Un chico de 16 años fue inyectado con una vacuna COVID-19 en Louisiana en un día escolar reciente a pesar de que sus padres no le dieron permiso.
El chico recibió una dosis de la vacuna de Pfizer el 20 de octubre en el instituto East Jefferson de Metairie, Louisiana, según un registro de vacunación contra COVID-19 revisado por The Epoch Times.
La firma de los padres es necesaria para cualquier persona de 17 años o menos que quiera la vacuna COVID-19, según el Departamento de Salud de Louisiana.
«Lo que tenemos es una madre a la que se le ha robado la patria potestad», dijo G. Shelly Maturin II, abogado que representa a la familia, a The Epoch Times.
Una enfermera de Ochsner Health administró la vacuna al niño en la escuela. Ochsner ha administrado las vacunas en sus instalaciones en varias escuelas desde que la Administración de Alimentos y Medicamentos autorizó la vacuna de Pfizer para niños de hasta 12 años.
La firma de Jennifer Ravain, la madre, se puede ver en un formulario de consentimiento de la vacuna, pero el abogado de la familia dijo que ella no lo firmó, ni su hijo falsificó su firma.
En un principio, el niño pensó que estaba firmando para vacunarse en una fecha posterior, y planeaba discutir con su madre si se iba a vacunar, dijo el abogado de la familia. Cuando se enteró de que las vacunas se ponían en ese momento, se sintió presionado y se puso una.
Ochsner reconoce que hubo un error y que el niño no recibió el consentimiento de sus padres.
«Aunque creemos firmemente en la vacunación de los adolescentes para mantenerlos a salvo del COVID-19, esto debe hacerse solo con el consentimiento de los padres. Nuestro equipo ha sido notificado de que un estudiante fue vacunado sin el debido consentimiento paterno en un evento de vacunación escolar el 20 de octubre de 2021. Tenemos procedimientos para asegurar que todas las políticas sean seguidas; sin embargo, en este caso, esto no ocurrió. Hemos tomado medidas inmediatas para revisar nuestras políticas de vacunación en las instalaciones y para garantizar que estas políticas se apliquen estrictamente en el futuro», dijo el Dr. Robert Hart, director médico de Ochsner, a The Epoch Times por correo electrónico.
«Como proveedor de atención sanitaria líder en esta comunidad, valoramos la confianza que los padres depositan en nosotros para cuidar de sus hijos, y estamos revisando nuestro programa de vacunación escolar para asegurarnos de que esto no vuelva a ocurrir. Estamos en comunicación con el padre que nos llamó la atención sobre esto. Lamentamos sinceramente y pedimos disculpas por la angustia que esto ha ocasionado», añadió.
Pero Maturin dijo que nadie se ha puesto en contacto con él o con la familia para tratar de resolver lo sucedido y que está preparando una demanda en nombre de la familia, que espera que su esfuerzo motive a los padres de todo el país y les haga tomar conciencia de lo que sucede en las escuelas.
«Este tipo de basura está ocurriendo en todo el país y tiene que parar, así que creo que hay que enviar un mensaje», dijo Maturin.
El nombre del chico se mantiene en secreto porque es menor de edad a petición de la familia.
La escuela secundaria East Jefferson no respondió a una solicitud de comentarios.
Las escuelas de la Parroquia de Jefferson dijeron que están al tanto de la situación y que los funcionarios de Ochsner aseguraron a los funcionarios del distrito que lo sucedido fue un incidente aislado.
«Creemos que una amplia participación en la vacunación reduce el riesgo de transmisión de COVID-19 y es esencial para mantener nuestras escuelas y la comunidad segura y saludable. Las Escuelas de la Parroquia de Jefferson se han asociado con múltiples colaboradores de la salud para proporcionar oportunidades de vacunación a los empleados y estudiantes elegibles desde que las vacunas estuvieron disponibles por primera vez. Nuestros procedimientos operativos estándar incluyen la obtención de un consentimiento por escrito de un padre o tutor legal antes de que un estudiante reciba la vacuna durante un evento realizado en una de nuestras escuelas», dijo el distrito.
«Seguiremos trabajando con Ochsner Health y nuestros otros socios sanitarios para garantizar que los eventos de vacunación realizados en nuestros campus sigan este proceso».
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