El candidato peronista a la presidencia de Argentina, Alberto Fernández, logró este domingo el 47,42 % de los votos en las elecciones generales, con el 77,75 % de las mesas computadas, lo que supondría una victoria en primera vuelta, según los datos del escrutinio provisional.
Por su parte, el actual presidente, Mauricio Macri, cosechó el 41,15 %, un resultado mejor del anticipado por las encuestas.
De mantenerse esta tendencia, no será necesaria una segunda vuelta prevista para el 24 de noviembre en el caso de que ningún candidato alcance el 45% de los votos o mas del 40% y diez puntos de ventaja sobre el segundo.
Según el escrutinio provisional, por detrás quedaron las propuestas de Roberto Lavagna, con el 6,14 %, seguido de lejos por los otros tres postulantes: Nicolás del Caño (Frente de Izquierda y de los Trabajadores), con el 2,07 %; Juan José Gómez Centurión (Frente Nos), con el 1,72 % y José Luis Espert (Unite por la Libertad y la Dignidad), que obtuvo el 1,47 %.
Fernández, que lleva como candidata a la Vicepresidencia a la exmandataria Cristina Fernández (2007-2015), llegaba como favorito a estas elecciones presidenciales, las novenas de la actual democracia argentina, después de haber aventajado en 16 puntos en las primarias de agosto pasado a Macri y su segundo, el peronista disidente Miguel Ángel Pichetto, que han sufrido el desgaste de la larga crisis económica que arrastra el país.
El escrutinio provisional de las elecciones de hoy, que tuvieron un 80,81 % de participación, es responsabilidad del Ministerio del Interior y, aunque no tiene validez legal, tiene valor informativo sobre el resultado de la elección el mismo día de los comicios.
El recuento definitivo, que hará la Justicia electoral a partir del martes próximo, es el que tiene peso legal para confirmar los resultados.
El oficialismo retiene la capital pero pierde la mayor provincia
El frente oficialista Juntos por el Cambio de Argentina retuvo en los comicios de este domingo el Gobierno capitalino, pero perdió el de la provincia de Buenos Aires, el mayor distrito electoral del país, donde se impuso el peronista Frente de Todos por amplia ventaja, según los primeros datos oficiales.
Contabilizadas el 87,4 % de las mesas de votación, el alcalde capitalino, Horacio Rodríguez Larreta, que competía por la reelección, obtenía el 55,5 %, muy por delante del 35,4 % cosechado por Matías Lammens, presidente del club de fútbol San Lorenzo de Almagro y candidato a jefe de Gobierno por el Frente de Todos.
«Gracias por este cariño. Hoy hicimos historia en la ciudad de Buenos Aires. Hoy hicimos una elección histórica», afirmó Rodríguez Larreta, que sucedió al presidente Mauricio Macri como jefe de Gobierno de la capital en diciembre de 2015.
Rodríguez Larreta agradeció a los vecinos de la ciudad «que valoran esta transformación» llevada adelante en la capital del país por el oficialismo.
Ante militantes reunidos en el búnker de Juntos por el Cambio en Buenos Aires, el alcalde agradeció también a Macri y a la actual gobernadora de la provincia de Buenos Aires y ex vice jefa de Gobierno de la capital María Eugenia Vidal, quienes, aseguró, «dejaron marcada su huella, con su esfuerzo y su trabajo, en la transformación histórica de la ciudad».
En tanto, el oficialismo perdió el Gobierno de la provincia de Buenos Aires, donde Vidal buscaba la reelección, con el candidato del Frente de Todos, Axel Kicillof, como principal rival.
Contabilizadas el 67,57 % de las mesas, Kicillof, ministro de Economía argentino durante el Gobierno de Cristina Fernández (2007-2015), obtenía el 51,90 %, mientras que Vidal cosechaba el 38,80 % de los sufragios.
La provincia de Buenos Aires, la más poblada de Argentina, ha sido tradicionalmente un bastión del peronismo, hasta que a finales de 2015 el macrismo le arrebató el Ejecutivo en una elección considerada histórica.
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