roland Garros.
Sus progresos cautivaron al público en el lugar en el que Nadal conquistó 14 coronas individuales en el Abierto de Francia, pero el viaje terminó con una derrota por 6-2 y 6-4 en cuartos de final.
«Si esta fuera la última vez, será una sensación y unas emociones inolvidables. Me dieron amor y apoyo cada segundo y es súper, súper especial sentir eso,» dijo el tenista de 38 años Nadal a los periodistas».
«Nadalcaraz», como se les conoce desde que unieron sus fuerzas, recibieron un apoyo estruendoso en la abarrotada Pista Philippe Chatrier, que parecía más un estadio de fútbol cuando los aficionados alentaron a los españoles.
Cuando Krajicek, ganador del dobles del Abierto de Francia de 2023, hizo el saque para el partido y perdió puntos de quiebre, hubo un caos dentro del estadio y el árbitro tuvo que luchar por mantener el orden.
Sin embargo, los cuartos pre-clasificados de serie estadounidenses mantuvieron la calma y cuando Krajicek anotó un ace en el punto de partido, la incredulidad fue casi silenciosa mientras la árbitro se levantaba de su silla para confirmar que la pelota había tocado la cinta blanca.
Nadal comenzó los Juegos portando la llama olímpica en la ceremonia inaugural, pero los termina sin la tercera medalla de oro que ansiaba, por lo que podría ser su última reverencia sobre la arcilla parisina.
Mientras Nadal se alejaba junto al hombre que lo reemplazó como fuerza en el tenis, los aficionados hacían fotos con sus teléfonos y parecía el final.
«Para mí personalmente fue decepcionante no traer de vuelta una medalla para España», dijo Nadal. «Me esforcé al máximo en cada minuto que estuve en la pista, pero no fue suficiente.
«No sé qué va a pasar en el futuro, pero si es la última vez lo disfruté».
Nadal, veintidós veces campeón de torneos del Grand Slam, se mostró evasivo respecto a cuándo terminará su carrera, pero parece una cuestión de tiempo.
Cuando se le preguntó si jugaría en el Abierto de Estados Unidos después de los Juegos Olímpicos, respondió: «No puedo darte una respuesta clara, necesito algo de tiempo pero para mí parece difícil».
Ambiente especial
Krajicek dijo que fue especial formar parte del ambiente, aunque él tuviera un gran papel en arruinar el guión.
«Estar un ambiente así. Tienes que absorberlo todo», dijo. «La energía estaba por las nubes».
En realidad, Nadal y Alcaraz no podían quejarse, ya que se enfrentaban a una pareja muy bien formada, con Ram, de 40 años, cuatro veces campeón de dobles masculinos de Grand Slam, soberbio en todo momento con un juego de red muy afilado.
En sus dos partidos anteriores en París, Nadal y Alcaraz recibieron el apoyo del público, con un juego inspirado que les hizo albergar esperanzas de llegar hasta el final.
Pero esta vez, Alcaraz, de 21 años, que el miércoles alcanzó los cuartos de final de individuales, careció de su chispa habitual y cometió dobles faltas consecutivas para dejar prácticamente en bandeja a los estadounidenses el primer set.
Esta vez no hubo vuelta atrás y Alcaraz cedió el saque en el 3-3—mostrando la frustración de los españoles al impugnar una línea de saque tras un fulgurante Ram ganador.
«Disfruté cada segundo que jugamos juntos», dijo Alcaraz. «Me decepcioné porque queríamos seguir».
Ram y Krajicek se enfrentarán a los checos Tomas Machac y Adam Pavlasek por un lugar en la final por la medalla de oro.
Por Martyn Herman.
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