Dos residentes de Nueva York fueron arrestados por presunta estafa de 27 millones de dólares a inversionistas a quienes entre otros planes les prometían acceso a políticos prominentes como el expresidente Donald Trump, anunció el 18 de julio el Departamento de Justicia.
Sherry Xue Li y Lianbo Wang, también conocido como Mike Wang, perpetraron un esquema de casi una década de duración, desde mayo de 2013, para atraer a inversionistas a un proyecto ficticio que desarrollaría una institución educativa privada en la que Li era el presidente, según una denuncia revelada el lunes.
La institución, llamada Thompson Education Center o TEC Project en el condado de Sullivan, en Nueva York, se convirtió en una fachada para que Li y otros desviaran fondos de más de 150 inversionistas que se revelaron como víctimas, de acuerdo a la presentación legal.
A través del TEC Project, Li, de 50 años de edad, y Wang, de 45 años, junto con otros conspiradores, recaudaron USD 16.5 millones de los inversionistas a quienes les prometieron una tarjeta de residencia a cambio de invertir USD 500,000 a través del programa de visados por inversión EB-5, así como USD 11 millones de los inversores de la bolsa destinados al proyecto IPO (Oferta Inicial Pública) en el mercado de valores, asegurándoles que se produciría.
Li y otras personas se apropiaron indebidamente y blanquearon al menos USD 2 millones de esos fondos, y gastaron al menos otros USD 2.5 millones en «diversos gastos personales sin un propósito empresarial claro», dice la presentación legal.
Los gastos personales incluyen ropa, accesorios, joyas, alojamiento, viajes de vacaciones, cenas de alto nivel y contribuciones políticas a destacados funcionarios estadounidenses.
Li y Wang fueron acusados de conspiración de fraude electrónico, conspiración de blanqueo de dinero y conspiración para defraudar a Estados Unidos obstruyendo la administración federal de las leyes de financiación de campañas. Ambos son ciudadanos estadounidenses naturalizados, originarios de China.
El fiscal Breon Peace solicitó que los dos fueran detenidos sin fianza, señalando el «importante riesgo de fuga» debido a la gravedad de los delitos y a las «abrumadoras pruebas de su culpabilidad». Además indicó que los dos tienen «vínculos significativos y de larga data» con China, y con los Emiratos Árabes Unidos en el caso de Wang, pero ninguno de los dos países tiene un tratado de extradición con Estados Unidos en caso de que huyan.
Venta para acceder al expresidente
Li y Wang utilizaron el dinero que recibían para financiar contribuciones políticas para acceder a actos políticos y hacerse fotografías con los cargos electos, según los fiscales. Dichas fotografías se convirtieron a su vez en su cebo para atraer más inversiones en el Proyecto TEC.
La pareja y 12 invitados extranjeros asistieron a un evento de recaudación de fondos el 28 de junio de 2017 y se fotografiaron con el entonces presidente, según la presentación legal. A los invitados extranjeros —11 ciudadanos chinos y uno de Singapur— se les cobró una cuota de admisión de USD 93,000 a cada uno. La pareja utilizó entonces los fondos para hacer una donación ilegal de USD 600,000 al Comité Nacional Republicano, quien organizó el evento, dijo el Departamento de Justicia.
Una foto de Li sonriendo al lado de Trump y de la entonces primera dama Melania Trump apareció después en un folleto de marketing de TEC, de acuerdo al documento legal. Wang dijo a un ciudadano chino en 2018 que podía pagar USD 220,000 si quería conocer al presidente y a los miembros del Congreso.
En 2019, Wang envió a un chat de grupo una foto de un nacional chino con Trump en un evento de recaudación de fondos en agosto de 2019, y les dijo que había hecho «todos» los arreglos para la reunión de los dos, dice la presentación. Una persona en el chat invirtió más de USD 200,000 en el Proyecto TEC unas dos semanas después.
La «Disneylandia china»
Alrededor del año 2011, Li y Wang anunciaron planes para construir un parque temático cultural chino llamado China City de Estados Unidos (CCOA), según el expediente judicial. Li promocionó el proyecto como una «Disneylandia china» con un parque de atracciones, mansiones, un centro de negocios, un centro médico, una universidad y viviendas residenciales, con un potencial para atraer a 1.5 millones de visitantes anuales y crear 3000 puestos de trabajo.
Esta propuesta, dice el expediente, se abandonó tras el escepticismo de los funcionarios y residentes locales. En su lugar, Li comenzó a promover una visión de una universidad con fines de lucro, el Proyecto TEC.
A pesar de no contar con la aprobación de la ciudad de Thompson para comenzar la construcción, Li y Wang continuaron asegurando a los inversionistas que el proyecto estaba en camino de desarrollarse, dice el expediente.
Cuando le pidieron actualizaciones en 2019, Li respondió enviando fotos y videos que supuestamente mostraban la construcción del proyecto, mientras que en realidad eran imágenes de una residencia unifamiliar que Li estaba construyendo en la cercana ciudad de Fallsburg.
Ni la residencia de Fallsburg ni la propiedad de Thompson terminaron en ninguna estructura de acuerdo a los datos de marzo de 2022, dijeron los fiscales.
Falsas promesas de tarjetas verdes
Ninguno de los inversionistas del EB-5 recibió una tarjeta verde temporal o permanente hasta la fecha, señala la denuncia. El Servicio de Ciudadanía e Inmigración de los Estados Unidos (USCIS) que supervisa el proyecto EB-5, en cambio, emitió avisos a los inversores de TEC Project desde marzo de 2017 de que podría denegar las solicitudes de tarjetas verdes «porque el USCIS no encontró creíble el plan de negocios de TEC».
De acuerdo a los fiscales, TEC Project prometió construir dos edificios de aulas universitarias, dos centros de actividades para estudiantes universitarios, un centro deportivo, un centro comunitario y seis residencias estudiantiles que implican 132 unidades de viviendas tipo townhouse, 200 apartamentos de dos dormitorios y 50 apartamentos de tres dormitorios.
El USCIS preguntó si ese plan era viable en el condado de Sullivan, un «condado rural sin infraestructuras disponibles para proyectos de alta densidad», de acuerdo a la presentación.
«No contar con un plan para abordar las necesidades básicas de infraestructura de un proyecto de este tamaño en un condado rural proporciona poca o ninguna credibilidad tanto al plan de negocios como a las estimaciones de creación de empleo», escribió el USCIS en la notificación, según la denuncia.
Al menos 26 inversionistas del TEC Project recibieron este tipo de avisos y a 16 de ellos les terminaron con rechazar sus peticiones de permiso de residencia.
A pesar de ello, Li y Wang siguieron solicitando fondos y aseguraron repetidamente a los inversionistas que su inversión les garantizaría una tarjeta de residencia. A varios de ellos les informaron que podrían obtenerla en 9 meses.
Wang manifestó su preocupación por su esquema en un mensaje. «La ley de inmigración de Estados Unidos no permite acuerdos de garantía (…) Esto es ilegal», escribió en un mensaje de texto en julio de 2016, revela la presentación legal.
«Decenas de millones de dólares llegaron de inversionistas y donantes de fachada, que esperaban que su dinero diera frutos. Sin embargo, solo se cumplió una promesa, el acceso al poder político», dijo el director adjunto del FBI, Michael Driscoll, en una declaración. «El dinero extranjero contamina nuestros procesos migratorios y democráticos y debemos hacer todo lo posible por protegerlos».
The Epoch Times se puso en contacto con Trump, con el Comité Nacional Republicano, así como con la abogada de Li, Nora Hirozawa, para pedirles comentarios. El abogado de Wang, James Roth, no pudo ser contactado inmediatamente para recibir sus comentarios.
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