La gobernadora de Alabama, Kay Ivey, se unió a una lista cada vez mayor de estados liderados por el Partido Republicano y puso fin al aumento federal de desempleo de 300 dólares relacionado con la pandemia en medio de preocupaciones de que los beneficios están provocando una escasez de personas en busca de trabajo.
El Departamento de Trabajo publicó la semana pasada un informe que decía que solo se crearon 266,000 nuevos puestos de trabajo en abril, lo cual estaba muy por debajo de las expectativas de muchos economistas.
Ivey, una republicana, citó un aumento en las ofertas de trabajo junto con las quejas de las empresas diciendo que no pueden encontrar trabajadores para contratar. La gobernadora señaló al aumento de las prestaciones por desempleo, el cual fue aprobado el pasado mes de marzo en el marco de la Ley CARES antes de su prórroga, como un factor que contribuye a la escasez de mano de obra.
“A medida que la economía de Alabama continúa recuperándose, más y más dueños de negocios y empleadores nos dicen que es cada vez más difícil encontrar trabajadores para cubrir los puestos de trabajo disponibles, a pesar de que las vacantes son abundantes”, dijo Ivey en un comunicado el lunes.
Según la oficina de Ivey, ella está poniendo fin a la Compensación por desempleo pandémico federal que proporciona 300 dólares por semana, la Asistencia por desempleo pandémico que brinda beneficios a las personas que normalmente no califican para el desempleo, la Compensación por desempleo de emergencia pandémica que brinda una extensión de beneficios luego de que se agoten los beneficios regulares y la Compensación por desempleo para asalariados mixtos que proporciona 100 dólares más para las personas con «ingresos mixtos».
Esos programas terminarán a partir del 19 de junio.
Ivey dijo que Alabama tiene una tasa de desempleo del 3.8 % y dijo que, «hay más trabajos disponibles ahora que antes de la pandemia».
«Hay trabajos», comentó la gobernadora, y agregó: “Nosotros hemos anunciado la fecha de finalización de nuestro estado de emergencia, no hay cierres de la industria y las guarderías están funcionando sin restricciones. Las vacunas están disponibles para todos los adultos. Alabama está notificando al gobierno federal con 30 días de anticipación que es momento de regresar al trabajo».
Arkansas, Mississippi, Montana y Carolina del Sur planean también detener el programa federal de beneficios por desempleo de 300 dólares. Algunos grupos progresistas han criticado las medidas de los estados para poner fin al programa, diciendo que es infundado y es cruel.
El lunes, el presidente Joe Biden afirmó que los beneficios por desempleo no son un factor que influye en por qué la gente no está buscando trabajo.
“La fila se debe a las generosas prestaciones por desempleo, que es un factor importante en la escasez de mano de obra. Los estadounidenses quieren trabajar. Los estadounidenses quieren trabajar”, dijo Biden en la Casa Blanca, y agregó: «Creo que las personas que afirman que los estadounidenses no trabajarán incluso si ellos encuentran una buena y justa oportunidad subestiman al pueblo estadounidense».
Sin embargo, Biden dijo que cualquier persona que obtenga beneficios de desempleo y se le ofrezca un «trabajo adecuado» debe aceptarlo.
Mientras tanto, el Departamento de Trabajo de Alabama anunció que se volverá a implementar una disposición de búsqueda laboral para las personas que reciban beneficios por desempleo.
«Hemos publicado más anuncios de empleo ahora que en febrero o marzo de 2020», escribió el lunes el secretario de Trabajo del Departamento de Trabajo de Alabama, Fitzgerald Washington, en un comunicado.
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