Algunos aficionados que asistieron a dos partidos recientes en la ciudad de Nueva York ayudaron a probar un nuevo pase sanitario digital que puede demostrar que una persona ha resultado negativo recientemente a la prueba de COVID-19 o se ha vacunado contra el virus que causa la enfermedad.
Los aficionados que asistieron a un partido de los Brooklyn Nets en el Barclays Center el 27 de febrero y a un partido de los New York Rangers en el Madison Square Garden el 2 de marzo ayudaron a probar el Excelsior Pass, desarrollado por el Estado junto con IBM.
Los usuarios del pase pueden imprimirlo o utilizar sus teléfonos inteligentes para mostrar una copia cuando entran en un estadio.
Los resultados de las pruebas se están utilizando para mejorar la calidad del pase, dijeron los funcionarios al anunciar recientemente el programa piloto.
«A medida que empezamos a reabrir las llaves en diferentes sectores de nuestra economía, estamos poniendo en marcha directrices para garantizar que las personas que asistan a eventos que impliquen grandes reuniones hayan dado negativo en las pruebas de COVID o se hayan vacunado para evitar un brote del virus. El Excelsior Pass desempeñará un papel fundamental a la hora de hacer llegar la información a los estadios y lugares de reunión de forma segura y ágil, lo que nos permitirá acelerar la reapertura de estos negocios y acercarnos un poco más a la nueva normalidad», declaró el mes pasado el gobernador demócrata Andrew Cuomo en un comunicado.
«Esta solución puede proporcionar a Nueva York, y a otros estados, un método sencillo, seguro y voluntario para comprobar el resultado negativo de la prueba COVID-19 o la certificación de la vacunación. IBM se enorgullece de apoyar al Estado de Nueva York en sus esfuerzos por aplicar tecnologías innovadoras para ayudar a los residentes y las comunidades a responder al COVID-19», añadió Steve LaFleche, director general de IBM Public and Federal Market.
Todos los empleados y los espectadores de los grandes estadios y arenas del estado de Nueva York deben dar negativo en las pruebas de COVID-19 en las 72 horas antes del evento y presentar una prueba del test. En la prueba piloto, un subconjunto de participantes predeterminados pudo utilizar el pase para confirmar el test negativo.
En la actualidad no se exige a los ciudadanos que demuestren que están vacunados, pero el candidato a la alcaldía de Nueva York, Andrew Yang, ha propuesto una forma sencilla de demostrar que se han vacunado, «como un código de barras que puedan descargar en su teléfono». En todo el mundo se están llevando a cabo iniciativas similares, como el «pase verde digital» que está desarrollando la Comisión de la Unión Europea.
Estas iniciativas han suscitado reacciones negativas.
Albert Fox Cahn, director ejecutivo del Proyecto de Supervisión de la Tecnología de Vigilancia, dijo durante una reciente aparición en la CBS que ya existe una tarjeta física que la gente lleva consigo para demostrar que se ha vacunado contra una determinada enfermedad, lo cual tiene sentido, pero la nueva tecnología es diferente.
Las tarjetas sanitarias digitales «no se utilizarían cuando se vuela a nivel internacional, sino cuando se va al trabajo, cuando se va a la escuela, incluso [cuando] se va a la tienda de comestibles local», dijo. «Y desde mi punto de vista como abogado de derechos civiles, como experto en tecnología, esto es realmente preocupante, tanto por esas repercusiones sobre la privacidad y la equidad, como por el hecho de que, para toda la vigilancia que se nos vende ahora, no hay pruebas de que realmente vaya a funcionar».
Prácticamente todas las compañías aéreas del mundo exigen una prueba de COVID-19 negativa y un director general de una compañía aérea dijo en enero que creía que los certificados de vacunación se convertirían en la «nueva norma«.
El Dr. Michael Ryan, de la Organización Mundial de la Salud de las Naciones Unidas, dijo en una reciente conferencia de prensa que «en la actualidad no se aconseja el uso de la certificación de la vacunación como requisito para viajar porque, sencillamente, la vacunación no está suficientemente disponible en todo el mundo y no está disponible, ciertamente, sobre una base equitativa».
El presidente Joe Biden ordenó en enero a los altos funcionarios que, en coordinación con las organizaciones internacionales pertinentes, evaluaran la viabilidad de vincular la vacunación contra el COVID-19 a los Certificados Internacionales de Vacunación o Profilaxis y producir versiones electrónicas de los certificados. En la actualidad, las personas que se vacunan contra el virus del PCCh (Partido Comunista Chino), causante del COVID-19, reciben una tarjeta de papel.
Un grupo de aerolíneas y grupos de viajeros y sindicales escribieron esta semana al gobierno de Biden, instándole a crear una tarjeta sanitaria digital que permita a los viajeros mostrar una prueba de vacunación.
La secretaria de prensa de la Casa Blanca, Jen Psaki, dijo a los periodistas esta semana que la administración cree que las empresas privadas desarrollarían dicho pase.
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