Un asesor designado por la corte de Estados Unidos en el caso contra el anterior asesor de seguridad nacional Michael Flynn, argumentó en un escrito fechado el 10 de junio que el juez debería rechazar la moción del gobierno de desestimar los cargos.
El exjuez federal John Gleeson, escribió que los argumentos que el Departamento de Justicia (DOJ) presentó en su petición de desestimar el caso no son creíbles y acusó al gobierno de actuar bajo motivos políticos para ayudar a un aliado del presidente Donald Trump.
«El Gobierno actuó de manera muy irregular para beneficiar a un aliado político del Presidente. Los hechos de este caso superan la presunción de regularidad. Por lo tanto, la Corte debe negar la moción del Gobierno para desestimar, adjudicar cualquier moción restante, y luego condenar al acusado», escribió Gleeson.
El juez Emmet Sullivan nombró a Gleeson como amicus curiae después que el Departamento de Justicia pidiera la desestimación de los cargos contra Flynn. Sullivan también encargó a Gleeson que determine si el tribunal debía pedir a Flynn que explique por qué no debía ser acusado de perjurio. Gleeson determinó que Flynn cometió perjurio, pero aconsejó que Sullivan lo tuviera en cuenta al sentenciar a Flynn, en lugar de presentar un cargo por perjurio.
El Departamento de Justicia pidió que se desestime el caso contra Flynn el mes pasado, diciendo al juez que el FBI no tenía base para realizar la entrevista durante la cual Flynn supuestamente mintió a los agentes federales. Flynn se había declarado culpable de los cargos, pero más de dos años después retiró su declaración. Flynn argumentó que sus abogados tenían un conflicto de intereses en un caso relacionado y que el abogado especial lo presionó para que se declare culpable amenazando con procesar a su hijo.
Los abogados de Flynn pidieron a un tribunal superior que intervenga en el caso después de que Sullivan procedió a presentar la solicitud de retirar los cargos. En una orden inusual, un panel de tres jueces del Tribunal de Apelaciones de Estados Unidos para el circuito de D.C., pidió a Sullivan que explique sus acciones y que los abogados de Flynn y el DOJ intervengan. Los argumentos orales sobre la apelación están programados para el viernes.
Documentos recientemente desclasificados muestran que la investigación de Flynn fue discutida en los más altos niveles del gobierno de Barack Obama, incluyendo al mismo presidente Obama. El entonces director del FBI, James Comey, aprobó el cierre del caso contra Flynn ya en diciembre de 2016. El FBI presentó los documentos formales para cerrar el caso el 4 de enero de 2017, pero el caso se mantuvo abierto por el agente del FBI Peter Strzok a instancias de la alta dirección. Al día siguiente Obama discutió personalmente el caso con los altos funcionarios.
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