El régimen chino ha convertido en ley su nueva política de tres hijos, lo que supone el último intento de Beijing por aumentar la población y evitar una crisis demográfica que echaría por tierra sus planes de dominio global.
El Congreso Nacional del Pueblo, la legislatura títere del régimen, enmendó el 20 de agosto la Ley de Población y Planificación Familiar, ley que durante décadas ha permitido al gobernante Partido Comunista Chino (PCCh) dictar el tamaño de las familias en todo el país.
El cambio se produjo tras una enmienda a una política de dos hijos, de 2016, que no logró disminuir la caída de la tasa de natalidad del país.
A partir de 1979, el PCCh inició un «programa de planificación de natalidad» que limitaba estrictamente a la mayoría de las parejas a un solo hijo. Conocida como la “Política de hijo único, se hizo cumplir con fuertes multas, pérdidas de empleo, detenciones, golpizas, esterilizaciones forzadas y abortos forzados.
Los funcionarios chinos y los medios de comunicación estatales dijeron que la política de un solo hijo había evitado “exitosamente” 400 millones de nacimientos en China durante 30 años. Tanto los medios como los funcionarios alegan que la ley ayudó a conservar los recursos naturales, impulsó el crecimiento económico y ofreció «lecciones valiosas» para el mundo.
El régimen relajó la política en 2016 al permitir dos hijos por familia mientras luchaba por hacer frente a una tasa de natalidad que se desploma, una población que envejece y una fuerza laboral que se reduce. La preferencia por los hijos varones también llevó a los padres chinos a abortar o abandonar a las niñas, lo que provocó uno de los mayores desequilibrios de género en el mundo.
El legado de la controvertida política ha seguido acechando a China. Las estadísticas de 2020 mostraron que 12 millones de bebés nacieron el año pasado, un 18 por ciento menos que los 14,6 millones de 2019, lo que la convierte en la tasa de nacimientos más baja desde que el régimen tomó el control de China en 1949.
Hasta 264 millones de chinos tienen más de 60 años, lo que representa casi una quinta parte de la población total del país en 2020, cifra que representa un aumento del 5,44 por ciento con respecto a hace una década. La población activa de China, entre los 16 y los 59 años, se redujo en 40 millones durante el mismo período.
El viernes, la nueva política eliminó una «tarifa de mantenimiento social», una fuerte multa impuesta a los padres por tener hijos adicionales, que en algunas áreas podría representar hasta diez veces el salario anual promedio de un ciudadano. La ley también exige recursos adicionales para el cuidado de los niños en vecindarios y la entrega de licencias por paternidad.
La agencia de calificación Moody’s Investors Service, luego del anuncio de Beijing de la nueva política, en mayo, dijo que, si bien la reforma «podría respaldar la fertilidad, es poco probable que cambie drásticamente la tasa de natalidad nacional».
La tasa de matrimonios en China también ha estado cayendo en los últimos años, lo que las autoridades han atribuido principalmente a la política del hijo único. Los datos del Ministerio de Asuntos Civiles mostraron que el número de solicitudes de matrimonio ha estado disminuyendo durante siete años consecutivos, mientras que la tasa de divorcios ha ido en aumento.
Un informe de 2020 de la Fundación de Investigación para el Desarrollo de China, un grupo de expertos subordinado al Consejo de Estado del país, que parece un gabinete, proyecta que la población de China empezará a disminuir en una década. Predijo que 500 millones de personas alcanzarían 60 años de edad en 2050, lo que representaría más de un tercio de la población china.
El decreciente crecimiento de la población también podría afectar el crecimiento económico a largo plazo de China, según un análisis de febrero de Capital Economics, una consultora de investigación económica con sede en Londres. Dijo que la fuerza laboral que envejece puede afectar la economía del país, obstaculizando la ambición del régimen de superar a Estados Unidos como la principal potencia económica del mundo.
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