El lunes por la noche, varios alborotadores quemaron edificios y vehículos en Kenosha. El despliegue de varios efectivos de la Guardia Nacional no logró mantener la paz.
Cientos de personas se congregaron en la ciudad. Estaban molestas por el tiroteo policial del 23 de agosto contra Jacob Blake, ignoraron el toque de queda y causaron una destrucción generalizada, incluso cuando el tío de Blake instó a los manifestantes a no destruir sus propias ciudades. Los destrozos continuaron a pesar de que aparecieron nuevas imágenes de video que mostraban a Blake luchando con los agentes de policía antes de que le dispararan.
Varios videos y fotos muestran turbas incendiando negocios, incluyendo una tienda de muebles, y entrando en otros, entre ellos una tienda de Boost Mobile.
A los guardias armados de una gasolinera les dijeron «¡Ustedes no están con nosotros!» cuando impidieron que los alborotadores saquearan el establecimiento.
Jorge Ventura, un reportero del Daily Caller en el lugar de los hechos, describió la escena como «un caos absoluto».
Los funcionarios del condado habían anunciado un toque de queda de emergencia horas antes, pero pocos obedecieron la orden.
El Departamento de Policía de Kenosha dijo poco después de que el toque de queda comenzara que múltiples carreteras estaban bloqueadas. «QUÉDESE EN CASA, EVITE EL ÁREA», dijo la policía en una alerta en las redes sociales.
Agentes de policía y ayudantes del sheriff del Condado de Kenosha se enfrentaron a los manifestantes cerca de la Corte del Condado de Kenosha, que los alborotadores dañaron la noche anterior. Se utilizaron gases lacrimógenos y otras municiones antidisturbios.
Los alborotadores lanzaron botellas y petardos contra los agentes del orden público.
Blake, de 29 años, recibió múltiples disparos el domingo por la tarde. Las imágenes de video capturadas por un transeúnte lo muestran caminando hacia una furgoneta y entrando en ella mientras los agentes de policía con las armas desenfundadas le disparan.
Otro video grabado en la escena, que se dio a conocer el lunes, muestra a Blake peleando con los policías junto al vehículo, resistiéndose al arresto. Después se levanta y camina para tratar de agarrar algo dentro del automóvil.
De acuerdo con una demanda criminal obtenida por The Epoch Times, Blake fue acusado el mes pasado por allanamiento, asalto sexual en tercer grado y conducta escandalosa. Blake está acusado de haber tenido relaciones sexuales con una mujer el 3 de mayo en Kenosha «sin el consentimiento de dicha persona», según la denuncia.
La mujer dijo que Blake era su exnovio y que tienen tres hijos en común. Dijo que Blake la despertó alrededor de las 6 a.m. y que la penetró antes de robar su vehículo y su tarjeta de débito. Cuando revisó su cuenta bancaria mientras esperaba la llegada de la policía, vio que Blake había retirado 1000 dólares a través del cajero automático.
Blake fue trasladado de urgencia al hospital después de recibir los disparos. Estaba en estado grave, según las autoridades.
Los policías involucrados, que estaban respondiendo a un incidente doméstico, fueron puestos bajo licencia. El Departamento de Justicia de Wisconsin está investigando el tiroteo.
Algunos funcionarios instaron al público a esperar a que la investigación terminara antes de sacar conclusiones sobre lo sucedido, mientras que otros argumentaron que estaba claro que Blake no debería haber recibido un disparo.
Blake «recibió múltiples disparos por la espalda a plena luz del día», dijo el gobernador Tony Evers (D) en una declaración emitida horas después del tiroteo.
«Aunque todavía no tenemos todos los detalles, lo que sabemos con certeza es que no es el primer hombre o persona negra que ha sido disparado o herido o asesinado sin piedad a manos de individuos de las fuerzas de seguridad en nuestro estado o nuestro país», añadió.
«Estamos con todos aquellos que han exigido y siguen exigiendo justicia, equidad y rendición de cuentas por las vidas de los negros en nuestro país, como las de George Floyd, Breonna Taylor, Tony Robinson, Dontre Hamilton, Ernest Lacy y Sylville Smith. Y nos oponemos al uso excesivo de la fuerza y a la escalada inmediata cuando nos enfrentamos a los negros de Wisconsin».
Pete Deates, presidente de la Asociación Profesional de la Policía de Kenosha, un sindicato de la policía, denunció la declaración de Evers.
«Hasta que la investigación se complete, les pedimos que no prejuzguen el incidente y por favor dejen que el proceso se lleve a cabo. La declaración del gobernador Evers sobre el incidente fue totalmente irresponsable y no reflejó a los miembros trabajadores de la comunidad policial, por no mencionar a los ciudadanos de la ciudad de Kenosha», dijo en una declaración enviada a los medios de comunicación.
«Como siempre, el video que circula actualmente no capta todos los entresijos de un incidente muy dinámico. Les pedimos que se abstengan de emitir juicios hasta que se conozcan y se publiquen todos los hechos».
El máximo responsable del Condado de Kenosha, Jim Kreuser, señaló que el condado declaró recientemente al racismo como una crisis de salud pública y se comprometió a reunirse con los líderes de la comunidad para averiguar cómo responder al tiroteo.
«Aún no conocemos muchos de los detalles de este tiroteo en el que participaron varios policías, pero sí sabemos que es el último de una serie de acontecimientos devastadores en nuestra nación que han tocado los nervios y avivado los temores sobre nuestras relaciones con las fuerzas de seguridad, y entre nosotros», dijo.
Justin Blake, tío de Blake, dijo a un reportero local que viajó a Kenosha después de visitar a su sobrino. Blake permanece en un hospital de Milwaukee.
Blake dijo que la familia aprecia el apoyo que la gente ha mostrado pero les instó a «protestar pacíficamente, no ser destructivos».
«Queremos justicia, y queremos una justicia adecuada», dijo.
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