La administración Biden inauguró el sábado una nueva oficina nacional denominada «Oficina de Justicia Ambiental y Derechos Civiles Externos» encargada de abordar lo que algunos funcionarios dicen que son los daños desproporcionados infligidos en áreas de bajos ingresos y comunidades de color por la contaminación y el cambio climático.
La Agencia de Protección Ambiental de EE.UU. (EPA), una agencia ejecutiva independiente del gobierno federal de EE.UU., anunció que la nueva oficina “situará a la agencia para promover mejor la justicia ambiental, hacer cumplir las leyes de derechos civiles en comunidades sobrecargadas y otorgar nuevas subvenciones y asistencia técnica”.
La nueva oficina supervisará una parte de la inversión de USD 60,000 millones de los demócratas en iniciativas de justicia ambiental creadas por la Ley de Reducción de la Inflación, específicamente, la implementación y entrega de USD 3000 millones en subvenciones en bloque a comunidades desatendidas afectadas por la contaminación.
La EPA dijo que la nueva oficina garantizará la implementación “de otros programas de financiamiento provistos por la Ley de Reducción de la Inflación [y] la Ley de Infraestructura Bipartidista».
Tres programas existentes de la EPA, que supervisan la justicia ambiental, los derechos civiles y la prevención y resolución de conflictos, se fusionarán en la nueva oficina de alto nivel.
La nueva oficina nacional tendrá más de 200 empleados en la sede de la EPA y en 10 regiones de EE.UU., según la agencia. El personal está a cargo de tratar de comprender mejor las necesidades de las comunidades que tienen «preocupaciones de justicia ambiental», así como las necesidades de los socios tribales, estatales y locales.
El personal también tiene la tarea de administrar y desembolsar «niveles históricos de subvenciones y asistencia técnica» y trabajar con otras oficinas de la EPA «para incorporar la justicia ambiental en los programas, políticas y procesos de la agencia, según lo permita la ley». También se asegurarán de que los beneficiarios de los fondos de la EPA “cumplan con las leyes de derechos civiles aplicables”.
Se espera que el presidente nombre a un administrador adjunto para dirigir la nueva oficina en una fecha posterior. El Senado tendrá que confirmar a la persona antes de que pueda ocupar el puesto. La persona dependerá directamente del administrador de la EPA, Michael S. Regan.
Redistribución de la riqueza
En una entrevista con The Associated Press, Regan señaló que el nuevo programa “distribuirá miles de millones”.
“En el pasado, muchas de nuestras comunidades han tenido que competir por subvenciones muy pequeñas porque la cantidad de dinero de la EPA era extremadamente pequeña”, dijo. “Pasamos de decenas de miles de dólares a desarrollar y diseñar un programa que distribuirá miles de millones. Pero también nos aseguraremos de que este dinero llegue a quienes más lo necesitan y a quienes nunca han tenido un asiento en la mesa”.
En una declaración separada, Regan dijo que el presidente Joe Biden y la EPA “se han comprometido a lograr avances en la justicia ambiental, en los derechos civiles y garantizar que las comunidades desatendidas y sobrecargadas estén en la primera línea de nuestro trabajo”.
“Con el lanzamiento de una nueva oficina de programas nacionales, estamos incorporando la justicia ambiental y los derechos civiles en el ADN de la EPA y asegurando que las personas, que han luchado para que se aborden sus preocupaciones, atestigüen acciones para resolver los problemas que han enfrentado durante generaciones”, agregó.
La definición de «justicia ambiental» de la EPA es «el trato justo y la participación significativa de todas las personas, independientemente de su raza, color, origen nacional o ingresos, con respecto al desarrollo, la implementación y el cumplimiento de las leyes, reglamentos y políticas ambientales”.
Con información de Associated Press.
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