HUNTINGDON VALLEY, Pensilvania —Chloe Cole, de dieciocho años, autodenominada «exniña trans», se unió a un grupo de oradores el 18 de marzo para debatir la amenaza que la ideología de género representa para los niños en «Inocencia bajo asedio». El acto, organizado por el grupo activista conservador No Left Turn in Education, se celebró en la iglesia New Life Community Church.
Cole dijo a los asistentes: «Ni mis padres ni yo fuimos plenamente informados de la mayoría de los riesgos potenciales de someternos a estos tratamientos».
Cuando tenía 13 años, a Cole le recetaron bloqueadores de la pubertad y hormonas sexuales del sexo opuesto. A los 15 se sometió a una doble mastectomía.
Ahora lamenta profundamente el dolor y el sufrimiento que padeció, pero aún más, las consecuencias para su futura maternidad.
Tras el acto del sábado, Cole declaró a The Epoch Times: «Creo que lo más doloroso de haber pasado por la transición es haber perdido los pechos. Quizá no pueda tener hijos. Pero aunque pueda, nunca tendré esa experiencia de alimentar a mis hijos a través de mi propio cuerpo».
La demanda espera aumentar la concienciación
El mes pasado, Cole presentó una demanda contra su cirujano, su especialista en género, el hospital donde fue operada y Kaiser Permanente, su proveedor de atención sanitaria, por empujarla a la mutilación médica entre los 13 y los 17 años.
«Espero que con esta demanda concienciemos sobre este problema, pero también disuadamos a otros médicos y hospitales de hacer esto a los niños». Demanda «para crear un precedente que permita a otras personas que se encuentran en mi situación obtener también justicia para sí mismas», afirmó.
La adolescente espera que hablar conduzca a «un mejor modelo de atención… para los pacientes con disforia de género».
Cole dijo que ha recibido varias amenazas desde que empezó a hablar: «Antes del mitin que organicé la semana pasada, había activistas y miembros de Antifa amenazándome con violarme y agredirme sexualmente y con rociarme los ojos con gas pimienta».
Las amenazas obligan a cambiar de lugar
El acto del sábado recibió amenazas el día antes de su celebración. La doctora Elana Fishbein, fundadora y presidenta de No Left Turn in Education, declaró a The Epoch Times que el grupo tuvo que cambiar el lugar del acto porque el anterior recibió amenazas.
Fishbein dijo que sabía a lo que se enfrentaba cuando lanzó No Left Turn in Education en agosto de 2020. El grupo está decidido a luchar contra la ideología de género. «Estamos muy decididos a ponernos de pie y proteger a nuestros propios hijos, proteger a nuestras comunidades y proteger a nuestra nación», dijo.
Fishbein dijo que su objetivo es ayudar a más gente a entender «lo grave que es la condición en la que estamos hoy». Cree que las escuelas están «hiper adoctrinando a nuestros hijos sexualizándolos».
Fishbein elogió a Cole por su valentía: «Tuvo una doble mastectomía. Un año después, se dio cuenta de que había sido un error. Y revirtió la transición. Ahora tiene 18 años y va por todo el país».
Mamá activista: Cole debería «hablar en todas las universidades»
La historia de Cole atrajo toda la atención de varias docenas de asistentes.
Fenicia Redman, que ha acudido a los tribunales para que se retiren los libros de contenido sexual explícito del colegio de su hijo, declaró a The Epoch Times: «Me conmoví hasta las lágrimas cuando Chloe compartió [que] le habían quitado los pechos y que nunca podría amamantar a sus hijos como madre. Tiene 18 años. Yo soy una madre que ya tiene un hijo de 18 años. Tengo el corazón roto por ella. Ha perdido la posibilidad de alimentar a sus hijos en el futuro».
«Soy una madre abrumada por el poder de esta joven adolescente para hablar sobre un error que los médicos cometieron con ella. Creo que esta joven tiene que hablar en todas las preparatorias de Estados Unidos», dijo Redman.
Enfermera forense: «Esto no debería haber ocurrido nunca»
Tami Hartlaub, enfermera forense jubilada del condado de York (Pensilvania), habló sobre los problemas médicos relacionados con la transición de los niños. Habló sobre cómo funciona el cerebro humano, señalando que el lóbulo frontal, que controla el juicio, aún no está maduro en niños pequeños y adolescentes. No tienen la madurez necesaria para tomar decisiones que cambian la vida, como la cirugía de reasignación de sexo, dijo Hartlaub. Los padres deben defender a sus hijos, subrayó, en lugar de permitir que la comunidad médica y psiquiátrica les dicte que deben hacer la transición.
Hartlaub tiene más de 30 años de experiencia en el campo de la enfermería, realizando exámenes forenses a adultos y niños víctimas de agresiones sexuales y físicas.
Hartlaub calificó la historia de Cole de «desgarradora». Dijo a The Epoch Times: «Eso nunca debería haber ocurrido».
«Es muy obvio», dijo Hartlaub, que la adolescente sufrió un «daño extremo» a manos de médicos a los que respetaba y en los que confiaba para poder proporcionarle los mejores cuidados.
Hartlaub sugirió a los padres que se impliquen más con los consejos escolares. «No pueden permitirse retroceder» ante la presión de las escuelas que impulsan la agenda liberal, dijo.
«Una batalla del bien contra el mal»
La asistente jurídica Peggy Welsh acudió al acto porque su hermana le ofreció una entrada extra. Dijo que le pareció «muy formativo» y «muy bien hecho».
«Cubrieron prácticamente todos los ángulos de la cuestión. Empezando por una visión general del problema, pasando por el aspecto médico, el psicológico y el farmacéutico, hasta llegar al personal. El testimonio personal es poderoso», dijo Walsh.
Welsh no suele asistir a este tipo de actos. «Tengo un trabajo muy ocupado. He criado a mis hijos. No creo que sea un tema que me afecte. Pero soy cristiano. Y lo veo como una batalla del bien contra el mal en este momento».
Welsh cree que es difícil ayudar, «porque si hablas, te tachan de lleno de odio, intolerante fóbico, etcétera». Sin embargo, «diré la verdad con amor y diré la verdad con compasión», afirmó.
El problema, dijo Welsh, es «la intervención farmacéutica, culpar a los padres y asustar a los padres». Los padres deben armarse de valor, afirmó: «Los padres deben recibir información y no tener miedo. La raíz de todo ahora mismo es el miedo. Estamos inundados de miedo».
Locutora de radio: «Muy agobiada»
Kim Kennedy es una activista provida y presentadora de radio. Dijo que apreciaba la presentación por exponer la mutilación de partes del cuerpo de los niños y los efectos secundarios de los medicamentos que se les recetan.
«Estoy muy agobiada. Estoy muy, muy preocupada por algunas de las filosofías e ideas que se están imponiendo a niños muy pequeños… Creo que tiene que haber mucho más debate nacional».
«Acabo de aprender que no es tan sencillo como algunos han dicho en los medios de comunicación. Es mucho más complejo; es mucho más profundo», dijo Kennedy. «A todos los efectos, estos jóvenes son conejillos de indias en un experimento que tendrá efectos increíbles en sus vidas».
«Eso no es algo que queramos sobre nuestra conciencia. No queremos la sangre de estos jóvenes en nuestras manos».
No Left Turn in Education tiene delegaciones en 27 estados de todo el país.
Charlie Beatty, responsable de la división de Pensilvania, se mostró satisfecho con la asistencia a la presentación. Y añadió: «Vamos a seguir avanzando y educando a los padres sobre lo que ocurre entre bastidores en el sistema educativo actual».
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