La administración Biden lanzó una iniciativa de más de USD 5000 millones para acelerar el desarrollo de nuevas vacunas y tratamientos contra el COVID-19 y contra otros coronavirus que podrían representar una amenaza futura.
La noticia llega el mismo día que el presidente Joe Biden firmó una medida para poner fin a la emergencia nacional por el COVID-19.
“Sobre la base del trabajo que la Administración ha realizado en los últimos años y para adelantarse a la evolución del virus que causa el COVID-19, el Proyecto NextGen acelerará y agilizará el rápido desarrollo de la próxima generación de vacunas y tratamientos a través de colaboraciones público-privadas”, le dijo un alto funcionario de la administración a The Epoch Times en un comunicado enviado por correo electrónico.
“La infusión de una inversión mínima de USD 5000 millones ayudará a catalizar el avance científico en áreas que tienen grandes beneficios de salud pública para el pueblo estadounidense con el objetivo de desarrollar herramientas seguras y efectivas para el pueblo estadounidense”, agregó el funcionario.
El programa adopta un enfoque similar a su predecesor, la «Operación Warp Speed», lanzada bajo la administración Trump en 2020, al asociarse con empresas del sector privado para acelerar el desarrollo de vacunas y terapias contra el COVID-19.
“Nos ha quedado muy claro que el mercado en esto se está moviendo muy lentamente. Hay mucho que el gobierno puede hacer, que la administración puede hacer, para acelerar esas herramientas… para el pueblo estadounidense», dijo Ashish Jha, el coordinador de respuesta anti-COVID de la Casa Blanca, a The Washington Post, que informó por primera vez sobre el nuevo programa.
Jha no dijo cuándo se espera que los productos lleguen al mercado. “Los plazos realmente se basarán en la rapidez con la que continúen los avances científicos y la rapidez con la que podamos estudiar y medir la eficacia y la seguridad de estos productos”, dijo al medio.
El programa tiene tres objetivos principales. Se centrará en la creación de anticuerpos monoclonales de larga duración resistentes a las nuevas variantes de COVID-19, así como en vacunas más amplias que puedan proteger contra varios coronavirus diferentes, también conocidas como vacunas pancoronavirales.
El “Proyecto NextGen” también busca acelerar el desarrollo de vacunas que produzcan inmunidad en las mucosas y puedan administrarse por la nariz, con la esperanza de que puedan reducir drásticamente las tasas de infección y transmisión.
“Si bien nuestras vacunas siguen siendo muy efectivas para prevenir enfermedades graves y la muerte, son menos capaces de reducir las infecciones y la transmisión con el tiempo”, le dijo a Reuters un portavoz del Departamento de Salud y Servicios Humanos de EE.UU. (HHS).
“Las nuevas variantes y la pérdida de inmunidad con el tiempo podrían continuar desafiando nuestros sistemas de atención médica en los próximos años”.
El programa, que tendrá su sede en el HHS, se coordinará con el gobierno y con el sector privado para hacer avanzar una serie de nuevas vacunas y tratamientos, según el portavoz del HHS. Abarcará todas las fases de desarrollo, desde la investigación en laboratorio y los ensayos clínicos hasta el suministro.
The Epoch Times se ha comunicado con el HHS en busca de más comentarios.
Con información de Reuters.
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