Un hombre de 73 años solicitó una visa para su esposa y descubrieron que abusó sexualmente de ella desde que tenía 12 años.
Valentín Ortiz, de 73 años, es un ciudadano naturalizado de EE.UU. que vive en Reading, Pensilvania. El hombre originario de República Dominicana, asistió a tramitar una visa en 2018 para su esposa que reside en su país de nacimiento y con quien tiene 2 hijos.
Sin embargo, el trámite se convirtió en una investigación criminal, cuando los agentes se percataron que el hombre presentó documentos al Servicio de Ciudadanía e Inmigración de EE.UU. (USCIS), donde su fecha de matrimonio indicaba agosto de 2013, momento en el que él tenía 65 años y su cónyuge 18 años.
Sin embargo, descubrieron que a partir de 2007, cuando Ortiz tenía 59 años y su actual esposa, apenas 12 años, persiguió y mantuvo una relación sexual con ella viajando frecuentemente a República Dominicana, informó el Departamento de Justicia en un comunicado.
En su solicitud para la visa, realizada el 6 de junio de 2018 en el consulado de EE.UU. en Santo Domingo, Ortiz reconocía haber tenido una relación con ella durante 11 años y que tenían 2 hijos.
Esta relación sexual ilícita llevó a la menor a quedarse embarazada de sus dos hijos, cuando tenía 13 y 15 años, respectivamente.
Ortiz se casó con la joven en Nagua, República Dominicana, el 24 de agosto de 2013, solo tres meses después de que ella cumplió 18 años, describe una declaración jurada que elaboró Kathryn Murray, agente de la unidad de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI), según Univisión.
El 10 de marzo de 2021, Ortiz viajó acompañado de su hija pequeña, al aeropuerto de Nueva Jersey, quien aparentaba ser su nieta, debido a la gran diferencia de edad. Al ser interrogado por agentes migratorios, confirmó varias veces el parentesco con la menor, sin darse cuenta que se autoincriminaba.
En sus declaraciones también dijo que tenía diez hijos en EE.UU., que vivía en Pensilvania con la viuda de su difunto hermano y su sobrino, que era jubilado y había realizado una visita a su madre en República Dominicana, informó el mismo medio.
Al cuestionarlo sobre su joven esposa, el anciano señaló que se encontraba en República Dominicana y que se separó de ella porque lo había engañado.
En noviembre de 2021, Ortiz se declaró culpable de un cargo de viaje en comercio exterior con la intención de participar en una conducta sexual ilícita, y de dos cargos de participar en una conducta sexual ilícita en un lugar extranjero. Fue condenado a cinco años y 11 meses de prisión, y cinco años de libertad supervisada.
«Valentín Ortiz es un depredador sexual que se dirigió a una víctima muy joven y vulnerable, viajando internacionalmente para poder aprovecharse de esta niña sin las mismas consecuencias legales a las que podría enfrentarse en los Estados Unidos», dijo la fiscal federal Jacqueline C. Romero, según un comunicado del Departamento de Justicia.
«Pero como ciudadano estadounidense, se le prohíbe llevar a cabo una conducta tan abominable en el extranjero y, en consecuencia, ahora se le ha hecho responsable de sus crímenes», agregó.
El caso de Ortiz, es parte de un proyecto nacional para combatir la explotación y abuso sexual infantil, lanzado en mayo de 2006 por el Departamento de Justicia y llamado Proyecto Infancia Segura.
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