El alguacil del condado de Fulton, Patrick Labat, proporcionó más detalles sobre el comportamiento del expresidente Donald Trump cuando se entregó en la cárcel del Condado de Fulton el mes pasado.
“Salió, estaba muy estoico, realmente se mantuvo sólido ante lo que estábamos haciendo, lo que planeamos, y así tomamos su ficha policial, tomamos sus huellas dactilares, como lo haríamos con cualquier otra persona», dijo el Sr. Labat a CNN a fines de la semana pasada.
Durante la entrevista, dijo que ver la entrega del expresidente en la cárcel semanas atrás le disgustó. Eso fue, según él, porque no quería ver a alguien de la talla del expresidente teniendo que pasar por el proceso de fichaje en la cárcel, que incluía la toma de la foto de ficha policial del presidente Trump.
“Fue desgarrador ver a alguien con ese nivel, y que representa a nuestro país de esa manera, tener que pasar por esto”, dijo Labat el 8 de septiembre.
Además del presidente Trump, otros 18 coacusados se entregaron en un extenso caso presentado por la fiscal de distrito del Condado de Fulton, Fani Willis, en virtud del estatuto de extorsión de Georgia. Todos se han declarado inocentes, mientras que algunos han intentado llevar sus casos a un tribunal federal.
La oficina del fiscal de distrito alegó que el presidente Trump y personas como el exalcalde Rudy Giuliani, el exjefe de gabinete de la Casa Blanca Mark Meadows, la destacada abogada Sidney Powell, la exabogada de campaña Jenna Ellis y más conspiraron para anular las elecciones de 2020.
Otros acusados también han pedido ser juzgados por separado o en grupos pequeños, y el presidente Trump, uno de los primeros favoritos en las primarias presidenciales republicanas de 2024, ha pedido ser juzgado aparte de cualquiera que presente una demanda de juicio rápido.
Varios días antes de los comentarios del Sr. Labat, el juez del Tribunal Superior del condado de Fulton, Scott McAfee, dijo que el juicio de la Sra. Powell y el abogado Kenneth Chesebro comenzaría el 23 de octubre. Sin embargo, parecía escéptico ante los argumentos de los fiscales de que los 19 acusados podrían ser juzgados juntos tan pronto.
“Parece un poco irreal pensar que podemos juzgar a los 19 en 40 días. Esa es mi reacción inicial”, dijo, respondiendo a las afirmaciones de los fiscales.
Al anunciar la amplia imputación de 41 cargos el mes pasado, Willis dijo que quiere juzgar a los 19 acusados juntos. Pero las maniobras legales que han comenzado en las tres semanas desde que se emitió la acusación subraya la complejidad logística inherente a una acusación tan extensa con tantos acusados.
Pero McAfee expresó su preocupación sobre lo que esa lucha de algunos acusados para que sus casos se trasladen a un tribunal federal podría significar para el resto del caso, diciendo que las apelaciones y las decisiones finales sobre ese tema podrían llevar meses.
El 8 de septiembre, un juez denegó el intento de Meadows de trasladar su caso de Georgia a un tribunal federal, el juez alegó que la participación de Meadows en los supuestos esfuerzos de 2020 en Georgia no era parte de sus deberes oficiales como funcionario de la Casa Blanca.
El juez de distrito estadounidense Steve C. Jones, en su fallo (pdf), determinó que el Sr. Meadows «no ha demostrado que las acciones que desencadenaron el procesamiento estatal estuvieran relacionadas con su cargo federal», y agregó que su «supuesta asociación con actividades postelectorales «No estaba relacionada con su papel como jefe de Gabinete de la Casa Blanca ni con su autoridad en el poder ejecutivo».
«A la luz de las pruebas del Estado de que Meadows llevó a cabo acciones en nombre de la campaña durante el período de tiempo de la supuesta conspiración, Meadows estaba obligado a presentar pruebas competentes de su argumento fáctico de que sus acciones relacionadas con los desafíos al resultado de las elecciones presidenciales de Georgia estaban dentro de su papel como jefe de Gabinete. Sus esfuerzos se han quedado cortos», escribió también el juez.
Casi al mismo tiempo, un juez publicó el informe completo del gran jurado del condado de Fulton, que en febrero recomendó que el senador Lindsey Graham (R-S.C.), el teniente general retirado Michael Flynn, la exsenadora Kelly Loeffler (R-Ga.) y el exsenador David Perdue (R-Ga.), entre otros, fueran acusados en relación con el caso. La Sra. Willis optó por no presentar cargos.
En respuesta, Graham, exjefe del Comité Judicial del Senado, negó haber actuado mal y dijo que una llamada telefónica (que tuvo con el secretario de Estado de Georgia, Brad Raffensperger, después de las elecciones de 2020) fue apropiada y estaba dentro de sus deberes como senador a cargo de un comité.
«Nunca debería ser un delito que un funcionario federal electo, particularmente el presidente del Comité Judicial del Senado, que tendrá que votar para certificar una elección presidencial, cuestione y garantice la integridad de esa elección», les dijo a los periodistas el 8 de septiembre.
La señora Loeffler escribió en X, antes Twitter, que simplemente hablaba en nombre de las personas que sentían que las elecciones de 2020 se llevaron a cabo de manera injusta. “Intentar encarcelar al principal oponente político de su partido antes de 2024 es una interferencia electoral. Hablar en defensa de la integridad electoral no lo es”, escribió la semana pasada.
Con información de AP.
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