Asesinan un hombre en un autobús horas después de que Metro anunciara «aumento» en su fuerza policial

La alcaldesa de Los Ángeles declaró que "el aumento de los delitos violentos contra operadores y usuarios que hemos observado recientemente es absolutamente inaceptable"

Por Beige Luciano-Adams
17 de mayo de 2024 8:42 PM Actualizado: 17 de mayo de 2024 8:42 PM

LOS ÁNGELES—Un hombre recibió un disparo mortal en un autobús de la ciudad de Commerce el 16 de mayo, pocas horas después de que la alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, anunciara un aumento de la fuerzas policial para hacer frente a la violencia en el asediado sistema de transporte público de la región.

«El aumento de los delitos violentos que hemos visto recientemente contra los operadores y los pasajeros es absolutamente inaceptable», dijo la Sra. Bass durante una conferencia de prensa el jueves por la mañana con funcionarios de tránsito.

La Sra. Bass, que también preside el consejo de administración de la Autoridad Metropolitana de Tránsito —conocida como Metro— ordenó un «aumento inmediato» de la fuerza policial el 15 de mayo para patrullar los trenes, autobuses y estaciones del sistema.

En respuesta a la tragedia del jueves, en la que una persona recibió un disparo mortal en un ataque presuntamente no provocado, Metro dijo en un comunicado que el incidente «ejemplifica cómo la violencia está aumentando en la sociedad en general y salpicando a nuestras comunidades locales».

El Departamento del Sheriff del Condado de Los Ángeles identificó a la víctima como un hombre hispano que fue declarado muerto tras ser trasladado a un hospital local. Los agentes detuvieron a un sospechoso, que presuntamente huyó a pie tras disparar a la víctima con una pistola en el interior del autobús. La crisis de violencia en trenes y autobuses en 2024 ha aumentado la presión para que se tomen medidas de seguridad pública que frenen la crisis y tranquilicen a un público receloso.

El mes pasado, una serie de agresiones a conductores de autobús provocó la modernización de toda la flota de autobuses de la red —que ahora estarán equipados con unidades de cristal inastillable que protegerán completamente a los conductores—, incluido el espantoso asesinato de una mujer de 66 años a manos de un delincuente reincidente a bordo de la línea roja de Metro el 22 de abril. El 13 de mayo se produjeron múltiples apuñalamientos en un periodo de 24 horas, seguidos del tiroteo mortal en Commerce.

El llamado de la Sra. Bass a un aumento de las fuerzas del orden supuso un giro brusco. El mes pasado, alentada por los informes de aumento de pasajeros y la disminución de la delincuencia año tras año, insistió en que Metro era seguro para los pasajeros: «Mi mensaje a la comunidad es que Metro es seguro», dijo a los periodistas.

El jueves, cuando se le preguntó si seguía pensando lo mismo, la alcaldesa respondió: «No, no pienso lo mismo».

La alcaldesa Bass también propuso una moción, que se presentará a la junta la próxima semana, que aumentaría el despliegue diario de personal de seguridad pública —incluyendo agentes de la ley, agentes de seguridad y trabajadores de divulgación— en un 20 por ciento, con un enfoque en la «visibilidad», así como otras mejoras en la recepción celular y las comunicaciones entre agencias.

La propuesta de presupuesto de Metro para 2025 contempla un aumento del 10 por ciento respecto al año anterior, hasta 194 millones de dólares, para contratos con las fuerzas del orden, pero no aumentará realmente el despliegue.

En las redes sociales, el exsheriff del condado de Los Ángeles Alex Villanueva, que en su día supervisó un contrato exclusivo con la agencia de transporte y ha sido un crítico declarado de la tendencia hacia reformas orientadas a la justicia social que pretenden reducir al mínimo la aplicación de la ley, dijo sobre el anuncio de la Sra. Bass: «La desfachatez de los directores [de Metro de LA] no conoce límites. La [alcaldesa Bass] pide un ‘aumento’ de la seguridad pública, siempre que no implique la contratación de más policías».

El Departamento de Policía de Los Ángeles (LAPD), el Departamento del Sheriff del Condado de Los Ángeles y el Departamento de Policía de Long Beach comparten actualmente la jurisdicción sobre el sistema de tránsito.

Metro cuenta normalmente con más de 600 agentes de policía en el sistema diariamente y alrededor de 200 agentes de seguridad de tránsito, según funcionarios de la agencia. La oleada que comenzó el miércoles seguirá aumentando en los próximos días.

La alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, habla en Studio City, California, el 30 de enero de 2024. (John Fredricks/The Epoch Times)

Percepción pública negativa

«No hay ninguna estadística que pueda decir que vaya a superar la percepción que la gente cree», dijo a The Epoch Times el subjefe de la División de Tránsito del Departamento de Policía de Los Ángeles, Don Graham. «Y con todo lo que ha salido últimamente en los medios de comunicación y las cosas que se ven en las redes sociales, se podría pensar que el sistema de Metro se ha convertido en esta especie de distopía».

En una reciente ronda a pie de cuatro horas, dijo, eso fue lo último que vio. «Entregué pegatinas a los niños y vi a familias viajando en metro. Había embajadores dando la mano a todo el mundo. El lugar parecía limpio».

El Sr. Graham dijo que su división haría todo lo posible para proporcionar personal para la oleada, y en las áreas donde pueda ser insuficiente, buscar eficiencia para mantener una presencia mayor y constante.

Por ejemplo, puede haber una manera de mantener a los oficiales de arresto en la línea mientras que un equipo de refuerzo transporta a los sospechosos a las instalaciones de la cárcel y se encarga de las reservas, explicó el Sr. Graham.

Además de las fuerzas del orden, Metro también emplea seguridad privada, o «embajadores» desarmados, que ofrecen ayuda de navegación, así como respuesta ante sobredosis y primeros auxilios, además de otro personal de proximidad en una estrategia de seguridad pública » de múltiples niveles».

Desde 2020, ha habido tensión entre los esfuerzos de los activistas para reducir la presencia policial en favor de un enfoque «basado en la atención» a la seguridad pública, por un lado, y un creciente llamado para aumentar la aplicación de la ley para hacer frente a la crisis de seguridad pública, por el otro.

Metro aumentó la inversión en su enfoque basado en la atención en un 57 por ciento o 69.2 millones de dólares en los últimos dos años, según la agencia, añadiendo personas sin hogar y de extensión comunitaria, profesionales de la salud mental, así como agentes de seguridad de tránsito y embajadores.

Y en junio, el Departamento de Salud Mental del condado empezará a formar a embajadores y trabajadores de atención a las personas sin techo en Metro para mejorar la respuesta, según la supervisora del condado de Los Ángeles, Kathryn Barger.

Cada vez más, los funcionarios públicos reconocen que los problemas relacionados con el número desenfrenado de personas sin hogar, la drogadicción no tratada y las enfermedades mentales son responsables en gran medida de la crisis actual del sistema de transporte.

Tanto Stephanie Wiggins, consejera delegada de Metro, como Barger señalaron el jueves la disfunción generalizada que afecta al sistema de transporte.

Tomando nota de los datos que indican que las enfermedades mentales no tratadas son un factor que contribuye a muchos de los recientes ataques no provocados, la Sra. Wiggins dijo: «Metro es una agencia de tránsito, no una agencia de servicios sociales».

«A pesar de los recursos de seguridad que hemos asignado, sigue habiendo un nivel muy real e inaceptable de violencia y un flagrante desprecio por la ley y nuestro código de conducta», dijo Barger, que también forma parte del consejo de Metro.

Sugirió que la atención a la seguridad pública debería haberse prestado hace tiempo, pero adoptó una postura intermedia entre el aumento de la presencia policial y la continuación del enfoque múltiple de la agencia. «No podremos solucionar este problema a base de arrestos, pero las fuerzas del orden son un recurso esencial que Metro necesita para recuperar nuestro sistema», afirmó.

Viajeros esperan un tren del metro de Los Ángeles, California, el 10 de abril de 2024. (John Fredricks/The Epoch Times)

Enfoque de seguridad pública

En la conferencia de prensa del jueves, la alcaldesa Bass dijo que no veía la crisis actual como una acusación contra el enfoque múltiple de la agencia para la seguridad pública, señalando que la delincuencia sigue en una tendencia a la baja desde hace años, y que viene en oleadas. «Queremos continuar con nuestro enfoque, pero cuando se produce un pico se responde agresivamente», dijo.

En 2022, Metro retiró la aplicación de las tarifas y el código de conducta de la competencia de las fuerza policial, trasladando la responsabilidad a sus agentes de seguridad de tránsito. Graham, el subjefe de la policía de Los Ángeles, sugirió que esto eliminó parte de la capacidad de las fuerzas del orden para iniciar investigaciones penales sobre comportamientos más graves que empiezan con una sospecha razonable o la evasión del pago del billete.

Desde marzo de 2023, las fuerzas del orden han reanudado la práctica de controlar a las personas para comprobar si llevan tarjetas de transporte, y varios funcionarios han pedido que se refuerce la aplicación de la ley contra la evasión de tarifas y se endurezcan las barreras de entrada.

En la reunión del jueves del Comité de Seguridad Operativa y Atención al Cliente de Metro, varios activistas se pronunciaron en contra de un contrato previsto para renovar el sistema TAP, o tarjeta de entrada, y pidieron en su lugar un sistema completamente gratuito.

«Los embajadores son la medida preventiva en la que tenemos que invertir», afirmó Alfonso Directo, responsable de la organización sin ánimo de lucro Alliance for Community Transit-Los Angeles (ACT-LA). Añadió que el aumento de la presencia policial no resolverá los problemas de seguridad subyacentes ni las «causas profundas» de la crisis, ni evitará los incidentes.

Esas afirmaciones de que la policía no previene los delitos son convenientes, dijo el subjefe Graham, porque no hay estadísticas que muestren cuántos delitos no ocurrieron porque la policía no estuvo presente.

«Pero sabemos, cuando detenemos a la gente y comprobamos sus antecedentes penales, cuántas veces han sido detenidos y arrestados, así como, cuántas veces han sido arrestados y puestos en libertad», dijo el Sr. Graham.

«¿Cuántas veces nos necesitan para atrapar a este pez?».

Los delincuentes reincidentes han estado implicados en varios de los recientes ataques de alto perfil, incluyendo el asesinato del 22 de abril.

En la reunión del comité del jueves, Paul Krekorian, presidente del Consejo Municipal de Los Ángeles y miembro de la Junta Directiva de Metro, preguntó sobre los esfuerzos para mantener a los delincuentes reincidentes alejados del público, sugiriendo que, a diferencia de las infracciones del código de conducta, los que cometen delitos violentos deberían estar sujetos a la regla de un golpe y estás fuera.

Parte del problema, según reconocieron funcionarios de la Junta, es la falta de comunicación entre organismos. En la actualidad, las fuerzas del orden que patrullan el sistema Metro tienen acceso a una base de datos de delincuentes que muestra si alguien tiene una orden de alejamiento, pero no al sistema judicial de la MTA, que puede haber registrado múltiples delitos o haber expulsado a alguien del sistema.

«Tenemos que aclarar muchas cosas», dijo Graham. Su división tiene actualmente una lista de alrededor de 20 individuos que han sido detenidos varias veces en los últimos 12 meses por delitos contra las personas que a la policía le gustaría que Metro considerara vetar.

«Si usted fue detenido varias veces en el sistema, no estoy hablando de varias veces en la sociedad, estoy hablando de varias veces en el sistema de MTA, entonces sí», dijo el Sr. Graham, «ciertamente creo que usted es merecedor de ser considerado como alguien a quien no se le debería permitir volver aquí de nuevo, porque usted es una amenaza para el público».

Un autobús del Metro de Los Ángeles pasa por delante del cuartel general de la Policía de Los Ángeles, en el centro de la ciudad, el 8 de noviembre de 2022. (John Fredricks/The Epoch Times)

Estadísticas de delincuencia

Según los datos de Metro, los «delitos contra las personas» —cosas como homicidios, violaciones, agresiones con agravantes— disminuyeron precipitadamente un 40 por ciento en lo que va del año con respecto al año anterior. Y en marzo, la misma categoría descendió un 19 por ciento.

En la ciudad de Los Ángeles, los delitos violentos se han reducido un 48 por ciento en el sistema de transporte público, según la policía de Los Ángeles.

Pero eso no proporciona el panorama completo.

El total de delitos en todo el sistema ha aumentado en los tres primeros meses de 2024 en comparación con el mismo periodo de los últimos años (1719 en 2024, frente a 1034 en 2023, 833 en 2022, 565 en 2021 y 660 en 2020), según datos de Metro. Gran parte de ello se debe a un aumento de los delitos contra la sociedad, como los estupefacientes y el allanamiento de morada.

Y de abril de 2023 a marzo de 2024, los delitos en todo el sistema aumentaron un 78 por ciento con respecto al mismo periodo de 12 meses del año anterior, según los informes de Metro.

El número de usuarios también está aumentando, después de mínimos históricos durante la pandemia, alcanzando casi un millón de usuarios al día en abril.

Wiggins señaló el jueves que abril fue el decimoséptimo mes consecutivo de aumento interanual del número de usuarios.

«No juzgamos nuestro éxito por las estadísticas: necesitamos un sistema que no sólo sea seguro, sino que se sienta seguro», afirmó.


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