Todos los demás temas palidecen en comparación con el tema de la prevención de la Tercera Guerra Mundial, dice el expresidente Donald Trump.
“Nunca hemos estado más cerca de la Tercera Guerra Mundial de lo que estamos hoy con Joe Biden”, declaró Trump en un video publicado el 16 de marzo. “Un conflicto global entre potencias con armas nucleares significaría muerte y destrucción a una escala sin igual en la historia humana. Sería un Armagedón nuclear. Nada es más importante que evitar esa pesadilla”.
Para evitar un conflicto tan devastador, se necesita “un nuevo liderazgo”, dijo Trump, junto con “paz sin demora”.
En febrero, en el primer aniversario del cruce de las fuerzas rusas por la frontera con Ucrania, el presidente Joe Biden aprobó USD 2000 millones adicionales en ayuda militar para Ucrania.
Los recuentos de la ayuda humanitaria, militar y financiera de EE.UU. brindada a Ucrania varían, pero el Consejo de Relaciones Exteriores lo fijó en USD 77,000 millones.
“Cada día que continúa esta batalla subsidiaria en Ucrania, nos arriesgamos a una guerra global”, dijo Trump en su video. “Debemos tener absolutamente claro que nuestro objetivo es tener inmediatamente un cese total de hostilidades”.
El nuevo video de Trump, filmado en Mar-A-Lago, en Palm Beach, Florida, amplía un tema que trató durante un discurso a principios de marzo en la Conferencia de Acción Política Conservadora, en las afueras de Washington.
Declaró: «Soy el único candidato que puede hacer esta promesa: Puedo evitar, y muy fácilmente, la Tercera Guerra Mundial”.
Afirma que sabe qué decirles a los líderes de Ucrania y Rusia para detener el conflicto.
Durante su presidencia de 2017 a 2021, Trump promocionó reuniones positivas tanto con el presidente ruso Vladimir Putin como con el presidente ucraniano Volodímir Zelenski.
Trump, quien dejó la Casa Blanca después de que Biden fuera declarado ganador de las elecciones de 2020, ahora está haciendo campaña para convertirse en el candidato presidencial del Partido Republicano para la contienda de 2024.
Disputa sobre prioridades
A principios de esta semana, varios aspirantes presidenciales republicanos también declararon públicamente que no están de acuerdo con hacer de Ucrania una prioridad en un momento en que Estados Unidos enfrenta significativas amenazas de China.
Otros también han dicho que Estados Unidos no debería entrometerse en los asuntos de Rusia y Ucrania, que son complejos, y que Estados Unidos debe dejar de enviar ayuda a Ucrania porque Estados Unidos ya está sumido en demasiadas deudas.
Los partidarios de ayudar a Ucrania dicen que Estados Unidos tiene la obligación moral y estratégica de ayudar a una democracia incipiente a defenderse de la agresión rusa injustificada. Putin ha afirmado que necesitaba tomar medidas contra el creciente nazismo y el genocidio contra los rusos étnicos en Ucrania.
El Departamento de Defensa de Estados Unidos dice que Estados Unidos está protegiendo el derecho de Ucrania a ser una nación soberana. Biden se ha comprometido a continuar con la ayuda durante el tiempo que sea necesario. Las preguntas se arremolinaron en torno a los motivos de la política exterior de Biden considerando los tratos comerciales anteriores en China y Ucrania que involucraron a su hijo, Hunter Biden.
La visita sorpresa de Biden a Ucrania en febrero generó críticas sobre las prioridades de su administración. Viajó allí el 20 de febrero en lugar de visitar East Palestine, Ohio, una pequeña comunidad que sufrió el descarrilamiento de un tren y un desastre ambiental tóxico desde principios de febrero.
Trump visitó la ciudad el 22 de febrero, mientras que Biden aún no ha viajado allí.
Trump culpa al «establishment neoconservador”
Para forjar la paz mundial, Trump dijo que es necesario desmantelar a “toda la clase dirigente neoconservadora globalista”, refiriéndose a los conservadores de tendencia liberal que abogan por el uso de medios militares para promover la democracia en países extranjeros.
Esta facción “nos está arrastrando perpetuamente a guerras interminables, pretendiendo luchar por la libertad y la democracia en el extranjero, mientras nos convierten en un país del tercer mundo y una dictadura del tercer mundo aquí mismo, en casa”, dijo Trump.
Pidió una revisión completa al Departamento de Estado de EE.UU., a la burocracia de defensa, a los servicios de inteligencia, “y a todo lo demás”. Trump quiere librar al gobierno del llamado “Estado Profundo”, burócratas atrincherados que intentan perpetuarse en sus trabajos.
Fuerzas antiestadounidenses en acción
Trump dijo que un componente clave para garantizar la paz mundial sería terminar de “reevaluar” la misión de la OTAN.
“Nuestro establishment de política exterior sigue tratando de llevar al mundo al conflicto, con una Rusia que tiene armas nucleares, basándose en la mentira de que Rusia representa nuestra mayor amenaza”, dijo Trump. “Pero la mayor amenaza para la civilización occidental hoy en día no es Rusia. Probablemente, más que cualquier otra cosa, somos nosotros mismos y algunas de las personas horribles que odian a Estados Unidos y que nos representan”.
En lugar de abordar los estragos de los globalistas en casa, los estadounidenses se distraen con «monstruos y fantasmas en el extranjero», dijo Trump.
Culpó a los marxistas por tratar de transformar a Estados Unidos en “una nación sin Dios que adora en el altar de la raza, el género y el medio ambiente”.
Los globalistas han hecho que la nación sea “totalmente dependiente de China y de otros países extranjeros que básicamente nos odian”, dijo Trump.
“Estas fuerzas le están causando más daño a Estados Unidos de lo que Rusia y China jamás podrían haber soñado”, dijo. “Desalojar al establishment enfermo y corrupto es la tarea monumental del próximo presidente. Y yo soy el único que puede hacerlo. Soy el único que puede hacer el trabajo”.
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