El presidente Joe Biden tomó medidas para ampliar la ventana para que los estadounidenses de bajos ingresos se unan al programa de la Ley de Atención Médica Asequible, también conocido como “Obamacare”. Esta medida probablemente respaldaría su promesa de campaña de ampliar el plan de atención médica del expresidente Barack Obama.
Según un plan presentado el jueves por el Departamento de Salud y Servicios Humanos (HHS), decenas de millones de personas que antes no eran elegibles para Medicaid podrían inscribirse para una nueva cobertura hasta el 30 de noviembre. Esta es una extensión de la fecha límite original del 31 de julio que se estableció para el período especial de inscripción.
Todas las personas que busquen cobertura a través de HealthCare.gov estarán sujetas al cronograma revisado, y los funcionarios también están instando a los mercados de seguros estatales a implementar la modificación.
Los pacientes que ya no califican para Medicaid o CHIP pueden cambiar a cobertura a través del Mercado de Seguros Médicos gracias a una extensión del período de inscripción especial temporal que comenzaron inmediatamente los Centros de Servicios de Medicare y Medicaid.
La extensión ofrece continuidad de cobertura para quienes hacen la transición de Medicaid o el Programa de seguro médico para niños (CHIP), alineándose con el inicio del próximo período de inscripción abierta.
El secretario del HHS, Xavier Becerra, enfatizó el compromiso del departamento con programas como Medicaid y CHIP y dijo: “Las acciones que anunciamos hoy, como las que hemos tomado durante el año pasado, demuestran que el HHS está comprometido a garantizar la cobertura de Medicaid y CHIP para todos los que son elegibles».
Añadió: «Estamos ayudando a aquellos que ahora calificarán para la cobertura del Mercado a obtenerla».
La administradora Chiquita Brooks-LaSure de CMS se hizo eco de los sentimientos del secretario Becerra, enfatizando la importancia de la cobertura de atención médica para las familias y diciendo: “Proteger y fortalecer el acceso a la cobertura de salud en Medicaid, CHIP y los mercados es una prioridad máxima”.
«Las medidas de hoy ayudarán a garantizar que más familias permanezcan conectadas a la atención médica que necesitan para prosperar».
Esta decisión se produce apenas unos meses después de que un informe de la Kaiser Family Foundation indicara que más de 10 millones de personas se han dado de baja en el programa. El éxodo masivo de participantes de Medicaid representa aproximadamente el 10 por ciento de los más de 90 millones de estadounidenses que dependen del programa de seguro médico público, según el informe de noviembre.
Hay algunos indicios de que las disposiciones requeridas por la pandemia de COVID-19 han dado lugar a las reducciones. Durante la emergencia de salud pública que concluyó en mayo de 2023, la Ley de Respuesta al Coronavirus de Familias Primero exigió la inscripción continua en Medicaid.
Durante la pandemia, la inscripción en Medicaid aumentó aproximadamente un 22 por ciento entre febrero de 2020 y diciembre de 2021, de 71.2 millones a 86.7 millones. A medida que Medicaid reanudó sus operaciones después de la pandemia, las reducciones en curso significan una reversión de esos cambios.
Durante la campaña electoral, el presidente Biden elogió la inscripción récord en Obamacare, que fue impulsada en parte por la legislación promulgada por los demócratas en 2021 que amplió los subsidios de la ley.
Además de prometer ampliar aún más el acceso a la atención médica durante su reelección, criticó a su oponente republicano por dar a entender que “terminaría” Obamacare una vez más.
El expresidente Donald Trump se pronunció sobre la atención sanitaria en noviembre del año pasado, diciendo en un post en Truth Social que está «considerando seriamente alternativas» a la Ley de Asistencia Asequible de 2010 si es elegido en 2024.
Durante su mandato, el expresidente intentó derogar la ley en 2017, pero fue bloqueado por el fallecido senador John McCain (R-Ariz.).
“Tuvimos un par de senadores republicanos que hicieron campaña durante seis años en contra y luego levantaron la mano para no ponerle fin”, escribió, refiriéndose al difunto senador. “Fue un punto bajo para el Partido Republicano, ¡pero nunca debemos rendirnos!”
Además, el expresidente citó otras preocupaciones, entre ellas que “el costo de Obamacare está fuera de control y, además, no es una buena atención médica”.
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