La administración Trump se enfrenta a la presión legal por su aparente fracaso en reanudar inmediatamente el procesamiento de los extranjeros ilegales, bajo el programa de Acción Diferida para los Llegados en la Infancia (DACA), después de que la Corte Suprema dictaminó el mes pasado que no anularía el programa de la era Obama.
El 18 de junio, la Corte Suprema dictaminó con un 5–4 en el caso; Departamento de Seguridad Nacional (DHS) v. Regentes de la Universidad de California, que la administración Trump no cumplió con la Ley de Procedimiento Administrativo (APA), la cual requería que el gobierno explicara completamente la razón de su decisión al tratar de rescindir el programa que protegía temporalmente, de ser deportados, a los jóvenes que inmigraron ilegalmente a Estados Unidos.
“La disputa ante el Tribunal no es si el DHS puede rescindir DACA. Todas las partes acuerdan que sí. La disputa se trata principalmente del procedimiento que la agencia siguió para hacerlo”, escribió John Roberts, el presidente del tribunal dirigiéndose al público.
«Por lo tanto, el recurso apropiado es volver a enviar al DHS, para que pueda considerar el problema nuevamente».
El presidente Donald Trump dijo el día después del fallo que la administración planeaba cumplir los requerimientos.
«Dentro de poco enviaremos documentos mejorados para cumplir adecuadamente con el fallo y la solicitud de ayer de la Corte Suprema», escribió en Twitter.
Al mismo tiempo, los funcionarios de la administración Trump han indicado que están preparando una nueva política para abordar la situación de DACA, que puede llevar un tiempo en desarrollar.
«El tribunal no dijo qué tan rápido la administración tenía que actuar en las solicitudes», dijo a La Gran Época Christopher Hajec, director de litigios del Instituto de Derecho de Reforma de Inmigración (IRLI). «Tiene sentido retrasar su concesión por un período corto mientras la administración decide si rescindir DACA y cómo hacerlo, ya que tiene plena autoridad para hacerlo».
Cuando Trump anunció en 2017 que terminaría con DACA, expresó su simpatía por los beneficiarios de DACA y dijo que su cancelación del programa obligaría a los legisladores demócratas a hacer un trato para permitir que los jóvenes se queden. No se llegó a tal acuerdo en el Congreso.
Durante una audiencia telefónica, el 24 de julio, presentada por los partidarios de DACA, el juez de la corte de distrito de EE.UU. Paul Grimm, designado por Obama, criticó a la administración por no cumplir aún con la orden del tribunal superior, incluida la actualización de páginas informativas en sitios web del gobierno, informa Politico.
«Eso es un problema», dijo el juez. “En cuanto a la inexactitud en el sitio web, eso tiene que cambiar y eso debería poder cambiar muy rápidamente… Crea un sentimiento y una creencia de que la agencia no tiene en cuenta las decisiones vinculantes de la apelación y la Corte Suprema».
El abogado del Departamento de Justicia de Estados Unidos, Stephen Pezzi, le dijo a Grimm que las nuevas solicitudes de DACA se están «reteniendo» y «colocando en un balde» mientras los funcionarios del DHS consideran qué hacer a continuación con el programa DACA.
«Es una distinción sin diferencia decir que esta solicitud no ha sido negada, ha sido recibida y ha sido puesta en un balde», dijo el juez.
La administración Trump está enviando mensajes contradictorios y «eso pone en duda a los solicitantes», dijo John Freedman, abogado de los beneficiarios de DACA.
“Eso pone en duda a los abogados de inmigración. Nadie sabe lo que está pasando», dijo Freedman. «Refuerza las impresiones de que… la administración, los acusados, no están cumpliendo con el estado de derecho».
En Conservative Review, el crítico de DACA, Daniel Horowitz, instó a la administración a tomar una línea más dura.
La Corte Suprema simplemente no tiene poder para decirle al presidente Donald Trump que «no puede rescindir una amnistía ejecutiva ilegal de su predecesor, de la misma manera que fue inicialmente promulgada».
«Si la separación de poderes significa algo y debemos preservar un país de controles y equilibrios, Trump no debe emitir estas visas».
Dan Stein, presidente de la Federación para la Reforma de la Inmigración Estadounidense (FAIR), dijo a La Gran Época que en la saga DACA, Trump está perdiendo la oportunidad de «educar al público sobre los excesos judiciales».
Stein dijo que «un tribunal no debería poder usar la Ley de Procedimiento Administrativo para enmascarar su intención real, y cada vez más, los jueces recurren a los reclamos de la APA para retrasar las decisiones con las que pueden no estar de acuerdo personalmente».
El mejor curso de acción para la administración sería «suspender nuevas solicitudes durante la emisión de una nueva regla que ponga fin al programa», dijo Stein.
“Y comenzar a terminar el estado de quienes lo tienen. No me pregunten por qué el pueblo estadounidense soporta un poder judicial que está tan fuera de lugar».
Apoye nuestro periodismo independiente donando un «café» para el equipo.
Video relacionado
Por qué los progresistas quieren más inmigración ilegal
Cómo puede usted ayudarnos a seguir informando
¿Por qué necesitamos su ayuda para financiar nuestra cobertura informativa en Estados Unidos y en todo el mundo? Porque somos una organización de noticias independiente, libre de la influencia de cualquier gobierno, corporación o partido político. Desde el día que empezamos, hemos enfrentado presiones para silenciarnos, sobre todo del Partido Comunista Chino. Pero no nos doblegaremos. Dependemos de su generosa contribución para seguir ejerciendo un periodismo tradicional. Juntos, podemos seguir difundiendo la verdad.
