AMC Theatres ha cancelado las proyecciones de un documental en el que se detallan los efectos secundarios negativos y los riesgos de las denominadas cirugías de «afirmación del género», a raíz de la reacción negativa de una organización dirigida por transexuales.
El documental de 90 minutos, titulado «No Way Back: The Reality of Gender-Affirming Care», se estrenará en AMC de todo Estados Unidos a partir del 21 de junio, según un comunicado de prensa de Panacol Productions y Deplorable Films, las empresas distribuidoras que están detrás del documental.
Presenta entrevistas con cinco jóvenes que hablan de los tratamientos médicos y la atención que recibieron por disforia de género, y de cómo «posteriormente se dieron cuenta de que les habían dado un tratamiento equivocado», según el comunicado de prensa.
Además, el documental cuenta con las aportaciones de 12 expertos en pediatría, salud mental, sociología y endocrinología —entre ellos un profesor de Oxford— que, en conjunto, llevan «décadas de práctica clínica» examinando los pros y los contras de las prácticas actuales en torno a la transición médica de adolescentes y adultos jóvenes.
El comunicado de prensa afirma que el documental también ha sido producido por «demócratas californianos de toda la vida y activistas LGBT» y adopta una perspectiva «no religiosa, no política y no ideológica sobre el tema de las prácticas médicas de afirmación del género, los riesgos y efectos secundarios de las hormonas transgénero, las cirugías y las implicaciones para la salud a largo plazo de la medicalización del género».
Tras el anuncio del estreno, el Proyecto Trans Queer, que se describe a sí mismo como una «organización dirigida por negros y trans» con la misión de «proporcionar recursos de empoderamiento de género a las personas LGBTQ+ de todo el mundo», protestó contra la proyección y exigió que se cancelara.
El documental, calificado de «antitrans»
En una serie de posteos de Instagram, la organización afirmó que AMC estaba «cediendo a la reacción violenta de la derecha» al proyectar el documental «antitrans» en cines de todo el país y pidió a sus simpatizantes que tomaran «medidas urgentes» llamando a la dirección ejecutiva de AMC y exigiendo que bloquearan la proyección del documental.
El 17 de junio, la organización anunció que el documental había sido retirado de los cines AMC de todo el país.
«¡Lo conseguimos! La rápida acción de nuestra comunidad es un testimonio del poder de la defensa y de la importancia de alzar la voz contra los contenidos perjudiciales», declaró la organización en un comunicado. «Sus esfuerzos colectivos han tenido un impacto significativo, y la decisión de retirar No Way Back de los cines AMC es un paso hacia el fomento de un entorno más integrador y respetuoso. Gracias por su dedicación y compromiso para crear un cambio positivo».
AMC no ha hecho comentarios sobre la medida, pero Deplorable Films también confirmó en un comunicado que se había retirado el documental en respuesta a lo que calificó de «recientes llamados histriónicos e intolerantes para que se cancelen las proyecciones de esta importante película».
Los distribuidores también apuntaron contra la «absurda» afirmación de que la película es «de derecha», señalando que los cineastas, algunos de los cuales son gays o tienen hijos gays, son «demócratas liberales dedicados y de toda la vida».
«La película no es antitrans, ni siquiera es anticirugía de cambio de sexo; en la película hay personas trans que hablan en contra de la repentina carrera hacia fármacos potentes y cirugías mayores que han [sic] aumentado exponencialmente en la última década, y que estadísticamente han causado mucho más dolor y sufrimiento del que han evitado», dice la declaración.
«Es bastante evidente que quienes emprenden esta cruzada contra esta película no han tenido la cortesía de verla antes de emprender acciones tan extremas para silenciarla», añade.
«Suprimir la libertad de expresión»
Hablando sobre la cancelación del documental en una entrevista con Fox News, Laura Becker, una de las personas trans que aparecen en la película, dijo que equivalía a suprimir la libertad de expresión.
«Creo que es increíblemente peligroso sentar este precedente de supresión de la libertad de expresión, de supresión de puntos de vista que básicamente son impopulares o difíciles de tratar», declaró Becker, que empezó a transicionar de mujer a hombre cuando era adolescente.
Becker subrayó que el documental no tiene ningún objetivo político y que, en cambio, los realizadores intentan concienciar sobre cuestiones de salud mental y ética médica.
«Creo que se están erradicando a gran escala los límites y el sentido común, especialmente en lo que se refiere a la salud evolutiva de los niños», continuó. «Se los lleva por la vía rápida, en un sistema similar a una cinta transportadora, a someterse a operaciones quirúrgicas y hormonales que crean daños permanentes, en lugar de abordar sus verdaderos problemas de salud mental».
La cancelación del documental se produce en medio de un debate en curso sobre la «atención de afirmación de género» entre los menores.
Aunque varias organizaciones médicas importantes, como la Asociación Médica Estadounidense, la Academia Estadounidense de Pediatría y la Asociación Psicológica Estadounidense, han expresado su apoyo a la atención para la transición de género entre menores, argumentando que es segura y eficaz, otros estudios han descubierto que las cirugías transgénero no mejoran necesariamente la salud mental y que, de hecho, pueden hacer que las personas se sientan más solas.
The Epoch Times se ha puesto en contacto con AMC Theatres para solicitar sus comentarios.
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